Unos días después, pude salir del hospital. Sentía que mi vida tomaba aún más sentido luego de todo esto. Me faltaba mucho que analizar y muchas cosas que comprender, pero no me sentía tan descolocada como sería en un pasado no tan lejano.
Aby y Ted por fin se dieron cuenta de su amor mutuo y están juntos como pareja, y son el motivo de burlas en nuestro grupo. Son muy melosos, la verdad.
Steve y yo no somos nada, por ahora.
Charlie y Damian se han puesto más protectores conmigo en cuanto a los lugares donde voy y si iré sola. No me molesta la verdad, así de plano ven lo que trabajo.
Sin Max, los del equipo y yo seguimos las grabaciones, todavía Ted y Steve no saben nada, cuídame el secreto por favor.
Quitando el lado "Humano" de la historia, aprendí más de los Scelestos. Son sólo unas personas frustradas que se regocijan haciendo caos y borrando la vida de los demás, así no tener piedad ante los próximos.
Los Phantasiae que quedan en el mundo son muy pocos, pero a diferencia de los Scelestos; somos más puros porque no convertimos a los mortales, somos magos de sangre.
Todo me da vueltas, hay muchas cosas que tengo que acertar.
En fin, volviendo al presente. Llegó una noche y me acosté en la cama, solo costó rozar la almohada y ya me encontraba dormida.
En este sueño estaba en una especie de calle, cuando divisé vi que era una de las calles que tiene Londres, estaba justo al lado del Big Ben, solo que estaba en medio de la carretera. Habían personas conmigo, hacían magia la igual que yo, estaban mis primos también. No pude ver más porque una nube negra y densa se acercaba hacia nosotros. Como inercia empecé a correr.
Justo antes de que me alcanzara dicha nube, pude ver que una flor azul cayó sobre mi hombro. Me desperté sobresaltada.
¿Qué significaban esas flores?
Y la otra pregunta era.
¿Eso era el futuro?
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Phantasiae
ФэнтезиEva Collins, una chica de 16 años va a Londres para hacer un curso de fotografía y cine. Más adelante en su estancia, se entera de cosas sobre su familia y ella misma que la dejarán en gran duda sobre su origen. ¿Te atreves a acompañarla?