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Al llegar la noche, Raoul estaba bastante cansado. Pero no podía acostarse aún. Estaba con su pijama sentando en el pequeño sofá y, sobre sus piernas, tenía su portátil. Agoney hacía un rato que había dicho que se iba a duchar, y todavía seguía en el baño, aunque ya había cerrado el grifo.

La verdad es que se encontraba en aquella situación por no ser un poco más responsable. Debía haberse visto los vídeos de sus wolfies que querían optar al premio de las entradas dobles a su concierto de Barcelona, eran vídeos de canciones propias, la cual, la más original y que más le gustara a Raoul se llevaba el premio. Y todavía no lo había hecho. Debía anunciar el ganador o ganadora hoy mismo, a lo más tardar por la noche. Responsable no es desde luego una de sus cualidades.

Estaba viendo el vídeo de una chica que había grabado ella misma el sonido del violín y del piano, además de su voz y su propia canción cuando Agoney apareció en el salón.

- ¿No te vas a dormir? Mañana es tu gran día, debes estar descansado.- le preguntó Agoney colocándose delante suya.

- Tengo que elegir al ganador o ganadora de las entradas dobles en Barcelona y... bueno, he recibido muchos vídeos que cumplen todos los requisitos y... lo he ido dejando cada vez más y... voy un poco tarde.- le explica Raoul.

- ¿Quieres que te ayude?- se ofrece Agoney.

Raoul, internamente, rezaba porque se ofreciera a ayudarle. Así que como respuesta, le hizo sitio en el pequeño sofá y dió palmaditas en el asiento que le correspondía.

Estuvieron haciendo las fases finales viendo los vídeos, cada vez iban descartando más y más. Y la verdad es que hacerlo juntos era divertido y menos latoso. Porque, aunque Raoul ame a sus fans y ame ver sus canciones y covers, como él ya le había dicho a Agoney, iba tarde.

Pronto llegaron al top 5, la final, deberían elegir una de ellas. Y anunciarlo antes de media hora para no incumplir el plazo del concurso.

- ¿Cuál es la que más te gusta a ti?- le pregunta Raoul, esperando que le haga más fácil la tarea.

- Este chico... su canción está en catalán. No entiendo todo lo que dice, porque no sé catalán, pero sin saberlo es el que más me transmite. Para mí su canción lo tiene todo. Y eso que el resto son impresionantes también. Tienes fans muy talentosos.

Agoney señaló al único chico del grupo. A Raoul le sonaba el nombre del chico, pero no sabía de qué. Pinchó de nuevo en su vídeo, quizás de verlo en todas las rondas. Y fue traduciéndole a Agoney la letra de la canción.

- Quiero verte, siguiendo de cerca hacia dónde va el viento, pero también quiero verte haciendo conciertos hasta que no puedas más.- comenzó a cantarle la traducción. La había escuchado tantas veces que se la sabía de memoria.- Tengo una extraña sensación, a no poder ir a mejor, pero es que contigo todo va perfecto.- las palabras le salían solas, y poco a poco, casi sin quererlo se encontró cantándole a los ojos a Agoney y, de algún modo que ninguno de los olvidará jamás, estaba siendo algo muy íntimo con un significado mucho mayor que ellos dos.- Quiero verte, igual que el primer día de OT. Cantando canciones de la Judith, del Kanka como si contases chistes. Y es que todo lo haces tan fácil... como pequeño.- de algún modo, a pesar de estar compuesta platónicamente para una artista, las palabras del chico, les encantaba la canción.- Pero tú te haces mayor, hiciste 19 a medianoche. Ven conmigo esta noche que quiero verte soplando las velas del pastel. Quiero verte cada día como si fuese ayer. Quiero verte siguiendo de cerca hacia donde va el viento. Pero también quiero verte haciendo concierto hasta que no puedas más. Tengo una extraña sensación a que no puede ir a mejor, es tan fácil. Quiero verte igual que el primer día aquí.

Los últimos acordes suenan, pero Agoney y Raoul no eran capaz de dejar de mirarse a los ojos. Como la noche anterior, el aire se espesó en la pequeña habitación y la respiración se les dificultó. Pero de pronto, el vídeo siguió:

- Soy Alfred García y este es mi tema "Et Vull Veure". ¡Espero que te guste Raoul!- dice un chico feliz a la cámara.

El clima se rompe, devolviendo a los dos chicos a la realidad.

- Creo que tienes buen oído y buen gusto musical.- le dice Raoul a Agoney tras aclararse la garganta.- Yo creo también que Alfred se merece las entradas.

Se quedaron en silencio mientras Raoul anunciaba el ganador en sus redes sociales y daba las gracias a todos los participantes. Agoney estaba intentando asimilar lo que acababa de ocurrir. No tenía claro que había sucedido, pero tenía claro que había sido algo especial y único. Y la próxima vez que escuchase "Et Vull Veure" iba a recordar este íntimo momento que acaban de compartir Raoul y él.

Raoul, por su parte, se escondía delante de la pantalla del portátil para no mostrar su rostro enrojecido a Agoney. Desde que el chico canario de los rizos llego a su vida se ha enrojecido más que en un año. Y ni tiene explicación racional alguna.

De pronto, Raoul cierra el portátil, sacando a Agoney de sus reflexiones. Se encuentra con el rostro sonriente del chico que le ha acogido en su casa y le ha dado la oportunidad de su vida.

- Gracias por ayudarme, Agoney.- le dice, casi murmurando.

- Puedes llamarme Ago.- le contesta Agoney. Las palabras se le escapan casi sin querer, pero no se arrepiente.

- Creo que debería irme a dormir. Mañana va a ser un día con muchas pero muchas experiencias fuertes.- dice Raoul pero no se mueve de donde se encuentra, espera, ansía que Agoney le pide que se quede con él.

- Llevas razón.- le dice Agoney, comprendiendo lo que dice, sabe que mañana tiene que estar al ciento por cien de su rendimiento.

Es él el primero en levantarse, y Raoul le imita, cogiendo el ordenador portátil de su regazo, bajo su bazo. Se dirigen en silencio hasta sus habitaciones y, antes de cerrar, se desean buenas noches.

En Barcelona, un chico estaba casi de fiesta. Incrédulo y, prácticamente, eufórico. No tenía a nadie con quien compartir su alegría, pues su compañero de piso no estaba allí y no vivía con su familia. Su ídolo, del que era prácticamente el mayor fan, sus compañeros de Twitter lo pueden corroborar, le había elegido para cantar su canción, de creación propia, en un concierto en el Palau. Juntos. Estaba pletórico.

Sin embargo, en su comunidad de Twitter estaba recibiendo muchísimos mensajes de felicitación, sorpresa y apoyo. Algún que otro pidiendo que le invitara al concierto con él. De pronto, le llega un mensaja directo de una persona que no conoce, y eso le extraña. Se trata de una chica llamada Mireya. Se dedica a mirar las fotos que tiene en su perfil, y, llegando casi a los principios de la cuenta, encuentra una foto que le hace encajar todas las piezas del puzle: unos jóvenes Mireya, Alfred y Raoul, con el pie de foto "mis músicos favoritos, con vosotros las clases del conser se hacen más amenas". Entonces la recuerda a ella. Ella era la tercera mosquetera, siempre iban los tres juntos a todos lados en el conservatorio de música, eran amiguísimos. Decide leer entonces el mensaje:

"Hola Alfred. No sé si te acordarás de mi, soy Mire. Éramos amigos en el conservatorio. Sé que seguramente me dirás que no, pero por intentarlo, que no quede. Me gustaría ir contigo al m&g de Raoul. Yo sigo en contacto con él pero no vamos a poder vernos sino es de esta forma. Te lo pido como un favor personal. Un besito, una malagueña que te echa de menos."

Alfred se quedó muy sorprendido. ¿Mireya y Raoul seguían siendo amigos? Él juraría que Raoul no se acuerda de él. Eso le dolió bastante, pero aún así contestó:

"MIREEEEEE, QUÉ DE TIEMPOOOO. Hace mucho que no nos vemos :(. Por eso te invito a venir al M&G de Raoul conmigo y así nos ponemos los tres al día. Un besito guapa".

Quiero agradeceros a todas y cads una de las personas que leéis mi fanfic. Ha tenido muy buena acogida y espero que os esté gustado tanto como a mí escribirlo 💜💛

Limerencia |RagoneyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora