Capítulo 1

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—No gracias, Max— rechacé la comida que me habían dado, ya ni ganas de comer tiene uno pensando en los problemas de todos los días

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—No gracias, Max— rechacé la comida que me habían dado, ya ni ganas de comer tiene uno pensando en los problemas de todos los días.

Me llamo Marinette Dupain Cheng, mi madre murió cuando yo era pequeña y aún a mis diecisiete años no lo puedo superar. Mi padre es una persona muy buena y comprensiva pero sus años y su enfermedad no ayuda mucho con mi crianza.

En éste momento estoy sentada en la mesa de mi casa rechazando cada plato que me sirve un amigo de mi papá, no puedo comer sabiendo que a la única persona que tengo en este mundo le quedan pocas horas de vida.

—Vamos, tienes que comer algo pequeña— dijo el castaño sentándose a mi lado.

—No quiero— dije rechazando la comida.

―Te enfermarás― me advirtió.

—¿Qué sentido tiene? Mi papá ya no estará y si me enfermo moriré y seré feliz allá arriba y no aquí sola.

―No seas pesimista— dijo mientras acomodaba un cabello que caía por mi frente―. Eres hermosa y me da mucha tristeza verte mal.

—No puedo estar bien si mi papá está al borde de la muerte y no sé con quién quedaré o que haré de mi vida.

—Con alguien que pueda cuidarte muy bien, eso lo decide asistencia social.

No pudimos seguir hablando ya que la tos incontrolable de mi papá interrumpió la charla.

—Quédate afuera— me ordenó cerrando la puerta de la habitación de mi papá.

Me senté en el piso a pensar que iba a ser de mi cuando ya no tuviera a mi papá, cuando todo fuera mi peor pesadilla más que mi vida.

°°°

—Lo siento mucho— dijo abrazándome.

—Dime que no murió— me levanté y corrí hacía donde estaba mi papá acostado en su cama— ¡No, papá!— exclamé agarrando su mano—. Habla, vamos, no te irás, dime que te quedarás y que todo estará bien cuando despierte, si es un sueño.

—No lo es— dijo Max sosteniendo mi otra mano.

—¡No!— grité desbordando en lágrimas.

Todo mi mundo se vino abajo al escuchar esas dos palabras "lo siento".

°°°

Desperté entre cajas y polvo por todas partes.

—¿Qué sucede?— pregunté a un hombre que llevaba una caja.

La Bella y la Bestia [AU Adrinette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora