Capítulo 31

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Luego de calmarme y destaparme la nariz, pude sentir a Adrien hablar, pero no estaba solo

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Luego de calmarme y destaparme la nariz, pude sentir a Adrien hablar, pero no estaba solo. Su supuesto amigo llegaba mañana, no podía estar aquí, justo ahora.
Decidí que capaz para relajarme debería tomar una ducha, aunque esta mañana ya lo había hecho, necesitaba otra.
Me despojé de mi ropa en solo unos segundos y entré a la tibia ducha. Luego de diez minutos, salí y me vestí con lo mismo que llevaba antes pues solo lo había usado durante unas horas.
Tomé valor para salir del baño y fingir que todo estaba bien. No iba a hablarle a Adrien por más que le
había prometido fingir ser su novia. Él no había sido nada bueno conmigo y de eso me vengaría.

—Marinette— dijo Adrien cuando me vio salir del baño. Un pelirrojo a su lado volteó a verme y no tardó en sonreír.

—No, mi gemela— dije molesta. Adrien arrugó la nariz en señal de enojo—. ¿Necesitas algo que tanto me miras?— pregunté. El amigo de Adrien rió con ternura.

—Si, necesito que tú y yo hablemos ahora mismo— se levantó del sillón y me jaló hasta el baño—. ¡Ya voy para allá Nathaniel!— le gritó desde allí—. ¿Qué es lo que te ocurre?— preguntó enojado.

—¿A mi?— hice un gesto con la mano—. Disculpa Adrien pero si mal no recuerdo hace menos de media hora estábamos peleando— dije casi en un grito.

—Habíamos quedado en algo— me dijo casi suplicando—. Yo te llevaba al cine y a comprar ropa y tú te comportabas cuando Nathaniel estuviera aquí— hablaba despacio y con tranquilidad—. Vamos Marinette, no me falles— suplicó.

—Adrien, nosotros habíamos quedado en que iba a comportarme como tu novia, mañana— aclaré—. ¿Y sabes qué? Hoy no es mañana— dije con enojo.

—Y lo sé, Marinette— dijo rápidamente—. Pero el llegó hoy porque quería darme una sorpresa, que no fue nada más y nada menos que una gran molestia— dijo y tragó sonoramente—. Por favor.

—No Adrien, yo voy a ser mala como tú lo eres conmigo.

—Te compensaré, lo prometo— dijo tomando mi mano—. De verdad, no vamos a pelear nunca más y seré como el novio perfecto que tú tanto buscas, pero por favor— apretó mi mano esperando una respuesta.

Y es que no voy a mentirles, me gusta verlo sufrir como él me hace sufrir a mí. No se merece que lo ayude, estoy en lo correcto, pero si él promete lo que está diciendo, pues claro que aceptaré.

—¿Cómo se qué no me mientes?

—Porque de verdad quiero ver a mi hermana y si no finjo que estoy de novio contigo, nunca la veré. De verdad, soy capaz de hacer mucho por ella y si tú me permites también podré ser bueno contigo, Marinette no me arruines la vida.

—Tú me arruinas la vida— dije y me zafé de su mano.

—Ayúdame— mordió su labio inferior.

La Bella y la Bestia [AU Adrinette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora