Un poquito pasado... pero quiero dedicarle este capítulo a todas las mujeres que me leen, esas que me dejan para la noche en su momento de tranquilidad, o algunas de mañana para comenzar el día, y roban unos minutos valiosos para leerme.
Ser mujer es mucho más que tener ovarios o al menos eso escribe Megan Maxwell, ojalá todas tuviéramos la valentía de las mujeres de muchos libros, pero al menos rescatar algo importante. Quiéranse, Ámense, valórense y todo será mirado desde otra perspectiva.
Sin ustedes y sus valoraciones no hubiese seguido escribiendo.
Gaspar Ferrada
Jamás había tenido una navidad así, de eso estaba completamente seguro. Sus padres trataron de sonreír y fingir que nada pasaba, pero lamentablemente Emilia no había querido estar con ellos en ese día especial, por tener una visita no deseada por ella.
Diego intentó hablar con ella, hasta él fue y quiso decirle algo, pero Hugo apareció quitando el momento de intimidad, y todo su buen humor se esfumó. Conversó con todos en la casa, y les contó que Valentina jamás había tenido una navidad decente. Pero ni siquiera tuvo necesidad de decir más, ella ya se había ganado el cariño por sí sola.
Ella le pidió que le llevara los regalos envueltos al árbol de navidad, pero entonces se fijó que aún quedaba uno encima del escritorio.
-¿Y éste, osita?- Ella estaba maquillándose en el baño, pero sacó la cabeza y negó con ella.- ¿Para quién es?
- Para Vicente, es una ridiculez...- Gaspar la quedó mirando por unos segundos, y se acercó.
- ¿No has pensado que...?
- ¡Gaspar!- Lo gritó su madre desde abajo, y puso los ojos en blanco.
- No para de gritarme...
- Vete, yo bajo de inmediato.- Él asintió y le dio un pico en los labios, no podía resistir la tentación de hacerlo. Es que verla en su casa, con esa sencillez tan característica de ella, le removía las tripas. Jamás imaginó sentir todas esas cosas por una sola mujer, siempre le parecía irreal verlo en otras personas, pero ella había sido capaz de cambiarlo. Parchar su corazón, y mirar adelante. Continuar, algo que la rubia que lo esperaba a los pies de la escalera al parecer no tenía idea. No quiso transformar tanto su semblante al verla, pero es que le volvía a remover el pasado, y eso lo descolocaba.
-Hola, Gaspar.
- Hola, Cami.- Se acercó pero alcanzó a correr la cara, para que no le plantara un beso en la boca.- ¿Qué haces?
- Sólo quería darte un beso, de navidad... No me hagas esto... Por favor...- Su súplica lo dejó mudo, su ceño se frunció y se le apretó la garganta al ver las lágrimas en ese rostro nuevamente.
- ¿A qué viniste? Camila, entiende. Te hace mal verme... no es sano que quieras besarme, no es bueno.
- No quiero, no puedo... no puedo estar lejos sabiendo que estás a pasos de mí. ¿Por qué no lo entiendes tú?
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Sabor a Mar [Completa]
RomancePorque en la vida nunca bastaba, Gaspar creía conocer la felicidad plena junto a su novia, pero un día se da cuenta que nada de eso es real, anhela nuevamente esa libertad, ese deseo de volver a ser como antes. Dejando atrás una ciudad que lo vio na...