Porque en la vida nunca bastaba, Gaspar creía conocer la felicidad plena junto a su novia, pero un día se da cuenta que nada de eso es real, anhela nuevamente esa libertad, ese deseo de volver a ser como antes. Dejando atrás una ciudad que lo vio na...
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Valentina Fuentes (Mallorca)
Al cerrar la puerta, comprobó su estado de alteración, su respiración parecía entrecortada, subió las escaleras a paso lento, y cuando llegó a su habitación se recostó con una sonrisa embelesada. Miró el celular y vio un número ahora desconocido en la mensajería, pero sabía quién era.
"Desbloquea"- Le dieron ganas de reír, entre tanta conversa le había confesado que lo había bloqueado de todas las redes sociales, no porque temiera que él la hablara, si no que ella lo buscara. Pero eso no se lo dijo. Cuando hizo lo que le pedía, miró el whatsapp, y observó la foto de perfil que tenía y quiso gritar de felicidad. Momentos antes había tomado una foto con su Iphone de la noche, y ahora tenía a las estrellas de perfil. Ese simple gesto la exaltó y le dejó un dulce sabor en la boca. Un cosquilleo interminable le hizo mirar "En Línea".
Pero no fue capaz de escribir nada, cuando vio "Escribiendo" sus nervios afloraron. Pero luego de unos segundos leyó.
"Buenas noches"
Si existía la mera posibilidad que ella no se haya enamorado de él antes, ahora sentía todo su cuerpo exudar amor por él. Pero tampoco estaba dispuesta a confesarlo.
***
Al día siguiente Camila andaba como loca, mientras que ella recibía una y otra vez mensajes de Gaspar, le había contado a su hermana el desastre de cita con Gabriel, pero omitió todas las partes en las que había aparecido Gaspar. Como a ella no le gustaba mucho ese movimiento en la casa, tomó desayuno con sus padres, y se fue donde los vecinos a visitar a Emilia y Luz.
Estuvo media mañana ahí, y cuando su hermana la llamó para que le ayudara con algunas cosas, se fue. Estaba por salir de la casa, pero Isabel la llamó desde la cocina.
-Buenos días.- Dijo besando su mejilla, la madre de Gaspar estaba sola en la cocina tomando desayuno.
- Buenos días, cariño. ¿Cómo has pasado? ¿Qué tal todo?
- Muy bien, todo tranquilo, estoy muy feliz a decir verdad.- Dijo sonriendo, entonces la cara de la mujer adulta, se convirtió en una sonrisa amplia.
-Me alegro, hija.- Conversaron algo más y se despidió de ella recibiendo una nueva llamada de Camila. Iba cruzando la puerta de la cocina cuando Isabel la sorprendió con su pregunta.- ¿Tiene algo que ver Gaspar con la bella sonrisa que tienes hoy?
No pudo responder nada, la sonrisa la pilló desprevenida hasta a ella, y corrió a la salida. ¿Tan evidente era?
"Isabel me acaba de decir algo raro".-Le escribió
"¿Qué es raro para ti?"- Gaspar como siempre haciéndola reír.
"¿No la viste hoy?" le preguntó.
"Sí, nos vio anoche llegar y salir a tu casa. ¿Qué te dijo?"- No le diría lo que le había preguntado Isabel.