⟦ Sɪɴ Pᴀʟᴀʙʀᴀs ⟧ ~ᴷᴼᴼᴷᵀᴬᴱ~ ᵒᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉ

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¡AVISO!
Ayer publiqué un capítulo, pero Wattpad no notificó nada.

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«Cinco»
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  Un fuerte pitido.

  Aquello era lo único que escuchaba desde que se había encerado en el cuarto del baño junto a JiMin y YoonGi.

  Los labios del niño mayor al lado de su hijo se movían de forma grotesca, indicándole que gritaba muy fuertemente hacia él. Ladeó su rostro confundido frunciendo su ceño sin entender nada.

  ¿Por qué no podía escuchar lo que decía el YoonGi?

  Desvió su vista hasta su pequeño pelinegro, viendo que este forcejeaba con su brazo, en un vano intento de levantarlo.

  De su labio inferior la sangre se deslizaba por toda su barbilla mientras que las manos de su pequeño hijo abandonaban su brazo para tratar de hacer que soltase su labio, pero no estaba consciente de nada.

  Mucho menos, de la mirada acuosa del otro pelinegro mirando la escena que armaba junto a JiMin, dejando de gritar, lograba deducir al no ver que sus labios se movían.

  Continuó lastimándose, con la mirada perdida en algún punto del cuarto, los sollozos ni siquiera salían, simplemente no podía sentir nada más que un fuerte vacío que amenazaba con llevarse todo si no reaccionaba.

  A su alrededor, las cosas se movían en cámara lenta, YoonGi abrazando a JiMin mientras éste soltaba hipidos mudos con un rostro totalmente afligido.

  TaeHyung frunció levemente su ceño, se sentía como el espectador de una película, la sensación de que, aunque hablase no podía ser escuchado.

  Parpadeó, sintiendo que ese simple movimiento tardaba más de diez segundos en ser ejecutado y de repente un ruido sobresalió entre aquel pitido interminable.

  Al instante las cosas parecieron volver a la normalidad junto con los latidos desesperados de su corazón y su cerebro que se negaba a procesar la información, a sabiendas de que aquel fuerte ruido fue un disparo, seguido de dos más casi al instante.

  Dejó de morder su labio para sentir que sus ojos se llenaban de lágrimas.

  Tanto JiMin como YoonGi se apegaron a su cuerpo, y como pudo los rodeó dejando que la salada agua bajara por sus mejillas sin reparo alguno llegando a mezclarse con la sangre en su barbilla.

—Le dispararon a Kookie. — escuchó que sollozaba el de tez blanca.

  Su cuerpo se tensó de manera involuntaria y no logró encontrar la fuerza necesaria para responder al desgarrador llanto de ambos niños.

  Su corazón seguía latiendo de forma irregular junto con su respiración, su cuerpo temblaba y no podía hacer nada más que abrazar a los dos pequeños, sabía que era no era seguro salir, muchos menos siendo un simple Omega.

  Mordió el interior de su mejilla para evitar lastimar aún más su labio y acomodó su cuerpo para poder sostener a ambos niños.

  Un sollozo salió de su boca y escondió su cabeza sobre el hombro de JiMin a su derecha, mientras trataba de no ejercer tanta presión en el hombro de YoonGi.