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«Conveniente»
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  El silencio se asentó en la habitación, siguiendo el increíble juego de las confesiones dentro de aquel departamento en medio de la fría noche.

  El ruido de los autos se asemejaba de gran manera a un simple silbido entre ambas mentes llenas de ideas.

  El Omega miraba fijamente sus manos, sin siquiera tener la mínima intención de mirar al Alfa, quien de igual manera se encontraba centrado en sus memorias y planes. 

—Creo que... — carraspeó levemente —Creo que deberías cargar el celular. — terminó por murmurar JungKook.

  El de hebras castañas asintió de manera automática y sacó de uno de sus bolsillos el aparato.

  Dudoso, el Alfa lo tomó entre sus dedos y fue rápidamente hasta una de las habitaciones.

  TaeHyung vio como se alejaba con rapidez y regresaba sin más.

  Realmente tenía demasiado que procesar.

  Aquello parecía haber sido sacado de una película, no podía creer que la persona a la que había amado no sea más que una simple ilusión.

  Lentamente, comenzaba a sentir que la falsa seguridad que tenía su cuerpo lo abandonaba con velocidad, que los recuerdos que tanto había atesorado en sus años se desvanecían como si de cenizas se tratase.

  Ya no podía ocultarse detrás del "Estaré bien", siquiera murmurar como un mantra que si estaba con JiMin su única preocupación sería cuidarlo y darle una vida un poco más decente de la que había tenido él.

  No podía simplemente sentarse y llorar como un niño, no podía dejar que las palabras escapasen de su boca dejándolo sin ellas.

  Era imposible que se encerrara en un cuarto hasta determinar que se sentía mejor.
  Y aquello, por más que no quisiese, le dolió.

  Ya era un adulto, y además, tenía un hijo del cual cuidar y mantener.

  En ese momento no podía permitirse llorar más de lo que llevaba cada noche, no sin antes asegurarse que JiMin estuviese a salvo en sus brazos.

  Un suspiro entrecortado por el creciente llanto salió de sus esponjosos belfos.

—¿Y JiMin? — preguntó afligido sin poder contener que su voz se perdiera en el aire lleno de tristeza.

  JungKook lo miró.

  Sus ojos analizaron aquella figura con la cabeza gacha y lágrimas retenidas a punto de rebalsar.

  «Mierda» pensó disgustado.

  Era un Alfa que no podía proteger a su pareja predestinada, y sin importar que no se conociesen, le había hecho un gran daño.

—Aún hay cosas que no sabes. — admitió con pesar con un tono lúgubre —Creo que sé dónde está JiMin, pero primero tengo que saber que te dirá HoSeok. — las palabras le supieron amargas y no pudo evitar que aquel nombre escapase con hastío de su boca.

⟦ Sɪɴ Pᴀʟᴀʙʀᴀs ⟧ ~ᴷᴼᴼᴷᵀᴬᴱ~ ᵒᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora