La Elegida de Drácula

33 | nuevo descubrimiento

—Ivonne—

— Kaeri — toco la puerta de la habitación de la morena (ahora rubia) Erika que me abre de inmediato.

— ¿sucede algo?

— no, solo vine a invitarte a la piscina, Madame Pink y yo estaremos allí.

— genial, pero ahora estoy haciendo una tarea importante. Las alcanzaré cuando termine.

— te esperaremos entonces.

— espera, Bonny ¿puedes decirme qué es todo eso de "Miss Popular"? Kim me está desquiciando con su estúpida campaña. Es tan insistente.

Me río al ver la expresión de fastidio que hace — ese es un absurdo título que le entregan a la chica que más ha destacado en el año, quien se encargará de organizar el baile de invierno y obtendrá algunos beneficios inútiles como un lugar en el estacionamiento, privilegios en la cafetería y otras cosas más. Además, el título permanece hasta el siguiente año donde elegirán a la próxima.

— oh, ya veo... — murmura para sí misma — gracias, Bonny, te veré en el jardín.

Me alejo de allí y voy hasta el patio por la cocina donde me encuentro a Madame Pink ya sentada en un camastro con su bañador puesto y tomando algún tipo de bebida en una copa. Avanzo hasta ella — ¿qué pasó con la ojitos lindos, princess?

Me siento en el camastro junto al suyo — hace tareas, vendrá más tarde.

— está bien.

— Madame, no se si alucino, pero siento que Josh no deja de mira hacia acá — murmuro luego de un rato observando al chico con disimulo.

La Madame ni se inmuta, mantiene la mirada en su teléfono — ¿ah sí?

— pero si es bastante obvio.

Ella me mira — princess, es un guardia, su trabajo consiste en vigilar todo, es normal que mire hacia acá. No exageres.

La miro entrecerrando los ojos y con una sonrisa pícara — ninguno de los dos llegó a dormir luego del encargo de tu hermano ¿pasó algo entre ustedes?

Suspira bloqueando su teléfono — de pasar sí pasó — la miro intrigada — luego de las cuatro horas más incomodas que he pasado en mi vida, debido a que él no habló una palabra en todo el viaje, cuando nos detuvimos a comer, el auto comenzó a incendiarse por algunas fallas o yo que sé, quise llamar una grúa, pero mi teléfono estaba descargado puesto que lo usé en todo el viaje para matar mi aburrimiento y él no llevó el suyo... tuvimos que caminar alrededor de cinco kilómetros hasta una estación de servicio, pude haber ido corriendo, pero era muy tarde y Baby-Drac me mataría si me atrevía a dejar por su cuenta a su hijo rebelde... cuando por fin conseguimos llegar resulta que ya habían cerrado por lo que tuvimos que caminar nuevamente hasta llegar a un motel en el cual decidí quedarme a descansar porque no podía más. Llamé a Baby-Drac para informarle la situación y luego me dormí en ropa interior ya que me molestaba el vestido. Regresamos aquí esta mañana cuando Mike fue a rescatarnos, como puedes ver, pasaron muchas cosas, pero a la vez nada.

Sonrío bebiendo de mi soda y mi soda y miro a Josh — sea como sea, su mirada no es de simple vigilancia — ella resopla — por cierto, Madame, te quiero pedir ayuda, quiero hacerle una sorpresa al conde para su cumpleaños.