Fingir querer a alguien fue el principio de todo lo raro que se me vendría encima, terminar con el había sido la mejor de mis decisiones, pero después de muchas cosas para tratarlo de superar termine topándome con...
No importa, solo se que las pers...
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JAYNE
Mis vacaciones fueron algo aburridas no salía de la rutina después de que tal persona se había marchado, porque claro estaba que no quería ni siquiera mencionar su horrible nombre. Jugar videojuegos en una PC que acababa de comprar, ir al parque una vez a la semana para pensar frente al lago que había ahí y hablar con mis amigas. Aunque no salía mucho con ellas ya que Rose había ido con sus padres de vacaciones a noruega y Emma ha estado ocupada trabajando con su abuela en una cafetería que era de su familia.
Mi madre se fue de viaje antes de que yo regresara de mis vacaciones, ella es dueña de 2 de las empresas de ropa mas famosas de Estados unidos por lo cual era normal que viajara mucho. Mi padre estaba en Suecia cerrando contratos para una nueva empresa que él iba a abrir.
¿Los padres de ensueño no?
Para mi patética suerte era millonaria, aunque mis padres siempre quisieron que experimentara no llenarme de lujos y estudiar como una persona normal en las escuelas que no eran privadas. Me gustaba, ya que para mi no era lo mejor tener dinero.
Para mi suerte nunca estaban así que parecía que vivía sola.
Dos días antes de iniciar el nuevo año me había ofrecido a ayudarle a Emma en la cafetería en la que trabajaba. Bueeno, su abuela había decidido ir a un bingo, Emma me había pedido de favor que le ayudara solo a cobrar, aunque ambas sabemos que no solo vamos a trabajar, necesitaba hablar sobre todo lo que ha estado pasando, más específicamente sobre su reciente ruptura.
Estaba yo detrás del mostrador acomodando los pasteles que acababan de llegar mientras ella estaba frente a mi limpiando los vidrios de la vitrina de postres que estaba en el mostrador. Sabía que estaba molesta porque la oía murmurar cosas.
Sus chinos estaban recogidos en una media coleta, y llevaba un abrigo amarillo. Su tez morena se veía brillosa de sus pómulos ya que se había puesto algo de maquillaje. Yo ni siquiera me había arreglado, parecía que me había levantado y así me había venido. Solo había recogido mi cabello en una media coleta también. Era el típico peinado que yo utilizaba ya que me daba algo de flojera peinarme.
—Es horrible, me terminó porqué se irá a Canadá, ¿Merezco eso? —Limpiaba con delicadeza la barra mientras esperaba una respuesta frente a mi— ¿Sabes que fue lo que me dijo el muy idiota? Que si pudiéramos tener una relación abierta.
Antes de yo contestar veo como Emma limpia con más fuerza la barra y luego se detiene y me mira.
—Canadá de aquí no es muy lejos ¿sabes? Es una idiotez.
—Emma es solo una excusa para que el pueda hacer lo que quiera mientras está allá, no me sorprende que Alexander y él sean amigos. Tienen el mismo pensamiento idiota.
—Créeme que hubiera preferido que fuéramos amigos con derechos, de perdido al verlo lo besaría, no es lo mismo que terminar y no poder hacer nada. Buh aburrido.
