HUNTERS ~ vol.1 | COMPLETA

35. Un desafortunado inconveniente - Nikolas

Nikolas - Philadelphia
Laboratorios Gustav, Nov. 01:30am

En el camino de vuelta, no enfrentamos más obstáculo que un par de guardias de los que Nevi se deshace con facilidad, dejándolos inconscientes y permitiéndonos el paso antes de que consigan alertar a los demás. 

No tardamos demasiado en ubicar la bodega de almacenamiento, señalizada por un cartel bastante oportuno. No hace falta que forcemos la cerradura, pues después de algunos intentos, damos con la llave que abre la puerta, colgando del manojo que le hemos quitado al primer guardia.

Cuando entramos, es para mí como entrar en el jardín del Edén y me quedo boquiabierto unos segundos mirando a mi alrededor, ayudado de la linterna del móvil. No sólo hay almacenados cientos de insumos, químicos y material en perfecto estado de conservación en sus respectivos empaques de fábrica, sino que encontramos una gran cantidad de cajas desarmadas y vacías en las que debieron viajar hasta el laboratorio y que nos servirán para acarrearlos de vuelta arriba, a la furgoneta, y vaciar los estantes de los pisos superiores. 

El sitio está oscuro como la boca de un lobo, pero con ayuda de la luz de los móviles y la excelente visión de nuestro lobo, no tenemos problemas al movernos buscando todo aquello que pueda ser de utilidad.

—Byron y Chris limpiarán la vía para nosotros mientras tanto. No pueden ayudarnos en esto, pero nos ayudarán a cargar cuando se unan a nosotros en la salida —les comunico.

En lo que Nevi vigila la puerta armado y listo para deshacerse de cualquier obstáculo que pueda presentarse en forma de guardia armado y cabreado, Caleb y yo nos apresuramos en llenar cajas. 

Pierdo la noción del tiempo en algún punto y la tarea empieza a hacerse pesada y tediosa. 

Habíamos empezado por meter sólo lo estrictamente necesario, pero apremiados por la presión del tiempo y de un malhumorado Nevi metiendo prisa, hemos terminado por meter en cajas cada cosa que nos sale al paso, omitiendo solo la maquinaria grande y pesada. 

Hemos llenado casi a tope un carro de carga y vamos camino a empezar a llenar otro. La mayoría de los guardias parecen demasiado ocupados en resolver el problema del corte eléctrico como para prestar atención a lo que ocurre en el subsuelo. Sin saberlo, hemos creado una especie de distracción accidental que nos ha facilitado bastante las cosas.

Entre tanto Byron y Chris ganan tiempo cubriendo un área más amplia en el piso superior, y sospecho que son la razón de que hasta ahora no nos hayamos topado con ningún problema mayor. 

Caleb consulta conmigo sobre cada cosa que mete dentro de las cajas y basta sólo una cabeceada mía para servirle de aprobación y pasar a la siguiente. Le he asignado la exclusiva búsqueda de insumos y artefactos mientras que yo me ocupo de tratar el material más delicado y  más peligroso como son químicos y demás elementos frágiles y de difícil manipulación. 

Ardo en deseos de tener todo esto en mi poder desde la comodidad de mi refugio y empezar a jugar...

Noto que Nevi teclea algo en su móvil y este devuelve una leve vibración dentro de su palma.

—Byron dice que él y Chris se han ocupado de cinco guardias. Están empezando a movilizarse por la falta de respuesta de algunos de sus compañeros por radio. Es posible que sospechen que algo extraño pasa. Es mejor que nos apresuremos —nos dice en susurros.

—¿"Ocupado"? —repite Caleb.

—No han matado a nadie, Spike. Estos hombres sólo hacen su trabajo. Lo creas o no, la prioridad de un cazador es proteger a las personas. Es el punto de todo esto.