[Mark]
—¿Cómo era tu vida allá? —Johnny desvió unos segundos la mirada de la carretera a mí, con el ceño levemente fruncido.
—¿Mi vida allí? ¿Por qué quieres saber eso? —me encogí de hombros.
—Curiosidad. Ya sabes, quiero saber más —tragué saliva. «Más de ti» pensé, pero no lo dije.
—Vivía en un apartamento de los barrios bajos, con mi padre.
—Nuestro padre —hablar de mi padre después de 15 años sin saber de él, sin ni siquiera acordarme de su cara, me hacía sentir incómodo. Vi como Johnny me miraba unos segundos, vigilando mi reacción —¿Cómo era?
—El apartamento es grande, pero a Lana le queda pequeño.
—¿Lana? —lo miré confundido.
—Si, es enorme.
—¿Tienes una mascota?
—Si, Lana es mi perra.
—¡Me encantan los perros! —me emocioné.
—No se porque, pero me lo suponía.
—Es que son muy lindos —me mordí el labio inferior, sin conseguir contener mi emoción.
—¡Solo son perros!
—¡Son fieles, leales, cariñosos, protectores, amigos y muy bonitos! —Johnny puso los ojos en blanco —¿Cómo es?
—¿La perra? —preguntó con tono despectivo. Yo asentí enérgicamente y Johnny hizo una mueca —¡pues es una perra! Tiene cuatro patas, dos ojos, hocico y orejas... ¿No querías saber más de mí? —me miró de repente, con una expresión extraña en la cara. Recordé entonces las ganas que tenía de saber más de él y de las respuestas a ciertas preguntas echas por mí.
—Vale, está bien. ¿Como es papá?
—¿Qué? —como si no me hubiera oído. —Esa no es una pregunta sobre mí.
—Ya, pero quiero saberlo.
—Depende de porque quieras saberlo.
—¡Por que quiero y tengo derecho a saber cómo es mi padre! —me crucé de brazos, un tanto cabreado y enfuruñado, esperando que él cediera y me lo contara, estrategia que me salía bien desde los dos años, pero esa vez no funcionó.
—Mmm... no.
—¿Por qué? ¿Tan malo es? —Johnny se encogió de hombros.
—No es una mala persona.
—¿Entonces?
—Vale, si insistes, pero con una condición.
—¿Cuál? —Johnny giró el volante con una más que maliciosa risita en la boca.
—Te lo diré esta noche.
¿Por la noche? ¿Exactamente por que quería esperar hasta la noche?
—Mamá estará...—no me dio tiempo la terminar la frase. Johnny ya estaba aparcando justamente frente a casa. Eran las 3 y media. A esas horas, mi madre no estaba en casa y eso me puso nervioso de inmediato.
Johnny y yo estábamos a solas en casa otra vez.
—Tu madre... ¿No está? —preguntó con tono sugerente en cuanto metí la llave en la cerradura y abrí la puerta de casa, entrando con paso apurado, incapaz de aguantar los nervios.
—A estas horas nunca está.
—¿Cuándo suele venir? —Johnny entró como si llevara toda la vida viviendo allí y fue derecho al salón, tirándose sobre el sofá, despreocupado, cerrando los ojos.
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Cherries in the sky
FanfictionUn cuerpo, un bonito cuerpo con el que jugar, con el que experimentar, con el que arriesgarme, con el que disfrutar plenamente y todo lo que ello conlleva. Un cuerpo al que hacer sufrir... un cuerpo al que romper. Cualquier criatura bonita con cuerp...