Capitulo 17

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[Mark]


—Es la primera vez... hmm... que haces esto, ¿verdad? —nunca hubiera imaginado que un día me metería un pene en la boca, pero ahora, estaba de rodillas en el suelo, frente a la cama, entre las piernas de Johnny con su grueso miembro entre mis manos, saboreando la punta con la lengua.

Sentía como palpitaba en mi mano y como el mío reaccionaba igual, poniéndose duro y tieso, deseando que me quitara los boxer y lo dejara salir. Sentí como la mano de Johnny me agarraba el pelo con fuerza, empujándome la cabeza contra él, ansioso y, sin esperar más, cerré los ojos y me lo metí en la boca.

—¡Oh! —John echó la cabeza hacía atrás, con la boca entreabierta, apoyando el brazo en la cama y apretando mi cabello entre sus manos. No era asqueroso ni vomitivo como había imaginado, era... uff, sentía la boca llena de algo duro y húmedo que acariciaba con la lengua y de sólo pensar que era Johnny lo que me llenaba, temblaba de pura excitación, de puras ganas de estallar. Empecé a sacarlo y a meterlo en mi boca, recorriéndolo con mi lengua e impregnándolo con mi saliva. Sus gemidos se mezclaron con el sonido húmedo, sentía como la saliva se escurría entre mis labios hasta la barbilla mientras tragaba y jugaba con la punta con mi lengua, rozándola. Johnny medio gruñía, medio gemía y notaba como se le tensaban los músculos con cada ruido que hacíamos, me temblaba el cuerpo y me encorvaba hacía delante, tragándola con más ganas. —Oh Mark... —Johnny se tensó y me apretó con fuerza el cabello, empujando mi cabeza hacía delante, hasta hacer que mi boca acaparara todo lo que pudiera. Casi sentí la punta rozar mi garganta cuando me dejó la libertad suficiente como para apartarme, pero no lo hice. Volví a tragármelo como un perro hambriento.

—Puto Mark... —me tiró del cabello bruscamente, haciendo que alzara la cabeza y le mirara. Me apartó varios mechones de pelo de la cara, acariciándome la barbilla y manteniéndolo una y otra vez, limpiándome la saliva con el dedo. —Quiero verte Mark —sentí las mejillas arder mientras lo miraba y él me observaba con esa sonrisa repleta de malicia pura, llena de perversos pensamientos. Me lo saqué de la boca y empecé a lamer la punta mientras se lo acariciaba con la mano, mirándolo. Él me miraba a mí, sin ni siquiera parpadear, con una mueca de placer. Encogí las piernas, intentando no correrme ahí mismo delante de él y cerré los ojos, volviendo a metérmelo en la boca con un ritmo desenfrenado.

—Hmm... —empecé a desesperarme. Necesitaba que me tocara, ¡Necesitaba que me follara otra vez! Sentí una gran humedad extenderse por mi boca y el presemen bajar por mi garganta. Su miembro palpitó y Johnny gimió más fuerte. Me tiró del cabello hacía atrás brutalmente, sacándomelo de la boca y sentí como se escurría por mi cuerpo su semen, impregnándome el pecho, descendiendo por él como si fueran gotitas de agua. Me cayó en la mejilla cerca de los labios y cerré los ojos hasta que su mano decidió soltarme. Un par de gotitas me cayeron en los labios. Me pasé la lengua por ellos, recogiéndolas y saboreándolas en mi boca.

—Ahora... si que he marcado mi territorio. —se burló riéndose entre dientes, observándome. Abrí los ojos y le dirigí una mirada escéptica.

—Eres un maldito asqueroso.

—¿Qué? —apoyó ambos brazos en la cama, con las piernas abiertas frente a mí, mirándome sin pudor, ni siquiera un ligero rubor. —Al menos no me he corrido en tu boca ¿no? Aunque de todas formas no hay mucha diferencia. No soy yo el que va tragándose líquidos por ahí.

Esa forma que tenía de hablar y actuar me ponía todavía más. Sentí un escalofrío recorrerme el cuerpo que me puso el vello de punta. Aún hacía frío a pesar de estar en casa con la calefacción a tope y más, estando desnudo. Apoyé las manos en la cama, a ambos lados de su cintura y me levanté.

—Mark —tiró de mis boxer hacía abajo, intentando quitármelos. —¡Quítate eso! —me dio un tirón que me los sacó de un manotazo, dejándole ver toda mi desnudez. Johnny sonrió mientras jalaba mis manos, sentándome a horcajadas sobre su estómago.

Cherries in the skyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora