Zarah era una sonrisa honesta.
Aris nunca sonreía.
Zarah era de colores.
Aris era blanco y negro.
Zarah nunca pensó que conocería a alguien como Aris.
Aris nunca pensó que se enamoraría de alguien como Zarah.
Un campamento.
Un amor fugaz.
Un...
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Cuando volví a mi habitación después de mi visita a la oficina de la directora, me encontré con Amanda guardando sus cosas y entendí inmediatamente cuál había sido su sanción: la habían expulsado del campamento. Mi mirada se cruzó con la suya y pude ver que lloraba.
-Debes estar feliz- susurró enojada, pero estaba muy equivocada.
De hecho, me parecía algo extremo expulsarla, pero era cierto que pudo haber sido muy peligroso para mí.
-No lo estoy- contesté, y ella me miró confundida.
-Ahora también tienes a Aris- continuó sin escucharme mientras guardaba con violencia su ropa en la maleta rosa pastel.
-No Amanda, no "tengo" a Aris. Aris no es un juguete ni un muñeco al que puedas declarar como tuyo o mío. Las cosas no funcionan así- le respondí.
De verdad que algo andaba mal con esta chica.
Se escucharon unos toques en la puerta. Abrí y me encontré con uno de los encargados que buscaba a Amanda.
-Aris no es quien parece- dijo antes de salir de la habitación.
Ignoré lo que dijo, sin ella sentía como el aire de la habitación era menos tóxico.
Revisé mi teléfono que había sonado varias veces indicándome que tenía mensajes, todos eran de Ziel, avisándome que estaba en Londres o más precisamente, en la entrada del campus.
No podía creerlo.
¿La habrá llamado Liam?
Corrí como loca a la entrada del campus y allí estaba ella, tan hermosamente fría, pero al mismo tiempo cálida.
Fuego frío.
Esa era una buena descripción de Ziel Castellan.
Inmediatamente la vi le salté encima sin importarme que estuviese hablando con la directora. Estaba demasiado emocionada de verla, la había extrañado mucho.
Ziel me abrazó de vuelta para luego despedirse de la directora que nos miraba con ternura.
-¿¡Qué haces aqui?!- me exclamé sorprendida esperando que me respondiera que había venido a ver a Liam.
-Fue una sorpresa de Mark, no lo tenía planeado-me respondió con una hermosa sonrisa.
-¿Eso significa que están saliendo?- pregunté alarmada.
Mark me agradaba muchísimo y era una persona increíble, pero Liam era el indicado para Ziel, estaba convencida de que debían estar juntos.
-No, Zarah, Mark y yo somos amigos- dijo aliviandome.
-¿Y cuando veras a Liam?- pregunté de golpe y vi en los ojos de Ziel que era algo que no debía preguntar.
- ¿Así que es verdad? ¿Liam está aqui?- preguntó ansiosa.
