CAPITULO 4

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DongHae aun permanecía furioso por lo ocurrido en la mañana. Pensaba una y otra ves en como salirse de toda esa patraña que habían hecho esos dos. Odiaba la idea de tener que casarse con alguien, solo por tener todo lo que le pertenece por herencia. Sus padres le habían dejado absolutamente todo, desde dinero hasta las empresas. Lo que su padrastro no sabe, es que DongHae tiene en su poder una carta que su padre dejó para él al momento de morir; el cual decía que tenia una empresa fantasma a nombre de él, el cual no tenia registrada en ningún lado. Esto lo había hecho para que ningún hombre con él que su madre se juntara o se casara se la arrebatara.

"—Prometo no molestarlo, y si es necesario soy invisible, no lo miro y no le dirijo la palabra. Solo quiero proteger a mi pequeño. Por favor, ayúdeme.

Se puso de rodillas ante él, mientras lo miraba con lagrimas es sus ojos. DongHae notaba su desesperación y aunque le molestase su presencia, no permitiría que mantuviera esa postura ni un segundo más.

—Levántese— le ordenó—. No tiene que rebajarse a este nivel.

—Entonces...

Lo observo unos segundos, mientras se limpiaba el rostro con sus manos.

—¿Me ayudara?— le pregunta".

Estaba pensando lo sucedido con detenimiento. Una de las sirvientas se acerco a él y le informa que tiene visita.

—Joven Lee, ha llegado una visita para usted— le informa.

—¿De quién se trata?— le pregunta sin siquiera mirarla.

—El joven HyukJae le espera abajo en la sala principal.

Donghae asintió, la sirvienta hizo una reverencia y se retiró para continuar con sus labores.

—Joven HyukJae— habla la nana de DongHae contenta de verlo—. Que bueno verle por aquí. Hace mucho no lo veía.

—Eunhyuk, nana. EunHyuk— le corrigió este mostrándole una sonrisa.

—De acuerdo, joven EunHyuk— le sonrió.

—Así esta mucho mejor— le sonrió—. ¿Y DongHae?— le pregunta mirando para todos lados.

—Debe de estar en su habitación. Déjame y voy por él.

—Gracias, nana.

Comenzó a caminar hacia las escaleras, pero no alcanzo a subir un solo escalón, ya que DongHae la detuvo.

—No te molestes, nana. Ya estoy aquí— dijo el bajando las escaleras.

*****

YeRi le había notificado a su nana que saldrá de la casa con su niño a dar un paseo. Aunque por una parte el paseo era una mentira. Ella solo necesita desahogarse con alguien.

Caminaba por la acera de la calle agarrando a su pequeño de la mano. Lo llevaría a un pequeño parque de diversiones que se encontraba a unas cuadras de la mansión. Al llegar dejó que su pequeño fuera a jugar en todas las atracciones, con la condición de que no se alejara demasiado. Tomó asiento en unos de los bancos que habían frente a las atracciones de infantes para supervisarlo.

—Cuidado, HyunSeok— le advierte.

—¿YeRi?— pronuncio una vos detrás de ella.

Se giró rápidamente, quedando cara a cara a la persona que le había llamado por su nombre. Sonrió al ver que se trataba de su amiga.

—Entonces... ¿Tu abuelo te tiene amenazada con quitarte al pequeño?— pregunto sin poder creerlo que estaba escuchando.

—Así es, HanAh— suspiro preocupada por la situación—. Si no me caso con ese hombre, perderé lo mas preciado que tengo. HyunSeok es mi vida, HanAh. No puedo permitir que mi abuelo me lo quite. Es mío.

Bajo Un Contrato  {Editando}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora