Papá está molesto.

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Durante el camino, el rey Roland se mantuvo callado, ni siquiera cruzo mirada con ninguna de sus hijas.

Miranda se encontraba curando la mano de Amber. Sofía por otra parte, permanecía inmóvil, intentando no hacer ningún movimiento brusco, que avivara el enojó de su padre.

La tensión comenzó a concentrarse en el lugar, para todos el viaje parecía ser eterno.
Cuando el carruaje finalmente aterrizó, el rey bajó rápidamente para encerrarse y pensar mejor las cosas.
Unas horas más tarde, Balleywick pidió a Sofía que se dirigiera al estudio.

Aunque sabía que no había hecho nada malo, sus piernas habían comenzado a temblar seguido de sus manos y dientes.

~¿Puedo pasar? Preguntó mientras giraba la manija de la puerta.

~Pasa y cierra la puerta. Contestó

~Balleywick me dijo que querías hablar conmigo...

~¿Por qué sir Charles no vino a hablar conmigo, antes de hacer su compromiso público?

~Queríamos que fuera una sorpresa...

~¿No te das cuenta Sofia?, Eres tan ingenua para notar lo que está pasando. Soy consciente de que estás en una época casadera y no te detendré, pero francamente creí que desposarias a un noble de tu edad. ¿Qué hay de Jin, de Zandar, Desmond? Incluso el mismísimo Hugo o Axel. Todos ellos se aproximan a tu edad, en cambio Charles, él es mayor incluso que yo ¡Mayor que tu padre! ¿Realmente crees que te lleva 20 años? Es a penas unos años menor que el rey Garrick. No sé si estás consciente, pero el rey Garrick tuvo a Axel cuando ya era mayor. ¿Puedes imaginar su hermano?, Es muy fácil aprovecharse de la ingenuidad de una niña que tiene el corazón roto.

~¿Aceptarías a Hugo con una hija? No puedo creer que tú hipocresía sea aceptar a Hugo en esas condiciones y que te opongas porque Charles es mayor que yo. ¿Dónde están tus consejos de seguir el verdadero amor? Creo que era mentira, solo debo casarme con quién tú apruebes.

~¡No comprendes la situacion! Conozco a Charles tanto como conozco a Garrick. Sé la clase de persona que es, no te dejes engañar por su cara gentil. Dejé que fueran amigos porque jamás creí que llegaría este momento, pensé que llegaría un joven que se ganaría tú corazón y que sólo tomarias a Charles cómo a un padre o un tío.

~¡Hablas igual que Amber!, Yo no puedo querer a nadie más que a...a...¡No importa! Debo seguir mi vida, no puedo esperar que mi príncipe azul llegue y me rescate, ¡ya no tengo 7 años!

~¿Y tú vida seguirá con un hombre que pasó por encima de la decisión de tu padre? Él no me pidió tu mano porque sabia que lo rechazaría. La única forma de conseguirte era atandote a él de manera pública.

~¡Quiero que me dejen vivir! Gritó antes de salir corriendo.

Roland se llevó las manos al puente de la nariz e intento tranquilizarse.

Unos minutos más tarde, Miranda se acercó a él.

~Tampoco estoy de acuerdo con su decisión, créeme que tengo razones para no fiarme de sir Charles.

~Sin embargo, Sofía no sabe en el problema que se está metiendo.

Mientras tanto en Albuquerque, Axel había sido sometido a una operación de nariz. La princesa rubia se la había roto de un solo puñetazo.

~Haz peleado con los mejores esgrimistas del país y todo para que una princesa “Delicada" te arruinara lo único bueno que tenías. Se burló Hugo al ver las cintas alrededor de su puente nasal.

~¡Me las pagarán! Haré que vayamos a guerra por esto.

~No puedes hacer eso, Charles y  yo estamos de lado de Encantia.

~¿Sofía los tiene loco, no?

~No es eso... ¿Crees que sea feliz con mi tío Charles?

~No lo creo hermanito, ahora que lo pienso, creo que ya no la odias tanto como antes.

~Nunca la he odiado, intente hacerlo, pero es imposible, ni siquiera puedo ignorarla. A penas entra al salón, mis ojos se posan en ella y no puedo evitar seguirla con la mirada.

~Te comprendo ¡Es tan irritante! En ocasiones me gustaría que desapareciera y nunca más volviera. Se quejó Axel haciendo una mueca de disgusto.

El rey Garrick hizo su aparición en la enfermería, ayudado por un par de muletas. Poco a poco había ido perdiendo la movilidad de su cuerpo. Así sería hasta que llegara el momento en que no pudiera pararse de la cama.

~¿Qué le pasó a tu hermosa nariz?

~Lo golpeó una mujer. Recalcó Hugo.

~¿Qué hiciste, Axel? Cruzo los brazos retandolo.

~Tal vez fui un poco ofensivo con ella... ¡Pero no la soporto!

~Si sigues así, tendré que encerrarte en la mazmorra.

~No hablas en serio papá, no soy un delincuente.

~Pero si un príncipe incorregible. Comentó Hugo.

Axel abrazó el cuello de Hugo y comenzó a despeinar su cabello.

~Cállate hermanito, aprende quién es tu jefe, si no lo haces, le pediré a Amber que te rompa la nariz o los dientes.

La pequeña Sofi caminaba por el pasillo con un ramo de flores, cuando se topó con el pecho de alguien.

~¿A dónde vas? Preguntó con molestia.

~Tío Charles... Le llevaré unas flores a mi tío Axel... Él me está esperando.

~No te irás sin que charlemos. Habló antes de tomar a la princesa por los hombros y llevarla a otro lugar.

~¿Dónde estamos? Titubeó con miedo.

~En la mazmorra, ¿Sabés por qué la gente es enviada aquí?

~¿Por ser malos?

~Exactamente y si no te comportas, yo mismo te enviaré aquí. Aunque no debes preocuparte, dejaré que lleves contigo tu peluche favorito. Debo admitir que soy un hombre benevolente.

~¡Mi padre no lo permitirá!

~Lo hará si piensa que fuiste raptada. Así que no tientes a tu destino mocosa, a mí nunca me han gustado los niños.

~¿Y el tío Arthur?

~Un error de la naturaleza del que no me pude deshacer. Es un alivio que sea un adulto y se mantenga lejos de mi.

~Prometo que me portaré bien y no le diré a nadie, pero déjame volver con mi padre... ¡Quiero abrazar a mi abuelito!

~Vete ya. Gritó antes de que la niña pudiera decir otra palabra.

Sofi corrió rápidamente hasta la enfermería con su pequeño ramo de flores destruido.

Tal vez para todos pasará por alto, pero la pequeña se encontraba llena de terror.

El Amor de ClioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora