El virrey Charles.

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Ya había pasado una semana desde que el duque Charles había tomado el poder de Albuquerque. La salud del rey Garrick no mejoraba en lo absoluto y la pequeña Sofi lloraba todos los días junto a la cama de su abuelo.

~No debes llorar, en unas horas cumplirás 7 años y leerás una carta de tu mamá. Susurro Hugo tomando con delicadeza la mejilla de su hija.

~Es cierto, me pregunto ¿Qué me dirá esta vez?

~No lo sabremos hasta que lo leas. Dime ¿Qué decía la carta anterior?

~¡Es un secreto papá! No puedo decirte. Contestó cruzando los brazos.

~Oh por favor, solo una pista.

~No puedo.

~¿y si te hago cosquillas? Río cargando a la niña.

~Ni así cederé. Río mientras era girada en los brazos de su padre.

La escena cambió mostrando a Sofía parada frente a la ventana. La noticia de la enfermedad del rey Garrick se había extendido rápidamente por todo el Eterny reino.

~Deberías visitarlo. Susurro Amber.

~Axel y Hugo me echarán apenas ponga un pie en Albuquerque.

~No lo harán si yo te acompaño, además tu amigo Charles se convertirá en el rey temporal.

~¿Harías eso por mi? Sonrió tomando sus manos.

~Haría cualquier cosa por ti, Sofía.

Amber tomó la mano de su hermana y juntas corrieron hasta el jardín para abordar un carruaje.

~Quiero el mejor carruaje disponible, el viaje a Albuquerque es largo y queremos comodidad. Exigió a sus sirvientes.

Sofía solo observó a la princesa rubia, siempre segura de si misma y tan carismática.

Cuando el carruaje fue traído por el cochero ambas jóvenes abordaron. El interior estaba forrado con terciopelo y los bordes eran de oro.

~Este es el carruaje de papá. Titubeó Sofía.

~Él nos dejará usarlo, sabés que somos sus pequeñas princesas.

~Bueno... Supongo que no hay problema. Confío en ti Amber.

Una vez estuvieron listas, Amber tocó la ventanilla que las separaba del cochero, dándole a entender que el viaje podía comenzar.

Sofía comenzó a pensar en todo lo que había ocurrido, primero James se había ido a la guerra, días más tarde entregó la corona voladora a la hija de Hugo, una noche antes había aparecido el enmascarado. Todo apuntaba a que Hugo era aquel hombre,  pero ¿Por qué no la enfrentaba? Si lo hacía, ella lo perdonaría y volvería a su lado como siempre lo soñó.

~¿Estás enamorada? Preguntó Amber.

~¿Por qué lo dices?

~Has estado pensando todo el camino, apenas hemos cruzado palabra.

~No... No es así. Tartamudeo avivando las sospechas de la rubia.

~Puedes contarme lo que sea, recuerda que me casare pronto.

~Pues... Cuando James se fue, un hombre enmascarado apareció en mi balcón, todos los días viene a visitarme y siento un gran amor por él. Tiene los ojos color avellana como Hugo y guardo la esperanza de que se traté de él. En tan poco tiempo me ha hecho darme cuenta de muchas cosas y con su amor y sus consejos me he sentido protegida estos meses.

~Déjame ver si entendí, te enamoraste de un hombre al que solo le ves los ojos, todo porque te recuerda a Hugo. Además, nada te asegura que sea él, bien podría ser otra persona, como su tío Charles.

Al escuchar esto, los ojos de Sofía se abrieron del impacto.

~¿Sir Charles? ¡No puede ser!

~Yo si podría creerlo. Aunque podemos probar a Hugo, si después de nuestra visita sigue tratandote mal, creeré en mi teoría de que Charles es el hombre enmascarado.

Una parte de Sofía quería que Charles fuera el hombre enmascarado, la otra parte pedía a gritos que se tratara de Hugo.

Cuando el carruaje aterrizo, el cochero rápidamente descendió para ayudar a bajar a las princesas. La primera en salir fue Amber, siendo seguida por Sofía.

En seguida se dió aviso a la familia real de su llegada.

Esa mañana se festejaba el cumpleaños número 7 de la pequeña Sofi. Hugo ya había hecho entrega de la nueva carta y estaba dispuesto a recibir a sus invitadas.

Mientras tanto, la pequeña princesita había preferido permanecer en su cuarto, para leer la carta de su madre.

Carta #2

Mi pequeña Sofi, felicidades por tu cumpleaños número 7. Estoy convencida de que eres una niña muy inteligente y dedicada.
De igual forma, tengo la seguridad de  que tú papá te cuida y quiere mucho.

Aún así, estoy consiente que te hace falta el amor maternal, desgraciadamente yo no podré dártelo, pero conozco a una persona que lo haría con mucho cariño. Ella cuidará de ti como si fueras su propia hija. La conozco muy bien y confío plenamente en ella.

Pero antes de revelarte su nombre, te daré una pista. ¿Recuerdas que te conté sobre las aventuras de mi amiga Sofía? Sé que esperaste mucho para conocer el resto de su historia.

Como ya te dije antes, Sofía es la protectora del Eterny reino. Un lugar lleno de magia y colores.

Su trabajo consistía en luchar contra  los villanos que intentarán atacar a cualquiera de los reinos.
Todo esto con ayuda de los protectores y el poder de su encantalete.
¡Debiste verlo! Su misión era maravillosa.

Además podía hablar con los animales. Sé que puede sonar extraño, pero todo ésto lo lograba gracias a el amuleto de Avalor. Si has estudiado tu lección, debes saber perfectamente la leyenda de dicho amuleto.

Solo puede poseerlo quien sea puro de corazón, “Por cada acción una reacción". Por eso mismo, al llegar a manos equivocadas podría causarse un caos, sobre todo para la persona en cuestión, ya que el amuleto te devuelve las cosas en la misma proporción de tus actos.

Ahora que sabes todo esto. Me gustaría contarte sobre el día de mi boda con tu padre.

Ese día me encontraba muy nerviosa y estoy segura de que él sentía lo mismo. Apenas puede dormir esa noche, pero a la mañana siguiente me encontraba llena de vida. Amaba a tu papá y hasta la fecha lo sigo haciendo.
Nuestra relación fue muy apresurada así que no tengo mucho que contar al respecto, pero esa mañana nos dimos nuestro primer beso de amor. La sensación al verlo parado hasta el final del altar fue asombrosa, jamás podré olvidarla. Vestía un traje sastre, su cabello estaba perfectamente arreglado y sus ojos brillaban como nunca.
Espero que puedas imaginarte ese momento.

Sin más por decir me despido, suplicando que puedas esperar mi última carta con paciencia.
Recuerda mi deseo, busca a Sofía y cuéntale nuestro secreto, estoy segura que nos entenderá.

Además, a tu papá le encantará verla. Fortalece su relación y busca una nueva amiga y mamá en ella.

Te amo mucho nena.

La niña bajo la carta y en seguida se asomó a la ventana. Lo primero que observo fue a Sofía en compañía de su padre, su tío y el duque Charles.

El Amor de ClioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora