Capítulo.- 44

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El auto ha entrado al muelle derrapando de manera brusca al haber dado vuelta para dirigirnos hacia el punto de entregas, al punto que estaba a pocos kilómetros de aquel almacén en donde por el sonido causado por los neumáticos del auto en la madera las personas que estaban dentro de este salieron con gran duda y las que no estaban en el interior solo miraron el auto.

Las alertas para los presentes eran claras, quizás por sus mentes paso que alguien nos estaba siguiendo, quizás por su mente solo pasaba que estábamos escapando de alguien quien pudiese hacer toda clase de daños.

La mayoría empuño sus armas apuntando hacia la entrada de aquel lugar, pero nadie más aparecía en aquella entrada, solo éramos nosotros en aquel auto que pudo haber rosado otros autos, autobuses, auto que pudo haberse estrellado en varias ocasiones por el nerviosismo que no dejaba de crecer al enterarnos de tantas cosas que eran un gran riesgo para todos.

El miedo no desaparecía, el pánico de lo que vivimos era sumamente grande, pero nada me habia dado más pánico que haber estado a centímetros una vez más de Bastián, centímetros en los que el chico tenía dos armas apuntadas hacia nuestra dirección, con una mirada terriblemente alarmante, con una sonrisa tan enfermiza... que la adrenalina habia desaparecido transformándose en la sensación de pánico y desagrado.

¿Por qué no disparo? ¿por qué nos dejó ir? Cuando tenía la oportunidad perfecta de gritar, de dar señales a los tantos hombres que habían entrado a la casa de Bronx.

Cuando el auto es aparcado de manera brusca, bajamos de este sin siquiera cerrar las puertas, en presencia de Michael quien caminaba con apuro hacia nosotros incluyendo a Rami y a Jake, incluyendo a Kendrick quien parecía bastante confundido con todo lo que habia pasado en segundos, nosotros entrando así, hombres apuntando y aun con dudas en su rostro, comprendía que Kendrick estaba verdaderamente confundido al igual que el hombre que sigue con un semblante tan distinto a como lo deje.

A pocos pasos de llegar a él, me tomo por los hombros y por inercia mis manos se colocaron en sus brazos apretando por error estos, notando una mueca de dolor, misma que comprendí en seguida por qué nacía tras lo que Vincent me habia comentado...

Pero no es momento de reclamar, es momento de actuar ya.

─ ¡¿Qué ha sucedido?! ─luce exaltado, lo comprendo, cualquiera que hubiese entrado de esta manera tan brusca hubiese reaccionado igual─. ¡¿Collins?!

─Llama a Jayden y a Derek de inmediato, que vayan a Bronx con un maldito equipo de policías ahora Michael ─dije bajando mis manos de sus brazos, dispuesta a irme hacia mi auto, pero él me detuvo.

─ ¿Qué rayos ha pasado?

─Jace Bracco está en territorio ajeno, Joe... Está en Bronx... y no está solo...

─ ¿Cómo que no está solo? ─la esposa de Kendrick, Lorraine camina hacia mi dirección con duda en su mirada─. Jace Bracco no hace tratos con nadie a menos que estén a su misma altura.

─Pues hay alguien que está en su puta altura ─le digo a la mujer y después llevo la mirada a Michael─. Mike... Banner esta con él...

─... ¿Qué?

─Andrew, Dylan, Charlotte... Shena... llegaron después de que Jace Bracco llegará a una casa que estaba a tres de la casa en venta ¡de aquella misma casa en la que solíamos vivir, en donde solía vivir!

─...

─Y eso no es todo, jefe ─Vincent, acerco su celular a Michael, quien aparto sus manos de mis hombros solo para tomar aquel aparato del chico de color.

KRYPTONITE |[SG Libro 2]|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora