KRYPTONITE |[SG Libro 2]|

𝓔𝔁𝓽𝓻𝓪 - 𝓝𝓪𝓻𝓲𝓪𝓷

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Michael

Harry estaba más que molesto, más que sumergido en su propio coraje de lo que paso hace apenas unos minutos. No culpo que se haya molestado cuando le dije quien trabajaría para nosotros dos, después de todo, su relación con Ian Somerhalder no ha sido nunca la mejor.

Han pasado al menos cinco meses desde que Charlie Jolson nos tendió la mejor emboscada de nuestras vidas, cinco meses en los cuales tuve una recuperación demasiado lenta y dolorosa, recuperación de la cual aún no estoy un cien por ciento dispuesto para moverme y hacer mejor mis trabajos.

Aun cuesta el moverme, así como el respirar de manera profunda, me sigo sintiendo cansado, exhausto, con una exagerada pesadez en todo mi cuerpo y, es que aquellos cinco meses de estar postrado en una cama, no trajeron nada nuevo en mí.

Y así, como pasaron los cinco meses para mí, también pasaron para Harry, para Lily...

Mi Lily...

Norman Jayden me ha dicho que debo mantener un perfil bajo ante ella, me ha comunicado sobre el estado de salud de aquella mujer de tan solo dieciocho años, estado crítico por su estado de embarazo.

No sé mucho de ella, ni siquiera sé, que está esperando, si es niña, si es niño... no sé nada.

He estado haciendo grandes tratos con Norman Jayden, tratos en los que hemos puesto en juego la seguridad de la ciudad a cambio de que deje salir a aquella mujer cuanto antes, mucho antes de que se cumpla su cadena estando en una prisión de máxima seguridad para mujeres, más bien la clasificaría como una correccional para menores, es decir ella apenas tiene dieciocho años y sé que Norman Jayden ha planeado dejarla hasta sus veintidós años.

Mis tratos con él hasta el momento han sido que él le brinde toda la protección dentro de ese lugar y yo le daré la protección a la ciudad, la protección que necesite.

Mis tratos con ex gente de Jolson han ido de bien y mal, hay gente que se ha reusado a trabajar para mí, gente que al menos puedo confiar y otros que me han dicho que me servirán en todo. No puedo quejarme, agradezco el tener su apoyo de diferentes maneras.

Harry, deja el vaso de aquella bebida alcohólica sobre la mesa con fuerza, salto un poco sobre mi lugar al verlo tomar la botella que ya está casi vacía y servir más de ese líquido dorado en el vaso, lo llena hasta el tope y lo bebe hasta la última gota volviendo a servir más de aquella bebida, lo último mejor dicho.

Su cabello está completamente desordenado, su rostro con ligeros golpes y sus nudillos con la carne de estos un poco desprendida, no puedo justificar las acciones que ha hecho y con qué propósito las tomó, no cuando insultó de una manera grotesca a Ian y este se enfureció hasta partirle el labio al tipo que ya lleva dos botellas de bebidas embriagantes y vasos pequeños con líquidos trasparentes.

Jamás habia bebido de esta manera, tiene años que lo hizo y si mal no recuerdo la última vez que bebió de esta manera fue cuando Rachel se comprometió con Charlie Jolson.

Jala a una mesera de aquella falda de color negra, causando que la chica que llevaba una charola en manos se detuviera en seco, giró su rostro a Harry quien apenas si podía mantener la mirada en un punto fijo.

─Trae otra botella de Vodka, la más cara que tengas ─dice soltando la falda de la mujer cuando tiene toda su atención, la chica lo mira con su ceño fruncido─ ¡¿Qué mierda esperas?!

La chica, tras escuchar a Harry hablarle de aquella manera, prefirió asentir y cambiar el rumbo hacia donde iba y solo para poder dirigirse hacia la barra de las bebidas sin dejar de mirar hacia atrás.