Capítulo diecisiete: Vamos a estar bien.
Notaba su nerviosismo solo a centímetros de distancia que nos separaban, ella quería preguntar algo. Lo sabía, sus ojos miraban mi despacho y después volvían a mi como un flash.
- ¿Sucede algo con el proyecto Bella?- le hablé tranquilo mientras dejaba las hojas que me tendió en el escritorio, la notaba aún más tensa, seguramente le extraño que la notara nerviosa.
- No... solo... es algo bobo pero...- su tartamudeo me extraño demasiado. No parece la chica que me amenazó hace unos días cuando dije que ambos éramos amantes.
- ¿qué pasa?
Suspiró con fastidio mientras se ponía de pie quedando un poco más alta que yo, claro que si me paraba ella iba a quedar del tamaño de una hormiga al ser de baja estatura.
- conocer a tus padres ¿no crees que es... muy pronto? Es decir, son tus padres, ellos saben que aún estas casado. Vas a presentar a tu Novia, ¿qué hay de tu...- ella tosió un poco y me miró apenada- Ex esposa?
- ¿eso te preocupa? - me reí unos minutos pero me detuve al verla tan seria - Bella todo va a salir bien. Aun falta para que conozcas a mis padres. Y hablando de ella, no te preocupes. A ellos nunca les agradó, estarán felices de que diga que estoy en una relación con una buena mujer.
La notaba tensa aún, veía como su rostro estaba lleno de dudas y con miedo, asi que me pare de mi asiento y rodeé el escritorio para estar cerca de ella. Bella era una mujer pequeña, aún llevando esos zapatos muy altos solo me llegaba hasta los hombros teniendo que elevar su rostro para verme.
- vamos a estar bien - mientras sus ojos me recorrían el rostro buscando un signo de mentira su cuerpo parecía estar poseído ya que se movía de izquierda a derecha mostrando su intranquilidad.
- no se si creerte o salir corriendo mientras gritó toda la verdad...- susurró haciéndome sentir un revoltijo en la parte baja de mi abdomen al verla morder su labio inferior. Si seguía así iba a lastimarse el labio, estaba por levantar mi mano para tocar su labio pero una fuerte voz en mi cabeza me hizo pensarlo bien.
Estas pisando terreno peligroso Butler, sal de ahí. ¡AHORA!
- Bella créeme, mis padres no son unos monstruos..ya conociste a mi madre, ya sabes como es. Si le caes bien no tienes por qué preocuparte por mi padre, él siempre confió en el juicio de ella. Y no miento cuando digo que mi madre te adoró cuando te conoció.
La castaña río un poco y solo me observó unos minutos para luego bajar la mirada. Se que estamos a poco centímetros de distancia y también se que acordamos no muestras de afecto si estábamos solos y no había nadie observando. Pero estaba seguro que ella necesitaba un abrazo.
Me acerque más de lo que ya estaba y antes de que ella repricara algo sobre esto la tome de los brazos dándole un cariñoso abrazo mostrando que no era la única que estaba de esa manera.
- te juró que nadie te pondrá incómoda estando yo presente... y si pasa algo nos iremos enseguida.***
Su susurró en mi oído hizo que un temblor en mi cuerpo se active, estaba segura que si me soltaba iba a temblar como una gelatina en una mesa giratoria.
El abrazó de Matthew aunque fue inoportuno e inesperado me hizo sentir mejor en un cierto punto. Él estaba igual de nervioso que yo, pero no lo demostraba y eso ayudaba bastante a mi nerviosismo.
Me separé un poco, pero no demasiado y elevé mi rostro hasta el suyo haciendo que nuestras respiraciones sean parejas. Me sentía rara, él es mi jefe por amor de Dios. Pero verlo actuar tan compasivo conmigo me hizo sentir un gran apreció.
¡Qué apreció ni que ocho cuartos, sepárate de él niña!
Iba a hacerle caso a mi voz interna pero antes de que pueda hacer un movimiento la puerta se abrió estruendosamente asustandonos a ambos en el proceso.
Felisa estaba roja al notar como ambos nos separabamos enseguida y solo acomodamos nuestras ropas, ya que con el abrazó mi vestido y su traje se habían arrugado.
- s-señor l-lo lamento, solo...- susurró y miró el suelo al instante cuando notó nuestras miradas en ella - tiene una llamada de su hermano al teléfono.
- gracias señorita Johnson- él se alejó de mi y se acercó al teléfono, Felisa salió del despacho tan rápido como entró -Si Noah.... bien... ¿qué?
El solo decía si, no, okey. No le estaba prestando demasiada atención, estaba por marcharme pero luego lo que escuché no me agradó tanto.
- ¿Como qué hoy? Noah dijiste en una semana...- él me miró y me asusté al ver esa mirada tan impactante y tan determinada - Entonces no hay de otra, dile a mamá que estaremos allí hoy a la noche.
Colgó sin despedirse para luego pasar sus manos por su rostro con desesperación.
- Bella se que es inoportuno pero...
- ¿la cena se pasó para...hoy?- él asintió haciendo que mis piernas comenzarán a temblar y mi cabeza comience a dar vueltas como una calesita.
- Vamos a estar bien...
De eso no estaba segura...de lo único que si estoy cien por ciento segura es que si él vuelve a repetir esa frase hará que yo quiera tirarme de un avión sin paracaídas.***
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Trató Señor.
RomansaMatthew Butler quiso fingir que su directora de diseñó era su amante. No sabía que hacer en ese momento pero luego lo supe. Nunca debí decir si.