20. Alquimista

189 30 0
                                    

Cuando aún vivía en mi otro mundo leí muchos libros de fantasía, en muchos de ellos existía la magia, pero en otros lo que dominaba era la alquimia, la ciencia de los elementos que permitía a las personas convertir una cosa en otra completamente diferente luego de manipular sus componentes y, según cuentan las leyendas, lograr hazañas como convertir cualquier metal en oro o alcanzar la eterna juventud. No sabía si eso era posible en este mundo, pero no me sorprendería que hubiera gente intentándolo.

El kit de alquimia se componía por un mortero, cinco pequeños viales de cerámica con diferentes sustancias, un saco con un polvo blanco etiquetado como 'estabilizador' y otros tres con polvos de diferentes colores etiquetados como 'reactivos', una báscula y un libro con las bases de la alquimia. Tenía la corazonada de que si me concentraba, podía hacer con los materiales lo mismo que había hecho antes con el musgo, pero cuando lo intenté, nada ocurrió.

Ya que no tenía idea de lo que era cada cosa decidí empezar a leer el libro, nunca me había emocionado tanto por leer un libro de texto, era una sensación extraña, aunque no me desagradaba ni un poco, no estaba por aprender a resolver ecuaciones, sino a crear objetos mágicos, lo cual era completamente diferente y una razón muy válida para estar emocionada.

El primer capítulo hablaba sobre la importancia del estabilizador para evitar que los componentes se volvieran volátiles o se corrompieran al estar expuestos a diferentes fuerzas y energías. El estabilizador es un polvo de color blanco con algunos granos negros del tamaño de un chícharo mezclados en él y para utilizarlo era necesario molerlos juntos en el mortero y después colocarlos en el mismo recipiente que el material a estabilizar. La explicación era mucho más compleja que eso, pero no era tan difícil de comprender si la leías con atención. Algo que llamó mi atención fue que el libro incluía algo parecido a fórmulas químicas y su explicación. Me recordó un poco a las clases de química, pero al mismo tiempo se trataba de algo completamente diferente.

En los siguientes capítulos también había breves explicaciones sobre el uso general de los objetos incluidos en el kit y al final incluía dos recetas para producir "poción de salud" y "poción de energía" respectivamente, la primera era un "líquido que ayuda a cerrar heridas y recuperar la sangre perdida", mientras que la segunda era descrita como un "líquido que ayuda al usuario a recuperar las fuerzas cuando sufre de fatiga".

Para preparar la poción de salud era necesario mezclar a partes iguales dos de los reactivos: 'Polvo fino de Kaská' y 'Polvo de Hidrolium', me alegré de ver el nombre del segundo reactivo ya que era algo que podía conseguir fácilmente en el bosque, pero el polvo fino de Kaská era un tema completamente diferente. Era un polvo de color amarillo con pequeños granos negros y blancos mezclados en él. Luego de mezclar ambos reactivos debía agregar una parte de estabilizador por cada dos partes de reactivo y dejar la mezcla reposar durante diez minutos. No entendía por qué había que hacer eso, pero al dejarlos tranquilos los polvos comenzaron a burbujear. Pasados los diez minutos la reacción se detuvo, señal de que era el momento de agregar el tercer reactivo: 'hierba cezés', otro nombre que nunca había escuchado. En el libro aparecía la imagen de una planta de la cual se extraía ese polvo y al verla la reconocí fácilmente, la había visto varias veces antes en el bosque. Decidí que mi próxima visita al bosque conseguiría tantos materiales como fuera posible.

Cuando agregué el tercer reactivo a la mezcla ésta empezó a burbujear nuevamente mientras su color cambiaba hasta volverse azul y luego rojo. Para mi sorpresa, los tres polvo se habían convertido en un líquido viscoso similar a la sangre. Según el libro, ese era el resultado que debía obtenerse así que la consideré un éxito incluso sin haberla probado, después de todo, no estaba herida y no tenía la intención de lastimarme solo para comprobar su efectividad.

Tal vez tenía que ver con mi profesión Cocina (I), o con lo acostumbrada que estaba a cocinar en mi mundo anterior, pero seguir la receta fue sencillo incluso cuando el texto incluía frases como "agregué tanto como considere necesario" o "si cree que le falta hierva cezés, agregue un poco más".

La segunda receta fue todavía más sencilla, para prepararla solo era necesario mezclar una sustancia verde llamada 'electrum' con un poco de hierba cezés y después esperar que se volviera azul para agregar un poco de estabilizador y un poco de 'líquido de Uli', supuse que se trataba de un material que se derivaba de los 'polvos Uli' que el señor Orwell estaba transportando antes.

La poción de energía fue completada con éxito sin ningún problema. A diferencia de la anterior, pude probarla para determinar sus efectos. Inmediatamente después de beberla tuve un subidón de energía como si hubiera tomado diez tazas de café acompañadas por una bebida energética de aspecto intimidante. Era tremendamente efectiva y, aunque todavía era temprano, estaba segura de que no podría dormir esa noche.

Seguí practicando hasta agotar mis ingredientes, cuando eso ocurrió sentí algo vibrar en mi bolsillo y al revisar mi identificación noté que entre mis profesiones había aparecido un nuevo título: Alquimista (I). Al igual que cuando mi nivel de Recolectora subió, quise experimentar y volver a preparar pociones, pero no tenía más ingredientes. Ya que todavía no se ponía el sol, decidí que era el momento perfecto para hacer una visita rápida al mercado.

No había necesidad de llevar el carro, pero ya que quería que Arthur saliera a caminar un poco, la llevo conmigo, Bunny también se unió a nuestro paseo. Al llegar me dirigí directamente a la tienda de alquimia y le pedí a la encargada los ingredientes para hacer las dos pociones que había aprendido a preparar. El dinero no era problema así que pedí tres kilos de cada uno de los materiales incluidos en el kit. Para mi sorpresa, el Hidrolium que pude comprar no era el mismo que había vendido. Según me explicó la encargada, para la poción que iba a hacer se necesitaba un polvo de grado 1 o 2, usar un material de grado 6 era como usar hojas de oro para preparar un huevo con frijoles. Al final solo gasté 80 monedas de oro en todos los materiales, pero mi visita no había terminado. Ya que estaba ahí le pregunté si había una especie de 'kit intermedio' o recetas que pudiera vender para preparar otras cosas, pero lamentablemente se necesitaban permisos especiales para vender esa clase de objetos a civiles, eso o una placa de alquimista de nivel cobre o superior. Ya que yo no tenía ni una ni la otra, no podía comprar nada de eso. Al final terminé volviendo a casa solo con mis nuevos ingredientes y una cantidad absurda de frascos para guardar todos mis experimentos.

Luego de haberlo hecho varias veces, preparar la poción de salud fue extremadamente sencillo, y gracias a mi profesión como Alquimista, ahora era capaz de comprender en qué momento es necesario agregar los reactivos y estimar adecuadamente la cantidad que había que agregar. Mis primeros intentos habían dado como resultado una poción similar a la sangre, pero luego de obtener la profesión, mis pociones se volvieron menos viscosas y de un color más brillante y atractivo, similar a lo que te esperarías al escuchar 'poción de salud' en un videojuego. Decidí probarla y me sorprendí al descubrir que su sabor era dulce, similar al de la guayaba. Se supone que se bebe para cerrar heridas, pero me pregunté si tal vez podría usarla como endulzante artificial, aunque considerando su costo de producción esa podría ser una mala idea.

Una vez que completé la poción de salud preparé una poción de energía y obtuve el mismo resultado, era como si supiera la forma correcta y el momento ideal para mezclar los reactivos, la poción que resultó de esta fue una casi transparente con un ligero tinte azul, se veía bonita y me recordó a la gaseosa de limón así que le di un trago sin pensarlo mucho. En cuanto el líquido entró en mi sistema toda señal de fatiga que tenía desapareció como si nunca hubiera estado ahí, pero no solo eso, me sentía con energía suficiente para correr alrededor de la ciudad sin parar, de hecho me sentía tan ansiosa que llevé a Arthur más allá de la muralla y jugué con él en el río hasta que el efecto de la poción desapareció. Por supuesto, aproveché mi visita al bosque para conseguir más hidrolium y buscar diferentes tipos de hierbas. Era aterrador lo que una poción podía hacer así que decidí no beber más a menos que fuera una emergencia.

Cuando volví a casa de Érika me sorprendí al saber que alguien estaba esperándome.

Morí y ahora vivo en mi libro favoritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora