Quédate. - LII

444 49 11
                                    


—Solo ten cuidado, ¿Bien?

—Papá, sé patinar, estaré bien.

—Y lo haces genial, amor, sólo ten cuidado.

—Lo tendré, papi.

Nick y yo entramos a la pista. Él también patina genial. Es jugador de Hockey, así que naturalmente patina genial.

Yo, por mi parte, hago algunas otras cosas. La música se apodera por completo de mí, así que puedo hacer lo que yo quiera.

Bueno, los triples no... No me gustaría tener un accidente, así que trato de hacerlos sólo cuando son planeados en rutina.

Nick sigue patinando, hasta que veo que alguien se acerca a él. Amelie.

Me detengo en un lugar en el que hay algo de gente, alcanzo a ver perfectamente lo que están haciendo.

Nick no le está prestando atención, sigue avanzando y ella va detrás de él. Este es mi momento.

Salgo del montón de gente que me cubre y me acerco a Él.

—Nick... — La miro, pretendiendo que no me había dado cuenta de su presencia. —Hola, Amelie.

—Sophia... Nick y yo estamos hablando.

—Amelie, tú estás hablando. — Le aclaró mi chico. —Soph, estaba buscándote... Me encanta verte cuando patinas.

—Nick, eso es muy lindo...

—Escuché que vas a competir en las regionales, Sophia. — Me interrumpió Amelie. —Cuentame, ¿Que hiciste para calificar?

—Pues... Esforzarme. — Comencé a contar con mis dedos. —Ir a mis entrenamientos, seguir las órdenes de mi entrenadora... Etcétera, etcétera. — Le sonreí al terminar mi explicación. —¿Y tú? Tengo entendido que no pasaste a la clasificatoria.

—Sophia, no quieras lucirte...

—¡Tu me preguntaste! Lamento si te ofendí con mi pregunta.

—Me preguntó si tus movimientos será igual de ofensivos que tus palabras.

Alzé los hombros, queriendo aparentar desinterés. —Puedo mostrarte si quieres, de paso dejas en paz a mi novio.

Su exprés pasó de mostrar indiferencia a mostrar que estaba sorprendida. —¿T-Tu novio?

—Bueno, Casi novio. — Le sonrió Nick.

—B-Bueno, no estábamos hablando de eso. Mejor muéstrame que puedes hacer, presumida. — Me soltó de repente.

—Te lo voy a mostrar.

Me acerqué a la cabina y pedí mi canción favorita para esto. Comenzó a sonar a los pocos minutos y respiré hondo. Dejé que las voces comenzaran a salir, para dejar que mis movimientos fluyeran con ellas.

Un salto, dos saltos...

Quizás no necesite planearlo para que me salga bien, así que solamente lo hago y ya.



—¡Sophia!

Quédate (Somebody To Love 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora