Quédate (Somebody To Love 2)

Quédate. - XIX

-¿Pero por qué no puedo ir contigo?

-Ppr que es una salida de adultos, mi vida... No habrá ningún niño a dónde vamos a ir.

-Pero en el parque si habrá niños...

-Soph, sabes exactamente qué no te dejare volver a andar sola por ahí.

Sophia se cruzó de brazos y se dejó caer en la cama. -¡Nuestra vida es un desastre!

-A veces pienso que tienes más de cuatro años, Soph.

Se ríe ante mi comentario mientras me miró en el espejo. Me gusta cómo me veo, ojalá a él le guste también.

Mi reloj me indica que son las 7:10, tengo apenas tiempo para irme. Pongo algo de mi loción en mi cuello y estoy listo para irme.

-Soph, no hagas travesuras, no hagas enojar al abuelo, ¿Esta bien?

Alza los hombros en respuesta. -Bien.

Me acerco a ella y la siento en mi regazo. -Te lo voy a compensar, ¿Esta bien? Sólo será una vez, mañana tú y yo iremos de paseo nuevamente.

-Está bien, papi. Diviértete.

Sonrió y le besó la mejilla a mi hermosa niña. -Te veré luego, no te duermas tarde.

Me encargo de dejarla acostada y con el pijama puesto, así que sólo le doy el beso de las buenas noches y salgo de la casa, no sin antes avisarle a mi papá que estaré fuera durante unas horas. Le dio gusto saber que estoy conociendo a gente nueva.

En fin... Me apresuro a caminar para llegar a la cafetería. Me estoy arrepintiendo de no tener auto, pero no quiero pedirle uno a mi papá, así que trataré de acostumbrarme a caminar.

Llego a la cafetería con tres minutos de anticipo, y eso me hace sentir relajado. No me gusta llegar tarde a ningún lado, con mayor razón si es algo que me interesa.

¿Que dij...-

-Buenas noches... - Irrumpe Luke en mis pensamientos.

-Hola, Luke. - Le respondo con una sonrisa.

-Espero no haberte hecho esperar mucho, Roger...

-¡Para nada! - Respondo al instante. -D-Digo... A-Apenas estoy llegando, si...

-Excelente... ¿Quieres ir a sentarte?

Asiento y antes de que abra la puerta de la cafetería, me toma del brazo y él lo hace...

Le sonrío de nueva cuenta y entramos en la cafetería, el ambiente es bastante cálido y familiar, lo cual me hace sentir bien y un poco extraño a la vez.

Al llegar a la mesa, él corre mi silla para que pueda sentarme. Es muy amable, eso me está gustando...

Él toma asiento frente a mi y me sonríe. -Bien, Roger... ¿Quieres algo en especial?

-No, sólo... Un café está bien. - Le respondo con una sonrisa.

-Puedes pedir otra cosa si tú quieres, no habrá problema.

-Estoy bien, sólo un café.

Me sonríe nuevamente y llama a una mesera que apunta los pedidos, luego se va, dejándonos solos otra vez.

-Háblame de ti, Roger.

Suelto un largo suspiro y trato de contarle algo que últimamente no sea trágico. -Vivo en Londres, por ahora sólo estoy de viaje con mi papá.

Suspira de igual manera. -¿Que edad tienes?

-Veinticinco... ¿Y tú?

-Veintiocho. - Me responde con una sonrisita. Brian tiene ya casi la misma edad que él...

-Genial... ¿Te dedicas a algo? - Tenía que preguntar algo para olvidarme de él aunque sea por unos minutos.

-Soy escritor...

-¿Enserio? Eso es genial, ¿Cuantos libros tienes?

-Tres publicados y uno en proceso. - Sonríe. -¿Y tú?

-Soy dentista, pero nunca he trabajado en eso ni en ninguna otra cosa...

-¿Por qué no? Es un buen trabajo.

-Mi... Mi ex pareja nunca fue fan de dejarme trabajar...

-Debió ser una chica decidida.

-Chico...

Un silencio algo incómodo se hace presente entre nosotros de no ser por la chica que llega a entregarnos lo que pedimos.

Luke pasa la yema de sus dedos por encima de los míos y me sonríe. -¿Por qué lo dejaste?

-Es algo difícil de explicar...

-Puedes confiar en mí, Roggie...

Roggie... Roggie... Roggie...

-Llevabamos cuatro años de relación, la misma edad que va a cumplir mi hija... Y hace unos cuantos meses todo se salió de control... - Le expliqué con la voz quebrada. -B-Bri cambió mucho... C-Comenzó a enfermarse de celos, y de repente... Dios... - Escondí la cara entre mis manos para que no me viera llorar. -Luego comenzaron los insultos... Luego los golpes...

Se levantó de su silla y caminó hacia mí.

-Rog... Yo jamás te haría daño...

Éste chico tiene los ojos más verdes que jamás he podido ver... Son preciosos...

Quizás mi papá tenga razón... Quizá deba comenzar a olvidarme de Brian.

Nuestros ojos están conectados al igual que nuestros pulsos y respiraciones. Sé lo nervioso que está, al igual que yo, pero no pienso dejar que eso arruine nuestro momento.

Siento su aliento contra mis labios, está haciéndome perder la cordura...

-B-Bésame si vas a hacerlo...

Y lo hace.

Presiona sus labios contra los míos con completa calma... Dejándome sentirlo más cerca de mí.

Me toma de las mejillas y comenzamos un pequeño baile en nuestro beso. Es tan tierno que solamente puedo rezar para que nunca se separe de aquí. Lamentablemente, ambos debemos hacerlo.

Sonrió cuando me vuelve a mirar y le acarició una mejilla. -Perdón...

-Está bien, Roger... Quería hacerlo, gracias por dejarme...

-¿Te sigo un secreto? - Le pregunto mientras le corro el cabello de la frente y él asiente. -Yo también quería que lo hicieras.

Sonreímos al mismo tiempo y me roba un beso nuevamente...

Adiós, Brian... O eso creo...

¿No les parece que Roggie va un poco Rápido? :'(