Silver Snake | YoonSeok/Sope || BOOK 1#

44. Por Monstruos

— ¡SON UNA AMENAZA!

—SON UN PAR DE NIÑOS AL QUE NADIE CUIDÓ. EN LO QUE A MÍ RESPECTA, USTEDES SON LA AMENAZA.

De alguna manera que Yoongi no alcanza a entender del todo, está en un juicio por asesinar a sus padres. Jimin está a su lado, acusado de lo mismo. Personalmente no puede hacer mucho, articular palabras le es imposible, incluso mantenerse parado. Según el registro médico, fue torturado por lo menos una hora y media con tanta fuerza y gusto que lo dejó afectado.

Sanaría, pero sería un proceso algo largo.

Además, los tienen esposados como si fuesen el peor animal que jamás pisaría esa sala y mira que han pasado verdaderos asesinos en serie por este lugar. Debe mantenerse sentado para no sentir que va a caer por un piso ochenta, embotado y teniendo espasmos de tanto en tanto. Lo peor de todo es que Hoseok está casi igual en consecuencia. Debe estar junto a él para que la curación funcione más rápido. La distancia lastima a los vinculados.

Volviendo al juicio, no han parado de gritar de un lado a otro que deberían encerarlos en Azkaban después de romper sus varitas y retirarlos de Hogwarts. Siendo menores de edad eso es complicado a más no poder, pero en serio lo están considerando como una buena opción ¿La razón? Son Obscurials. Esa peligrosa bomba de tiempo que ya en tiempos modernos existen a duras penas en casos contados y monitoreados.

—Son Omegas que han demostrado su valía de manera excepcional y debido a la represión en la que vivían se han vuelto lo que son hasta el punto en que necesitaron hacer uso de ello para defenderse. El mayor fallo aquí, es que no habría un ministerio eficiente para protegerlos. —El padre de Jungkook es quien los defiende y mira que está a capa y espada por el Omega de su hijo.

—Min realizó una maldición imperdonable ¿Cómo explica eso?

—Su papá quería matarme cuando vio lo que hice a su esposa. Yoongi solo me protegió. —Apresura a decir Jimin, el cual está únicamente ojeroso y cansado. Las heridas que tiene son menores como mordidas en el cuello y laceraciones mínimas en lugares privados.

No pasó a más, pero sí estuvo a poco.

— ¿Asesinó a la señora Min a consciencia?

— ¡Estaba usando la maldición Cruciatus! Y-yo... Yo...

—Es evidente que solo se cuidaban entre ellos para evitar ser abusados o morir. Cosa que ustedes están tomando como un crimen, haciéndonos lucir como criaturas meno civilizadas que los muggles. —Comenta con tono altanero, buscando de provocar el frágil orgullo que tienen al decirse mejores que las personas sin magia.

—Es... Extraño... Culpan a los monstruos... Por lo que hicimos. —Murmura Yoongi, con un suave tic en la boca.

—Siento que debo agregar que la madre de Min Yoongi realizó una maldición Cruciatus contra su propio hijo hasta dejarlo como lo ven, incapaz de comunicarse de manera apropiada, así como siquiera permanecer en pie. Si eso no es una razón suficiente para llamar esto un acto de defensa propia no sé qué lo será.

— ¿Quién dice que no está fingiendo? —Replica un hombre, Yoongi lo reconoce de algunas fiestas organizadas por sus padres—. Los omegas son unos melodramáticos, hacen lo que se por ganar y más aún, no ir a Azkaban donde sin duda obtendrían el trato que merecen.

—No tenemos esa clase de comportamiento a estas alturas. —Indica con discreción una de las presentes, la cual se ha mantenido viendo a Yoongi fijamente.

—Fácil de probar. Como pueden ver allí—Señala a uno de los lugares ocupados de la sala—. Está su Alpha. De ser un teatro, ese muchacho de ahí no estaría a poco de desmayarse. Tengo La impresión de que ni siquiera sabe dónde está.

—Son Omegas que han pedido la noción de su lugar. Eso es todo.

—Silencio. Llegó el momento de dar un veredicto—Indica la Ministra con seriedad y poco más en su expresión—. ¿Quiénes consideran que deben ser enviados a Azkaban por el asesinato del matrimonio Min? —Fueron pocos los que alzaron la mano—. ¿Quiénes consideran pertinente el retirar los cargos, así como brindar una compasión por no haber intervenido antes en tan desastrosa familia? Los acusados son inocentes. Se levanta la sesión.

—Ven aquí. —Yoongi se deja llevar sin mucho problema, sintiéndose un peso casi muerto. Jimin avanza atrás del padre de Jungkook, en tanto que la madre del mismo Alpha ayuda a Hoseok.

Una vez fuera Namjoon, Jin, Jungkook y Taehyung se levantan, los dos mayores acompañados de sus padres. El padre del menor asiente con una sonrisa victoriosa y Jungkook estuvo a poco de tumbar a Jimin por semejante abrazo.

—Le dije a tus padres que puedes quedarte por hoy con nosotros ya que el viaje seria dañino para ti ¿vale? —Asiente, las familias de los demás son tan dulces.

—Tengo mucha hambre. —Es lo único que atina a decir. Ríen por lo bajo, es bueno que tenga una preocupación tan banal ante tanto desastre alrededor.

—Vamos a comprar de comer entonces.

...

—Perdón por... Años nuevo...—Balbucea.

—Quiso decir que perdón por "arruinar" año nuevo. —Asiente con la cabeza, con un tic en la boca molestándolo mucho para comer. Así como su pulso nulo e incapacidad para comer por sí mismo.

Los adultos los dejaron solos en el comedor para que hablaran cómodos sin ninguna clase de bruma extra a la realidad. Es incómodo de cierta manera. El saber que ellos dos tienen un asesinato a cuesta. Es defensa propia, claro, pero aun suena tan increíble que en serio tuvieran que hacerlo que Jin verifica que sea real.

A pesar de lo doloroso que es adentrarse de manera tan profunda a una mente ajena.

—Tranquilo. No fue culpa tuya que se diera así. Además, aún tenemos vacaciones para disfrutar juntos—Yoongi no luce animado en lo absoluto. Tan indiferente y carente de sentimientos como el primer día—. Podríamos ir a la playa, quedarnos unos días... Dicen que el mar relaja mucho la mente, también los músculos.

—O al bosque. Eso también es muy efectivo.

—Y pasar tiempo con animales. —Afirma Taehyung.

—No tengo ánimo. —Responde Jimin en voz baja, mirando a Yoongi que sigue con esa misma cara inexpresiva e intentando comer por sí mismo.

—Jim-

—Lo ayudaré a ir a la habitación. Quiero dormir yo también.

De alguna manera, fue como si esa antigua barrera que separaba a los Slytherin de ellos vuelve levantarse, más alta y fuerte que nunca antes. Hoseok, quien es el principal invasivo, sabe que no es el momento de acercarse a Yoongi. Apenas van un par de días –o más, la cuenta se le escapa-, y Yoongi de por si no es muy comunicativo.

Permitirá que pase más tiempo hasta que la herida hecha por ese par de monstruos sanara y así el Omega herido aceptara su cercanía y presencia. Hasta entonces, respetar las distancias y silencios.

Fue extraño que, a mitad de esa misma noche, tuviera a un intruso en la cama. Yoongi se había abrazado a su espalda con demasiada fuerza, casi peligrando de reventar su caja torácica. Escucha los sollozos, las lágrimas mojan su pijama y siente la misma angustia que él.

—Está bien. No eres una amenaza. No eres un monstruo. —Asegura con voz amortiguada y adormilada.

Yoongi no hacía sino sentirse una peor plaga que acabaría por apagar al sol.