Silver Snake | YoonSeok/Sope || BOOK 1#

15. Correa Doble

Hoseok se considera alguien que no logra mantenerse enfocado y de hecho así lo es. A pesar de que tenía muy plantada la intención de preguntarle a Yoongi si es un Animago o un Maledictus... Dejaba el tema totalmente de lado. No porque se acobardara –al menos no la mayoría de ocasiones-, o porque no encontrara la manera de abordar la conversación. Es que sencillamente se distraía.

Empezar a hablar con Yoongi es, en definitiva, un universo totalmente distinto que lo tiene fascinado a más no poder por venir directamente de él. Suele hablarle mucho con respecto a lo que lleva estar en Slytherin, ser un sangre pura en una casa estricta, la sociedad: Sus puntos buenos, malos, lo que le gusta y lo que no.

En resumen, está conociendo lo que es Yoongi, todo lo que lo ha formado y convirtió en lo que es hasta ahora. Es un sentimiento totalmente extraño que lo lleva a mantenerse hora y horas hablando de cualquier tema. Por su parte también contaba datos de la sociedad Muggle, los que cree muy posibles que podrían disgustarle, los que amaría y demás.

Esta clase de charlas llevaban a que Yoongi se riera más seguido en su presencia, hasta el punto de mostrar esa gummy smile e incluso alborotarse. No es algo que nadie lograra en él aparte de su ya consabido compañero de casa, por ello resultaba un total logro que estuviera tan energético.

Recibieron el año nuevo en la torre de astronomía, deseando un mejor año aunque esto realmente no iba a cumplirse, pero eso ellos no lo saben. De manera inconsciente, Hoseok había agregado a ese deseo que para que se considerara un buen año Yoongi siguiera siendo así de cercano.

E incluso más. Deseaba la parte más extraña y aparentemente desconocida de sí misma. Aun así no lo negó, sería lo más bonito que podría pasarle a decir verdad. Yoongi ya es lo más bonito que le paso en el final de año.

Las vacaciones terminaron, Yoongi recibió una carta de sus padres que botó sin leer y antes de darse cuenta tenían que iniciar clases. Pasar de vaguear por todos lados a tener entrenamiento, tareas, clases, cinco horas de sueño –con suerte-, lo iba a terminaran matando. Lo peor que el año escolar siguiente tendría los TIMO's y maldita sea que ya se vio reprobando todos y cada uno de ellos.

Con la muchedumbre de nuevo en el castillo ya no es tan fácil hacer lo que les dé la gana, pero bueno, nunca lo ha sido en realidad. Namjoon siendo un fantasma y copia por todos los pasillos debido al gira tiempo; Jin valiéndose de su Legeremancia para aclarar sus dudas; Jungkook disfrutando a matar la clase de Criaturas mágicas siendo siempre y sin falta un voluntario –a veces es como si no piensa en otra cosa-; Jimin siendo un colorido punto por todo Hogwarts con sus miles de amigos y Yoongi...

Yoongi está siendo esa masa de negatividad que todos lo dejan pasar apenas lo sienten cerca.

A decir verdad, no logra entender del todo que causa tanto miedo. De frente y en un duelo tal vez, pero Yoongi no irradia malignidad mientras respira.

Los alumnos de Hogwarts son bastante exagerados cuando quieren.

Y bien, ahora con el horario compartido al cien por ciento con Slytherin, los tejones deben ver cada clase con las "amargadas" serpientes y bien que muchas son sí, más no todas. Hoseok considera que el verdadero problema de Hogwarts es su constante generalización. Jimin no es amargado y lo confirma que, a pesar de su magia, nadie lo aparte. Buscan desesperadamente ser su compañero durante la clase que sea.

— ¿Por qué a él no lo huyen? Tienen... magias igual de negras y fuertes. —no sabe como explicarlo, pero al enojarse, el Omega Morpho era incluso más intimidante que Yoongi.

Un estado difícil de conseguir para ser sinceros.

—Se esmera en esconderla, por algo es vulnerable.