¿Hasta que la muerte nos separe? - (Segunda parte de Dulce Espera, H.S)

*48*

Harry's POV

Me encontraba en el elevador del hotel, eran las nueve de la noche por lo que asumí que las únicas personas en el evento serían Jade y Liam, era muy temprano aún para que se encontrara lleno, a pesar que se haya especificado en la invitación el ser puntual. 

Presioné el botón con el número del piso, la terraza del hotel era la mejor parte para realizar un evento, sin duda. Me di una mirada en el espejo, me había colocado unos pantalones de vestir blancos, zapatos marrón oscuro al igual que mi correa y una camisa de lino negra con las mangas remangadas. De accesorios solo llevaba algunos anillos de oro, un collar y uno que otro brazalete. 

Las puertas del elevador se abrieron y luego de dar unos cuantos pasos quedé sorprendido, a quien sea que Jade hubiera contratado para decorar el lugar merecía reconocimiento. La terraza tenía un aspecto muy elegante pero a la vez, sensual. Telas rojizas y acarameladas decoraban a forma de techo mientras que luces doradas colgaban de todas partes. El bar de madera roja tomaba protagonismo al fondo del ambiente, decorado con flores exóticas de colores oscuros, y botellas de distintos tamaños y colores. La música era fina pero a la vez incitaba a bailar y divertirse. El lugar me hacía recordar a una especie de cabaret, pero elegante y ordenado.

-¿Le puedo ofrecer algo? - preguntó una voz femenina con acento francés, me giré.

-Creí que era bar abierto.

-El bar abierto empieza a las diez de la noche, le puedo ofrecer cualquier bebida de su preferencia por mientras - replicó con una leve sonrisa.

-Un whiskey etiqueta roja, con dos hielos, por favor -agregué, asintió y se perdió entre las lianas de tela.

Pasada una media hora ya habían llegado varias personas, entre ellas Niall y Dakota, la última no paraba de hacerle comentarios a Niall sobre la manera en la que la decoración del lugar le hacía recordar a un burdel, y que ella, al ser una mujer embarazada de casi siete meses, no se sentía "bienvenida". Gracias a todos los dioses que para ese entonces ya iba por mi tercer vaso de whiskey, o cuarto.

Cada vez que veía ingresar al ambiente la silueta de una mujer mi corazón se aceleraba, no veía a _______ desde hace mucho, y por lo que me había comentado Darcy la última vez que estaba con ella, mi aún esposa, se había hecho un cambio de estilo. Esperaba el poder hablar al verla, porque lo más probable era que me congele y eche todo a perder, como si ya no lo hubiera hecho.

Poco a poco la música empezó a acelerarse mientras un par de tubos empezaron a bajar del techo y las personas se reunían alrededor con bebidas de todo tipo en mano, a ver el espectáculo. Entre la especie de humo que empezaron a soltar unas máquinas distinguí a Jade en un tubo y a ¿Eleanor? ¿Qué hacía Eleanor en el otro tubo? Ambas no estaban vestidas con lencería ni nada de eso como muy probablemente Dakota esperaba, al contrario, llevaban puestos unos hermosos conjuntos de tela brillante y semitransparente ceñidos al cuerpo, Jade de un tono de morado y Eleanor de un tono rojizo. De pronto, todo eso me dejó de importar, se desvaneció por completo junto con el humo que acompañaba el show.

En el fondo, en la entrada al evento, rodeada de luces doradas y flores exóticas estaba ella. 

Llevaba puesto un vestido rojo vivo, pegado al cuerpo con un sensual corte en uno de los lados que dejaba a relucir su pierna perfectamente bronceada, su figura se veía perfecta, sus aretes tintineaban ligeramente mientras ella movía suavemente la cabeza en busca de algo, dio unos pasos hacia el frente y pasó, nuestras miradas se cruzaron, pestañeó mientras su pecho bajaba y subía con ligera prisa. 

Se veía como una verdadera diosa.

Empecé a dar unos pasos lentos instintivamente entre el tumulto de gente, era una especie de electricidad magnética en lo más profundo de mí que me jalaba hacia ella. Me sentía hipnotizado. Su expresión se tornó confundida, luego tensó la mandíbula,me giré para ver lo que ella estaba mirando. Desee no haberlo hecho.