CAPÍTULO XXXVI: Riesgo

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                Las miradas confusas de los tres integrantes de la FNC se concentraban en el aparato móvil que sostenía la joven. Asustada y muy poco acostumbrada a ese tipo de mensajes, intenta desarmar el celular rápidamente hasta que  un extraño sonido se escucha del otro lado del celular y un “lo siento” seguido de un pequeño alboroto, confundiendo aún más a los jóvenes que se miran confundidos. 

-          ¿Maichiru sigues ahí? – pregunta esta vez una voz femenina.

-          ¡¿Quién habla?! – emite exaltada la joven.

-          Soy Marisol Dong, la médico veterinaria, mi esposo está de bromista, por favor discúlpanos –

A Maichiru prácticamente se le desaflojo la mandíbula al enterarse que era el mismísimo Taeyang el que le había hablado en aquella voz tan… seductora, sí, lo reconocía, en donde automáticamente su rostro se ruboriza ante la mirada desconfiada de Yong Hwa y la traviesa de Hong Ki que comprueba los celos del líder. Intentado reincorporarse y en donde al fin el bendito aparato móvil reacciona logrando desactivar el altavoz, camina hacia la cocina para esconder su evidente rostro avergonzado y entender por qué aquella llamada.

Hong Ki lo observa en silencio, lo ve acomodarse en el sofá con molestia en su mirar, era más que obvio que estaba celoso, si le faltaba poco para que el humo le saliera por los oídos, sería la oportunidad perfecta para seguir provocándolo, siendo inevitable esbozar una pequeña sonrisa de victoria.

 -          ¿Por qué la cara? – irrumpe Hong Ki - ¿Ahora estás celoso de Taeyang? –

-          No empieces que no estoy de humor – aclara Yong Hwa.

-          Es más que evidente que estás celoso, ¿Y por qué estás aquí? ¿Por celos también? –

-          Mejor guarda silencio, estamos bien así, sin cruzar palabra –

-          Perfecto, seguiré al lado de Mai entonces – sonríe.

-          ¿Qué pretendes con ella?, no me contestaste la última vez –

-    ¿Qué quieres saber? ¿Si siento algo por ella? – sonríe irónico – Ya tienes a Seohyun, ¿Para qué quieres a Mai? –

-          Yo no tengo a nadie, eso es más que un mal entendido –

-          Los medios no dicen eso, y Maichiru cree lo mismo –

-          No la metas a ella en esto –

-          Entonces aclárale las cosas, sino, una oportunidad para mí –instiga Hong Ki.

-          No me provoques – espeta Yong Hwa.

-          Te estoy advirtiendo – sonríe Hong Ki y desvía la mirada a la joven que se acercaba.

Maichiru se acomoda junto a Hong Ki, que le sonríe ampliamente ante el aún ruborizado rostro femenino. Aún recordaba aquel susurro masculino y después de la explicación de la propia esposa no pudo evitar soltar una carcajada al recuerdo, una gran anécdota para su corta vida. Intentando reincorporarse observa a Hong Ki que le sigue sonriendo, no quería dirigir su mirada a Yong Hwa, pero no hacerlo era una falta de respeto, los valores de su padre pesaban más que su avergonzado rostro. 

-          Taeyang… - aclarando su garganta – Mejor dicho, el Señor Dong, quiere adoptar a los dos pequeños – emite con sus manos apoyada en sus piernas.

-          ¿En serio? – pregunta Hong Ki emocionado - ¡Es una gran noticia! Dos hermanitos se irán juntitos, y lo mejor es que tendrán médico las 24 horas del día –

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