Jimin asintió y bajó la mirada al suelo. Quería decir tantas cosas, tenía tantos sentimientos apretando su pecho que simplemente quería gritar. Necesitaba tantas respuestas, tantas dudas que carcomieron su cabeza estos últimos dos meses, tanto dolor que lo fue matando poco a poco. Un dolor que jamás había sentido, el cual no tuvo nombre los primeros días. Al principio suponía que era la decepción que sufrió, el haber creído en alguien de forma tan ciega. Luego pensó que quizás era la bronca de haberse dejado llevar por el mayor, el haber dejado que lo use como su juguete. Pero en el fondo sabía que nada de eso tenía que ver con esa herida que ardía en su pecho. Tenía claro que esto era mas allá de Hoseok. Había algo que no lo dejaba en paz, algo que lo aferraba al pasado, que no lo dejaba avanzar. Sabía de que se trataba, pero le costaba decirlo en voz alta. Era difícil de pensar, complicado de hablar. Era algo que llevaba en la piel, una marca que jamas se borraría. Hoseok había logrado atravesar esa barrera invisible, el menor confió en él, le había dado la valentía que tanto necesitaba. Había superado alguno de sus miedos, se había dejado tocar por alguien mas y lo había disfrutado. Tantos chicos y chicas (bueno, no tantos, solo un par) que quisieron acercarse a Jimin sin éxito, que solo obtenían un beso forzado por la presión social del entorno, ellos lo intentaron pero el rubio los rechazó. Por miedo, por desconfianza, por falta de atracción, bueno, realmente no importa el por qué. Pero jamás había aceptado que nadie lo toque. Hasta que Hoseok llegó a su vida y dio vuelta su pequeño mikrokosmos. Le devolvió la fe en los seres humanos, recobró la esperanza de que quizás alguien lo iba a querer. Alguien estaba dispuesto a armar ese rompecabezas de mejillas rosadas. Pero nada salió como le hubiera gustado, todo se arruinó por completo tan rápido. Y ese dolor que había creído olvidar volvió a aparecer en forma de fichas. Habían pasado tantos años desde los abusos que vivió, sin embargo él lo sentía tan reciente. Todas esas heridas volvieron a doler cuando el mayor lo dejó. Se hizo la cabeza de tantas formas, se negaba que ese dolor fuera producto del pasado, pero muy en el fondo sabía que sus lágrimas ahogadas contra la almohada no eran culpa del mayor. ¿Por que? Porque no podía odiar a Hobi, por mas que lo haya lastimado, era imposible para él recriminarle algo. Se culpaba a si mismo, por no haber sido suficiente, por no haber logrado que lo quiera de la misma forma. Porque Jimin no lo quería como un amigo, era mas que eso. Sentía que había una conexión entre ellos, que ambos se complementaban. El menor estaba enamorado de Hobi, pero eso no era lo que le dolía. No le dolía tanto el no haber sido correspondido. Le dolía el saber que sus miedos no le permitieron demostrar todo lo que le pasaba, animarse a hacer las cosas que su mente imaginaba por las noches. ¿Por que no podía olvidarse de ello de una buena vez? ¿Por qué no lograba soltar el pasado?
Sus compañeros de danza llegaron a la sala y pusieron cara de asombro al ver a Jimin. Jeno, Jisung y Moonbin corrieron a abrazarlo, mientras que los demás se acercaron y lo saludaron con simpatía. Lejos habían quedado los roces de un par de meses atrás, incluso Felix y Minho se disculparon en nombre de todos por la absurda pelea. El grupo estaba unido y feliz de ensayar juntos una vez mas.
La clase fue realmente buena, todos dieron lo mejor de si mismos. Al terminar la clase, Jimin se sentó en el piso a descansar, sus compañeros lo saludaron uno a uno para luego marcharse, se los veía felices. Hoseok observaba la imagen desde una distancia prudente, su corazón se alegraba de haber visto esa unión en el grupo pero principalmente ver nuevamente a Jimin bailando fue lo que más disfrutó. Miró a su alrededor y notó que Yugyeom estaba alejado, su expresión era fría e incluso algo molesta. Hobs se acercó y apoyó su mano en el hombro del mas alto.
-¿Está todo bien Yugy?
-Sabes muy bien que no está todo bien Hobi.-respondió con un tono seco.
Hoseok suspiró un momento, el menor tenía razón y él mejor que nadie lo sabía.
-Voy a mantenerme lejos, lo prometo. No quiero lastimarlo mas.
-Jimi merece explicaciones Hobs, necesita saber porque lo usaste de esa forma.
-Yugyeom, no lo usé. Esto es mucho mas complejo de lo que parece, estoy intentando arreglar mi pasado, por eso decidí alejarlo. No quiero involucrarlo en toda esa mierda. Yo también intento cuidarlo, aunque a diferencia de ustedes, a mi me salió muy mal.
Yugyeom lo miró a los ojos, su mirada denotaba preocupación pero principalmente confusión.
-¿Te arrepentís de haberlo dejado?-preguntó el menor.
-No, porque se que si no lo hacía esto podría haber sido peor-respondió.
Ambos miraron a Jimin, quien seguía sentado en el suelo, pensativo. Miraba su celular, había puesto una canción lenta para relajarse, aunque la letra era realmente dolorosa.
You haven't been good for a while
Is it the sound of your own thoughts
That always keeps you up at night?
Maybe it's time to say goodbye
'Cause I'm getting pretty fucking tired
You haven't felt right for days
Is it the fact you never say
What comes in your mind that day?
Maybe it's time to shut away
'Cause I've never really felt okay
'Cause I've been eating less all day
To give my brain some extra space to think
'Bout all the things to do to help
Distract me from the rudeSu aura angelada los conmovía, era tan puro, tan frágil. Se lo veía cansado, pero principalmente triste. Y eso era lo que preocupaba a ambos. Sin sacar la vista de su amigo, Yugyeom rompió ese breve silencio.
-Es que no lo entiendo. ¿Por que volver al lugar donde mas sufrió este año?
Es que por algún extraño motivo los seres humanos tenemos esa irónica costumbre de volver al dolor. Volver a ciertos lugares tóxicos, reencontrarnos con aquellas personas que tanto daño nos hicieron. Volvemos a esos recuerdos oscuros llenos de errores y aciertos, pisando cada baldosa llena de lágrimas que mojan el borroso paisaje del ayer. ¿Por qué volvemos? ¿Por qué no dejamos ir ese viejo dolor, cerrar la herida? ¿Por qué no somos capaces de mirar el futuro sin echarle un ojo al pasado? Es cierto: hay heridas que marcan un antes y un después, heridas que parecen no desaparecer, heridas que nos recuerdan haber amado. Pero si volvemos a ello es porque no soltamos esa parte de nuestra vida, se aferra a nosotros como muestra de que vivimos, sentimos, amamos; ese maldito recuerdo nos agarra del brazo, nos manipula, nos lleva a revivir el pasado, no nos deja ver con claridad el futuro. El tiempo pasa, cada día que pasa es un día mas de vida, minuto a minuto crecemos sin parar. El presente es un instante, ni mas ni menos que eso. Cada momento que vivimos no es eterno, la vida es eso, un momento. Un momento que acumula recuerdos, anécdotas, situaciones vividas; un momento que sueña con un mundo mejor. "No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo aguante" . La vida no se detiene por nada ni por nadie, el tiempo nunca deja de correr. Entonces... ¿Por qué nos aferramos tanto a un momento? ¿Por qué vivimos en el pasado? ¿Acaso no somos conscientes que el tiempo no vuelve atrás? Para lograr seguir adelante, hay que dejar ir ese dolor que nos agobia. Porque el pasado no es ni mas ni menos que eso, ALGO QUE PASÓ. Y eso no puede definirte. No sos tu pasado Hoseok, sos mas que eso. No sos ese dolor Jimin, sos mucho mas que eso. Somos mucho mas que esto.
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Just Dance [HOPEMIN]
FanficJung Hoseok es un ex bailarín retirado que da clases en una de las academias mas prestigiosas de Seoul. Park Jimin es uno de sus alumnos mas talentosos y con una mirada demasiado dulce...hasta que su profesor decida terminar con toda su inocencia.