- Ahora entiendo porqué te alarmaste cuando la hallaste en casa - dijo Luka.
Habían salido por unas malteadas a la heladería que se situaba cerca de la casa de la moren después de despedirse de la madre de Lila (por iniciativa de Luka).
- Disculpa por el infierno que debiste pasar allá dentro - respondió Lila.
- Creo que fue peor para tí que para mí. La verdad creo que solamente trata de ver con quiénes se junta su hija.
- Eso no le da derecho a entrometerse. Además, nunca le ha importado lo que sea de mi vida. ¿No me puede dejar en paz ahora?.
El chico suspiró y tomó su mano.
- Estoy seguro de que eso no es cierto.
Ella suspiró con fastidio.
- ¿Podemos cambiar de tema?
- Vale. Tengo una pregunta. ¿Qué es lo más cruel que alguien te ha dicho?
Hace tres días...
Ladybug entró al cuarto dónde tenían esposado a Gabriel, junto con un agente.
- ¿Qué hacen aquí?- preguntó algo hostil.
Ladybug suspiró.
- Vinimos a hacerle unas preguntas...
- Más bien aclaraciones, éste caso está resuelto - corrigió el detective.
- Yo no hice nada.
- No, dejó que una chica de dieciséis años lo hiciera - comentó el detective.
- ¡Yo no le pedí nada!, ¡Ya les dije, que perdería más con eso!
- ¿Qué más podría perder, Gabriel? - le preguntó el hombre.
El Agreste se quedó callado.
- Exactamente, y bien dicen: una vez que tocas fondo, lo único que puedes hacer es subir, ¿No?. Ya tenemos los testimonios de las mujeres a las que contrató para hacerle el trabajo sucio. Ambos coinciden.
Ladybug suspiró.
- Además de su confesión de las primeras akumatizaciones, la que grabó Chat Noir.
- Algo no cuadra aquí - interrumpió Ladybug - Sí confesó el crimen anterior... ¿Por qué negaría las acusaciones de las akumatizaciones más recientes?
Gabriel Agreste volteó a verla con un brillo en los ojos, allá estaba la pieza que podría ayudar a defender su inocencia.
- Para reducir su condena. - afirmó con seguridad.
En ese momento otro hombre entró a la habitación.
- Dejen de interrogar a mi cliente. Soy Edmond Allard. El abogado del señor Agreste - dijo sin molestarse en estrechar la mano de las demás personas presentes en aquella habitación.
- No lo estamos interrogando, ya tenemos ambas confesiones y vimos que también es responsable de las akumatizaciones pasadas. Sería un ingenuo sí le creyera que no es responsable de ésto.
- Ellas bien pudieron haberse puesto de acuerdo para manchar el nombre del señor Agreste. ¿Por qué ellas dos no están aquí, siendo juzgadas igual que mi cliente?
- Por qué sus dos testimonios coinciden, y no tenemos razones para ponerlas bajo arresto.
- Ellas dos también fueron parte de ésto. En especial esa Nathalie, también fue su cómplice la vez pasada según tengo entendido.
ESTÁS LEYENDO
te cuidaré
FanfictionSECUELA de "te encontré" Parece que su amor es imposible, ¿podrán superar los obstáculos qué les pongan con tal de estar juntos? ¿o se perderán mutuamente para siempre?