te cuidaré

capítulo 36: because.

¿Qué es lo más cruel que alguien te ha dicho?

Hace cuatro años

No quería ir a la escuela, no quería verlo otra vez, pero su madre le preguntaría porqué y seguramente las cosas serían peores para ella si "trataba" de "ayudarla".

Entró al salón, ahí estaba la bola de idiotas que odiaba. Al verla entrar se empezaron a reír. Lila sólo tomó su asiento esperando que no se les ocurriera venir a molestar.

¿Carina?, ¿Qué hacía ella junto a Romeo?. No tuvieron que pasar otros tres segundos para que Lila notara que eran pareja. Supuso que era algo obvio, ella sólo había sido una apuesta y quién tenía el premio de molestarla más veces era Carina Moretti.

La mencionada volteó a verla, Lila bajó la mirada, "por favor quédate ahí, por favor" pensó. Claramente la niña no escuchó sus pensamientos (y aunque hubiera sido así, seguramente no le importaría).

- Hola, crédulila.

Otro apodo estúpido, hasta ahora el más estúpido, aunque no se atrevió a decirlo en voz alta.

- ¿No saludas? - la chica de rizos castaños rubios la miró con arrogancia. Al no ver respuesta de la morena chasqueó la lengua - ¿Sabes?, No importa, ni siquiera debería de concederte el honor de dirigirme la palabra.

"Tan insoportable como siempre" pensó Lila.

- Bueno, sólo venía a decirte, que por si no te has dado cuenta, Romeo y yo estamos juntos. Claramente siempre me quiso a mí. - hizo una pausa - dime ¿Alguna vez creíste en serio que querría estar contigo?

- Déjame en paz - murmuró.

- ¿Qué?

- ¿No me oíste?- dijo empujando el pupitre en dónde estaba recargada la otra, haciendo que cayera al suelo. Rossi se levantó - ¡Déjame en paz!- dijo remarcando la oración - ¡No sé cuál es tu problema conmigo, yo nunca te he hecho nada!, Sólo déjame en paz. ¿Oíste?

Todos sus compañeros se quedaron en una especie de Shock, se podría decir que hasta ella misma estaba así. Jamás había dicho nada ante todos los abusos que Moretti y todos sus compañeros solían cometer hacia ella.

La castaña se quedó viendo a Carina en el piso. La contraria estaba igual de sorprendida que los demás, se miró la mano, había impactado al momento de caer y le dolía un poco. Miró con sus ojos castaños a Lila Rossi.De ninguna manera iba a permitir que le hablara así, que pensara que ella había ganado.

- Bianca, Nicoletta, sosténganla - ordenó a sus dos "borregos".

Se levantó y se paró ante ella, la tomó con fuerza de la coleta de caballo que se hacía en ese tiempo.

- ¡Basta, me estás lastimando! - exclamó Lila.

- ¡Tú no me vas a decir que hacer!, ¿Oyes?

- ¡Sí, ya oí!

- No eres tan valiente ahora, ¿Cierto?.- sonrió.

- Carina, basta - escuchó la voz de Romeo.

- ¿La vas a defender?, ¡No me digas que en serio te enamoraste de ella!

- Claro que no - negó - Pero si llega nuestra profesora te van a regañar.

Carina la soltó. No sin antes dirigirle unas palabras mientras Lila trataba de aguantarse las lágrimas.

- Eres patética, Rossi. Por eso ha de ser que tu madre prefiere trabajar que pasar tiempo contigo. Tal vez hasta es tu culpa que se estén separando.