capítulo 40: al descubierto

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Lila

Lila llegó agotada a su casa... No podía dejar de pensar en Nathalie...

¿Las cosas hubieran sido diferentes si hubiera confesado?. Quizá para ella sí, que había salido librada de todo... Por Nathalie. Se sentó en su cama y abrazó sus piernas pensando en ello. ¿Saldría libre a los 18?, ¿O quizá el jurado le hubiera visto como un ser despreciable que merecía estar encerrada?.

Suspiró. Vaya que era cobarde.

Eso le hizo recordar a Luka... Shit.

¿Se habría enterado de lo que pasó?. Tonta, obviamente, todo el mundo se había enterado...

Todo el mundo.

¿Qué pensarían todos sus compañeros ahora que sabían la "supuesta" verdad?, ¿La odiarían?... Mierda. Había algo en lo que no había pensado: se le había caído su teatrito de que era amiga de Ladybug.

Ya no pensarían que era genial... Bueno, tenía los viajes por el mundo... Pero... En primer lugar había mentido hacerca de Ladybug porque todo el mundo la amaba y la admiraba. Y pensó que decir que era su amiga le daría popularidad y haría que todo el mundo le amara.

Las mentiras son difíciles de mantener. Una vez que son descubiertas, la gente empieza a dudar de cada palabra que dices... Aunque éstas si sean ciertas.

¿Le creerían que Ladybug la había tratado de esa forma?

No los culparía si no... Pero... Empezó a sentir ese nudo doloroso en la garganta, pero impidió la salida de las lágrimas por un momento, se obligó a pensar que no necesitaba a nadie. Qué daba igual lo que todo el mundo dijera u opinara, ninguno de ellos sabía nada sobre ella.

O casi nadie...

Pensó en Luka de nuevo... ¿Qué pensaría él sobre todo?, ¿Se sentiría decepcionado de ella?, ¿No le volvería a hablar?. Al pensar en esa posibilidad sintió una sensación en el estómago horrible... En ese momento una lágrima cayó por su mejilla, no lo culparía por ello pero... Igualmente era doloroso pensarlo.

Sonó la alarma del celular, no sabía cuándo se había quedado dormida, pero decidió levantarse para ir a la escuela. Cómo siempre sus comidas del día estaban preparadas, pero su madre no estaba.

Pensó en no ir a la escuela, pero tarde o temprano tendría que ir, su mamá no la veía demasiado pero si veía las calificaciones y preguntaría porqué había bajado tanto... Podría preparar la excusa de que era por su ausencia, pero jamás había sacado calificaciones tan bajas como las que seguramente tenía ahora mismo y no le creería. Además si metía esa excusa las cosas seguramente cambiarían en cuanto a la actitud de su madre...

Sería más incómodo de lo que ya era, si iba a decirle todas sus verdades lo preferible era tener un vuelo a Italia listo para el día siguiente. Lo cuál jamás pasaría.

Salió de casa y respiró profundo, entró a la escuela. Inmediatamente las risas y pláticas pararon, sentía todos los ojos en ella, se escuchaban murmullos, pero trató de disimular que se sentía segura (o al menos que no se sentía incómoda).

Al llegar a su salón igualmente, estaban hablando al rededor de Marinette y Adrien (por separado), no le dió tiempo para pensar en qué era lo que decían, porque inmediatamente los ojos de sus compañeros se pusieron en ella. Empezaron a murmurar cosas, no sabía qué hacer así que sólo se encaminó a su lugar y trató de ignorarlos. Hace mucho que no se sentía juzgada entre tanta gente.

Marinette

Afortunadamente llegó temprano, aún no había llegado la profesora. Había gente cerca de Adrien, diciéndole que lo sentían por él y varias cosas así. Pudo ver en la cara del chico que no se sentía cómodo con eso y solo trataba que nadie molestara con eso.

te cuidaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora