Teen Wolf One Shots

41| Stiles Stilinski

DEDICADO A: erickawonderwoman

Si tuviera que hacer un resumen de mi vida… Empezaría contando como es que mi madre, Kate Argent, me trajo otra vez al mundo de los vivos. Tal vez podría también contar como fue mi muerte, una bastante trágica si nos ponemos a pensar.

Tratando de salvar a la persona que más amaba.

Un Oni atravesó mi estómago con su espada cuando tratábamos de salvar a Stiles.  No recuerdo mucho de esa noche. Solamente como mi cuerpo se sentía cada vez más débil, el grito de Lydia, los brazos de Scott y como mientras mis ojos se cerraban… la persona que en aquel momento era  Stiles, se iba dándome la espalda.

Luego, desperté en una cama. A un lado mío estaba mi mamá acariciando mi cara y pelo. Algo raro, todos sabemos que Kate nunca fue y es tan demostrativa, o al menos, no en el sentido amoroso.
Y ahora, meses desde que regresé, me encontraba en un pueblo cercano a donde vivía antes.

– ¿Cuándo volveremos? – pregunto mirando a través de mí ventana.

–Pronto cariño. – dice mientras cierra la puerta y desaparece.

Nos habíamos ido de Beacon Hills con la promesa de que volveríamos. Y en mi cuerpo, no aguantaba la ansiedad que me provocaba el volver. Ver a mis amigos, ver si estaban bien… Ver a Stiles.

Dos semanas después...

–¿C-como es que…? – Scott me miraba asombrado.

–Aún no lo sé,  Kate no me dijo mucho. – respondo con una sonrisa tímida.

–No… ¡Dios estas viva! – dice Lydia luego de salir de su shock, sus brazos me rodearon y fue imposible no corresponderle.

La había extrañado tanto. A todos.

Los sollozos de mi amiga se ahogaban contra mi hombro. Al llegar me enteré que no solamente tuvieron que pasar por mi pérdida… mi prima Alisson también fue asesinada.

Una gran molestia se producía en mi pecho cada vez que las palabras volvían a mi mente.

–Te extrañé tanto…  – digo separándome de ella y mirándola. Lydia sonrió apenas y volvió a abrazarme por segundos.

Scott nos miraba con cariño, podía notarlo en sus ojos, en la sonrisa que se le formó por segundos.

–¡Scott! ¿Qué es eso tan importante que tenías por decirme? Estaba con…

Un silencio bruto se apoderó de la habitación. Pasando por la puerta estaba Stiles.

Sus ojos me miraron por segundos y se cristalizaron. Su boca se abrió como si quisiera decir algo, pero las palabras no le salían. A ninguno de los dos.

–Danna…

Stiles corrió hacia mi y rodeó mis hombros con sus brazos, mi cara golpeo levemente contra su pecho y mis brazos lo rodearon por la cintura. Sin darnos cuenta fuimos retrocediendo hasta chocar con una pared.

Miles de emociones explotaron dentro de mí. Mis lágrimas no resistieron y se escaparon de mis ojos mojando la camiseta de Stiles, quien susurraba cosas apenas audibles en mi oído.