⾕ 、 ❪ LAZO ACC1DENTAL ❫

【 capítulo 20 】

El castaño y el peliazul se encontraban en la habitación del primero en un silencio bastante incómodo. Después de charlar con la omega pelinegra, ambos se encontraban confundidos y nerviosos.

- Entonces tu lobo está pidiendo cortejarme. - comentó el menor con una sonrisa nerviosa, ya que aún se sentía incrédulo ante la situación.

- Así parece. - respondió con nerviosismo.

- Ehm...

- ¿Qué te parece intentarlo?

Lo interrumpió Minho con los ojos cerrados, sintiendo que su corazón se saldría de su pecho en cualquier momento, mientras que por otro lado su lobo daba saltos; contento de que el pelinegro finalmente tuvo el valor de preguntar.

Jisung miró al alfa con sorpresa, pues él estaba pensando en proponerle lo mismo; al fin y al cabo sus lados lobunos habían creado una conexión y ninguno perdía nada con intentarlo, además, muy seguramente de esa manera Minho dejaría de atacar a los alfas que se acercaran a él, o por lo menos eso esperaba.

- Sí, no tenemos nada que perder. - respondió jugando con sus manos en acto de completo nerviosismo.

- Entonces, a partir de ahora, ¿podría decirse que aceptas que yo te corteje oficialmente?

- Por supuesto. - aseguró el omega mirando al mayor, sin embargo, ambos voltearon asustados al escuchar la puerta abrirse de manera brusca.

- ¡Me debes 500, perra! - gritó la omega cuando la puerta estuvo completamente abierta. Jisung y Minho miraron con sorpresa como la alfa Lee le entregaba a regañadientes el dinero a la pelinegra que sonreía en grande. - Y en cuento a tí Sunggie, ¡Bienvenido a esta pequeña y normal familia! - exclamó con alegría.

Uy si, muy normal

El mencionado sonrió con dulzura asintiendo con tranquilidad; pues, a pesar de que aquella familia no era normal en absoluto, los quería demasiado, tanto que amaba cada uno de los momentos que vivía con ellos. El celular en su bolsillo sonó, por lo que se apresuró a sacarlo, respondiendo la llamada de inmediato sin siquiera mirar quien era la persona.

- Ven aquí y trae contigo a Minho, pero ya. - era su madre.

- ¿Qué? Mamá son las cinco.

- ¡No me importa! ¡Te quiero aquí en media hora, Han Jisung! - exclamó Irene antes de colgar la llamada, dejando a un peliazul totalmente confundido.

- ¿Pasa algo? - preguntó Seulgi, preocupada ante el gesto del omega.

- Mi mamá quiere vernos a Minho ya mí en media hora. - respondió aún confuso.

- ¿A mí? - el alfa se señaló a sí mismo, recibiendo un asentimiento del peliazul.

- Bueno vayan, no querrás hacer esperar a tu futura suegra, ¿verdad hijo? - mencionó la pelirroja con tranquilidad. - Espero que sigas vivo para la cena. - se burló, recibiendo un golpe por parte de su omega.

- ¿Aprovecharán para decirle a tus padres Jisung? - preguntó Shuhua mirando a quien mencionó.

- Sí, creo que será lo mejor, si no se los digo ahora, mi madre va a enfadarse más. - aseguró. - Nos vemos más tarde. - se despidió, y junto al castaño se marchó en dirección a su hogar, sintiendo un vacío desagradable en su estómago.

Todo estaba yendo muy rápido; eso le asustaba y lo ponía demasiado nervioso.

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Ambos se encontraban fuera del hogar del menor, nerviosos y asustados. Jisung ya se sentía siendo golpeado por su madre al aceptar el cortejo de Minho, mientras tanto, el alfa estaba imaginando el millón de formas en la que la omega Han le asesinaría.