⾕ 、 ❪ LAZO ACC1DENTAL ❫

【 capítulo 30 】

— Vaya, tu relación con Minho sí que es especial. — comentó Jaebum, observando la habitación con sorpresa.

Había pasado mucho tiempo desde la última vez que había entrado: las paredes vacías que Jisung se negaba a decorar, ahora se encontraban llenas de fotografías, la mesita de noche que casi nunca tenía más que un libro y los anteojos de descanso que solía usar ahora tenía dos portarretratos; que entre ambos destacaba uno especial, era color lila y contenía una fotografía "familiar", en ella, además de Jisung, sus padres, Felix y Changbin, también estaba Minho sonriendo en grande mientras abrazaba al peliazul, quien sonreía aún más.

— Por supuesto que lo es. — respondió mientras se dejaba caer en la cama. — Desde que él apareció, cambiaron muchas cosas para bien y estoy feliz con ello.

Pero el peligris no le prestaba atención a sus palabras, pues estaba más concentrado en el aroma que el lugar desprendía; no sólo era el de Jisung, también era el de un alfa.

— No puedo creerlo. — comentó y el menor le miró. — Incluso se atrevió a marcar la habitación como su territorio. — terminó de hablar con una pequeña sonrisa; no se esperaba menos del castaño, sólo se limitaba a estar sorprendido.

— ¿Marcar? ¿De qué hablas Jae? — preguntó curioso mientras se sentaba en la cama, abrazando una almohada.

— Bueno, como ya te dije, Minho se encargó de dejar su aroma en cada esquina de acá. — nuevamente informó con tranquilidad. — Lo hizo para hacer saber a los demás alfas que éste es su territorio y que tú eres su omega. — le explicó sentándose en la cama y sonrió. — En otras palabras, eres intocable para cualquier otro alfa; ninguno va a acercarse a tí mientras su aroma se mantenga.

El menor se mantuvo en silencio, procesando la información que el contrario le había dado para que luego se dibujara una sonrisa en su rostro; el alfa castaño había procurado cuidarlo hasta el último momento.

— ¿Estás seguro de que quieres hacer esto? — el alfa le miró fijamente.

— ¿Hacer qué? 

— Alejarte de Minho. Como te dije, él no me agrada del todo, pero sé que te quiere y tú lo quieres a él; dejen esta estupidez atrás y solo continúen con su vida. — sonrió sincero. — Una relación entre ustedes promete mucho.

— Me gustaría hacerlo, pero lo arruiné, lo lastimé de una manera cruel y creo que lo mejor es darnos nuestro espacio; sólo será por poco tiempo, no por la eternidad. — sonrió un poco.

— Repetiré mi pregunta Han Jisung, ¿estás seguro de hacer esto? — ahora los ojos del mayor se clavaron en los suyos, esperando una respuesta sincera.

— No estoy seguro, pero quiero respetar su decisión y obedecer a mi madre. — se sintió intimidado por la mirada del peligris.

Soltó un suspiro cansado y decidió rendirse por ese día. Jisung podría ser bastante tonto y terco cuando se lo proponía; él lo sabía, y también que todo se solucionaría pronto.

Porque no era un secreto que ambos se adoraban y no podían vivir el uno sin el otro. ¿Cuánto tiempo creía que podrían pasar así? Quizás unos tres días como máximo. Conocía al peliazul y sabía que en menos de lo que cualquiera esperaría, él ya estaría al lado de Minho, buscándolo para intentar arreglar el daño.

˗ˏˋ ◈°.✦。ˎˊ-

— Mierda. — susurró al observar al omega peliazul en su clase de cálculo.

¿Qué demonios hacía él ahí? Según sabía sus horarios eran bastante diferentes, sólo coincidían en dos clases.

— Bien, Han, puedes sentarte al lado de Jaebum. — habló el profesor Kang, a lo que el omega asintió, obedeciendo su orden.