Tentación incontrolable [Emiliaco] ADAPTACIÓN

CAPITULO 17: "D es para Desafiar (D is for Defy)" (PARTE 2/2)

-- Puedo preguntarte algo personal? - Preguntó Joaquín la mañana del sábado mientras Emilio y él estaban sentados comiendo cereal de la caja. Estaban mirando viejas repeticiones de Bob esponja.

-- sabes que me puedes preguntar cualquier cosa - Emilio giró y le sonrió, y Joaquín sintió a su corazón saltarse enigmáticamente un latido. Se preguntó por qué sería eso, pero lo dejó ir.

-- ¿Cuál es tu más profunda y oscura fantasía, Emiliano Osorio? - preguntó, manteniendo su voz grave y ronca.

Vio como sus ojos se abrían y se removía en la silla. Tragó audiblemente y Joaquín quedó fascinado por el movimiento de su manzana de Adán.

-- ¿Enserio? - preguntó él dudando, tomando agua.

-- Sí, quiero saber. Los pasados dos meses yo exploré mis fantasías, pero tú no. ¿Qué te gusta, Emilio? ¿Quieres que sea un policía travieso? ¿Tal vez podría ser en la parte trasera de tu auto? ¿O algo extremadamente sucio?"

De nuevo Joaquín vio como Emilio tragaba.

-- Me gusta...- empezó, pero Joaquín lo detuvo.

--Sé honesto, Emiliano. Quiero saber.

--Honestamente, mi mayor fantasía es ser dominado como tú lo hiciste con la letra R. No tienes idea de lo duro que estaba; lo duro que me pongo cuando pienso en ese día. Amo estar a merced de alguien, dejándolo que haga lo que quiera conmigo. Sé que no suena muy macho, y Kiko probablemente se reiría, pero no puedo evitar excitarme por alguien que sabe realmente lo que quiere.

-- ¿En serio? Nunca hubiera, pero nunca hubiera adivinado, siempre pensé que te gustaba ser el que dominaba, cuídate ahora, puede ser que este sábado o cuando me toque la otra letra, estés debajo de mí, retorciéndote de placer - Emilio se encogió de hombros y sonrió tímidamente

--¿Por qué querías saber? - preguntó, pasándole la caja de cereal.

--Estaba pensando en mi oficina el jueves, que tú nunca has hecho algo tan escandaloso como mis fantasías del bibliotecario o el vampiro.

-- Bueno, lo tendré en mente para mi próxima letra. Tengo otra fantasía, pero la discutiremos en otro momento - río, moviendo las cejas mientras Bob le preguntaba a Calamardo si termino los deberes.

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-- ¿Trajiste los pasteles correctos? - preguntó Emilio mientras Joaquín entraba a su auto para ir a cenar.

-- Sí, pero ¿por qué son tan caros?

-- Porque son los mejores de la ciudad Joaquín. ¡Pagas por calidad!

Luego de desayunar esa mañana, parecían estar mucho más relajados cerca del otro, pero todavía había electricidad ente ellos, y un aire de tensión que Joaquín apenas captaba, pero en la movida de los últimos días lo había hecho a un lado.

Llegaron a lo de Kiko rápidamente, y antes de que Joaquín se diera cuenta, una rubia modelo lo atacaba en la puerta.

--¡Bonito! - saludó Miriam, y lo llevó adentro rápido mientras Emilio los seguía.

--¡Miriam! - saludó Joaquín imitando a Miriam.

-- Mmmm...eso es sexy - silbó Kiko desde la sala, y Emilio lo acompañó.

-- Niños. Los hombres Osorio son niños -- se dirigió Miriam al cuarto.

-- No podría estar más de acuerdo, querida - dijo Niurka y se levantó de su asiento.