Mentiras

Cap 27

Como me podia doler tanto la cabeza, los ojos me pesaban, imtentaba abrirlos y la luz me molestaba, cuando al final mis ojos se adaptaron a la luz y me di cuenta de donde estaba al verme una vía en mi brazo recorde, ese chico podía ser mi hermano y me desmalle igual por eso me dolía tanto la cabeza  alce la mano para tocarla y lo único que toque fue una venda enrollada en mi cabeza, me asuste y si no fue solo un desmayo.

-Cariño tranquila, esta todo bien.

Escuche la voz dulce de Malú, gire mi cabeza con cuidado y la vi estaba a mi lado como siempre.

-Que ha pasado.... Me duele la cabeza...

-Te desmayarse y al caer te diste en la cabeza, ya sabes la sangre como es.

-Tengo algo?

-Nada grave una brecha y unos cuantos puntos, como perdiste el conocimiento te han hecho pruebas y todo ha salido bien amor.

-Nos podemos ir ya?

-Va a ser que no Pili, te quedas esta noche en observación, tranquila me quedo contigo no voy a dejarte sola.

-Gracias Malú.... Mis padres?

-Están ahí fuera en el pasillo con Manuel, no podían entrar todos.

-Es mi hermano?

-Tu padre le ha enseñado la foto que tu tienes y ha confirmado que son sus padres, cariño lo has encontrado por fin.

Se me saltaron unas cuantas lágrimas de emoción por fin los había encontrado.

-Tengo que hablar con el?

-El lo está deseando, ahora hago pasar a tus padres que están de los nervios y luego el, pero si te sientes cansada otro día.

-No Malú... Lo necesito.

-De acuerdo, estoy fuera.

Besa mis labios antes de salir y que entren mis padres corriendo, mi madre se abalanza a mi besando mi cara como si fuera una niña pequeña.

-Hay mi niña que susto...

-Estás mejor hija?

-Me duele la cabeza pero estoy bien.

-Tu hermano parece buen chico muy educado y amable,  tiene tu mirada Pili está muy preucupado por ti

-Es veterinario como tu.

-Quiero hablar con el.

-Ahora le digo que pase, si te incómodas llamas.

Asentí con la cabeza y se fueron, a los pocos minutos entro el, se quedó anclado en la puerta, lo mire, era guapo un poco mayot que yo, mirándolo bien si que le veía parecido a mi.

-Pasa no te quedes ahí.

Dio unos cuantos pasos, se quedó a unos metros de la cama aún sin atreverse a dar el último paso pero ya estaba lo suficientemente cerca, estire el brazo para tocar su mano, no me rechazo, acarició mi palma, lo mire a los ojos los tenía aguados como yo.

-Puedo sentarme?

-Si claro.

La señale la silla para que lo hiciera a mi lado, ya sentado cogió mi mano acariciandola levantó la vista y me miró vi ternura en sus ojos.

-Como estas?

-Me duele la cabeza un poco.

- Casi me muero del susto al verte ahí tirada en el suelo, ha sido tan impactante verte ahí de pie, no sabía que pensar.

-Eres mi hermano?

-Yo creo que si, me han contado tus padres cosas y coinciden  cuando mis padres perdieron una niña, ahora será lo difícil hablarlo con mis padres, no será fácil, lo pasaron muy mal sobre todo mi madre ella sufrió te lloro y aún lo sigue haciendo, siempre hay flores frescas en tu tumba.

-Hablame de ellos por favor?

-Son dos personas muy buenas trabajadoras, Papá es veterinario como nosotros el con mucho esfuerzo la levanto ahora esta jubilado y yo he cogido su estela, se alegrará tener otra hija veterinaria y mamá es costurera esta ya también jubilada, tienes dos hermanos más, ya ves família numerosa, yo soy el mayor, viniste tu, luego Tomás y la pequeña Raquel ella ya fue un fallo, es la consentida de casa y la rebelde es la que más te hecha de menos tener a su hermana mayor para contarle sus cosas.

Sonrei al escuchar hablar de su familia lo mucho que se quieren.

-Tienes fotos?

-Si claro.

Se sento esta vez al borde de la cama saco su cartera donde tenía fotos de ellos de pequeños y si  tenía razón era una gota de agua de mi madre, se veían tan guapos todos juntos de pequeños felices y faltaba yo, me limpie un par de lágrimas que caían sin poder evitarlo, luego saco el móvil para sacar fotos más recientes, de él y su mujer.

-Mira tus sobrinas siete y diez años.

-Son muy guapas y tu mujer también.

El sonrió siguió enseñándome más fotos de ellos, luego de Tomas.

-El es el soltero de oro un pica flor no hay manera de que siente cabeza, es piloto pues ya sabes en cada aeropuerto tiene una.

Me rei, Tomás tenía buena planta y vestido de piloto era lo no va más todo un mugeriego, Raquel aún era una adolescente con diecisete años, era muy guapa se le parecía más a papá, Manuel me contaba que estaba bastante rebelde pero era muy cariñosa, había encontrada a mis padres con tres hermanos una cuñada y dos sobrinas que más le podía pedir a la vida, así y todo no debía olvidar a la familia que me crío habían pagado sus errores y no los iba a dejar de lado y luego estaba Malú y su familia me habían dado todo sin preguntar, no podía estar más feliz.

-Voy a tener que marcharme ya Pili, pero esto es un hasta Lugo me tienes que dar tiempo para hablar con todos aun no se como empezar, es muy fuerte todo, esta noche lo hablaré con Ana mi mujer le contaré todo y mañana iré hablar con los papás, tengo tu número te llamaré te lo prometo.

-Gracias Manuel, no sabes lo feliz que estoy.

-Yo también.

Manuel acarició mi cara con suavidad dejo un beso en mi mejilla antes de irse, luego entraron mis padres y mi suegra que debieron decírselo, me bombardeaon a, preguntas de cómo había ido todo y yo emocionada les contaba, Malú tardó un poco más en entrar se estaba despidiendo de mí hermano Manuel.

José llevo a mis padres y a Pepi a casa y Malú pasaría la noche conmigo, cenamos juntas yo lo poco que me habían traído del hospital y Malú de la cafetería, mis ojos iban a su comida, Malú sonreia pícara al final termino dándome de comer de la suya.

Le deje un lado de mi cama con la promesa de cuando me durmiera ella se iría al incómodo sofá cama, pero mientas nos abrazamos acariciando mis brazos y mi cabeza apoyada en su pecho.

-Estas feliz amor?

-Mucho Malú, he recuperado a mi familia, ahora falta que me acepten.

-Manuel ya lo ha hecho y los demás cuando te conozcan se enamorar de ti sin duda como lo hice yo.

-Cambiaste mi vida Malú tu empezaste a cambiarlo todo pusiste mi vida al revés.

-Yo diría que fuiste tu me robaste el corazón, cuando te veía aquí en el hospital no podia dejar de pensar en lo hermosa que eres, dentro de mi me decía que eras la única que podía hacerme contar mi verdad.

-Estamos hechas para estar juntas Malú.

-Siempre.

Beso mis labios me abracé más a su cuerpo y cerré los ojos por hoy ya habíamos tenido demasiadas emociones.