De Regreso a Mí. Trilogía: "Viva la Vida".

Capítulo 10.

No más canciones tristes — Little mix.

Ha pasado ya un mes de que Kieran y yo terminamos, no hemos hablando en todo ese tiempo.

Quizás con el tiempo podremos vernos sin sentir que me muero o que no puedo respirar.

Por lo que por ahora agradezco al universo que no me la haya puesto en mi camino, porque, aunque me empiezo a sentir mejor, aun así, no tengo el valor para verlo.

Todavía duele demasiado.

Pero ya me voy sintiendo mejor, he comenzado a comer comida aún más sólida.

También he dejado de golpear tanto el saco, ahora mi familia y todos en la oficina ya lo saben.

Todos lo han entendido, especialmente el que no quiera hablar sobre ello.

Y estaba bien con todo, realmente me estaba empezando a sentir bien con el asunto.

Pero entonces llegaron las festividades del verano.

Siempre me ha gustado mucho el verano, es una de mis festividades favoritas, más que nada, porque el calor trae consigo mi cumpleaños.

Ya sé que, en este hemisferio del mundo, aun no es verano, sobre todo si hablas de que la ciudad en donde vivo es una de las muchas fronteras de México con Estados Unidos.

Pero siempre he querido creer, que, con la llegada de junio, llega el verano.

Por favor déjenme vivir en ese error.

Por lo que las festividades de verano, me hacían sentir como si estás fueran para mí.

Yo sé que no es así y también sé que es algo egocéntrico de mi parte pensar en ello, pero esto es en lo único bueno en que puedo pensar, si comienzo a pensar en Kieran de nuevo, me encerrare en casa, por al menos diez días más.

Y la verdad hasta yo, ya no me soporto así.

Nunca he soportado la lastima y la autocompasión, mucho menos la practico, ni siquiera cuando termine con Raúl.

Así que no puedo hacerlo por Kieran.

No más canciones tristes para mí.

Hay fiestas de piscinas casi todos los días, niños jugando en las calles llevando en una mano globos con agua, en la otra mano una manguera.

Corren detrás de otros, juegan desordenadamente.

En las calles las mujeres riegan las plantas constantemente para evitar que estás se quemen por el abrasante sol de los pocos campos con los que contamos.

Y dentro de las casas, hay unas pocas personas que siguen ahí, rezan para que los aires acondicionados soporten y les den un poco de bienestar en forma de aire frío.

Por mi parte, he tomado la ruta de nuevo, sé que tengo auto, pero prefiero no usarlo y mejor ir por la ciudad saludando y esquivando el agua que salta por todas partes.

Me pone de mejor humor, que solo ir en el auto, además puedes reducir las emisiones de carbono a nuestra ya dañada atmosfera si lo haces así.

Porque todos tenemos el deber de cuidar el planeta, señores.

Voy cortando por la avenida principal, estoy solo a unas cuantas cuadras de mi casa.

Cuando lo veo, camina de lejos llevando de la mano a una chica.

Una chica rubia de lo más hermosa.

Despampanante.

La lleva de la mano.