Alma

Capitulo 18

A tu lado la vida me sienta mejor...

Al entrar me molesto debido a que no está sufriendo mientras limpia todas las envolturas y algunos desperdicios que deje mejor dicho esta ejerciendo su magia en mi cuarto lo que me enfada mucho.

—¿¡Que se supone que haces!? Deberias estar limpiando tu mismo y no usando tu magia —le reclamo asustandolo con mi grito repentino tanto que la toalla que limpiaba mi escritorio se detuvo pero lo que quedaba de mi pastel cayo al piso siendo la gota que derramara el vaso— Mi pastel —susurro de forma que solo yo pudiera escucharla pero estoy segura que el lo escucho porque se giro viendo donde yacia mi pastel.

—Lo lamento Alma, me asustaste con tus gritos y eso sucedio —explica pero yo solo queria estrangularlo— Perdoname ¿Si? No fue mi intencion pero debiste por lo menos hacer de ver que estabas aca —menciona mientras que yo solo respiraba hondo para evitar conflictos o por lo menos hacerlo por mi padre.

—Por si lo olvidaste esta es mi habitacion y yo entro cuando se me pegue la regalada gana ¿Entendido? Limpia el piso antes de que te golpee por haber desperdiciado comida —exijo viendolo levantarse de el suelo dirigiendose a mi hasta quedar enfrente de mi provocando que mi paciencia se fuera poco a poco.

—Es demasiada ira para un solo cuerpo castaña ¿No te cansas de estar enojada todo el tiempo? Vieras que bien se siente cuando estas tranquila y no insultando a nadie —opina dejandome con la boca abierta pero con mas ganas de chocar mi puño en su mejilla o ojo el que se me ocurra primero estara bien.

—¿Quien?

—Tu —replica viendome fijamente a los ojos haciendome tomarlo como desafio.

—No ¿Quien te pregunto? Porque no recuerdo pedirte ningun consejo para controlar mi ira idiota —lo insulto pero solo provoco que sonriera descaradamente ocasionando que mi paciencia desapareciera haciendome proceder en partirle el labio— Unos metros lejos de mi espacio personal —ordeno pero solo rie mientras se limpia la sangre que brota de su labio como una cascada.

—¿Eso es todo? —replica Fabian. El deja mi ego por el suelo literalmente matando mi paciencia y eso que no tengo demasiada de ella asi que literalmente acabo con la poca que tengo, camino hacia el hasta quedar frente a frente.

Lo tomo de el cuello con intenciones de matarlo pero al ser el mas alto que yo, no soy tan intimidante pero justo cuando iba a golpear su ojo hasta dejarlo morado el estupido me besa acunando ambas de mis mejillas con sus manos, al instante me separo de el propinandole una patada en su entrepierna dejandolo en el piso agarrando sus partes.

>> ¿Que mierda acaba de pasar? No me jodas, acaba de besarme <<

Salgo indignada de mi habitacion dando un portazo, tenia ganas de golpear algo y eso hice, me diriji al gimnasio de tio Jimmy a por lo menos romper uno de sus sacos de boxear para poder desestresarme pero al llegar me encuentro con un chico sin camisa verdaderamente apuesto quien se encontraba golpeando el saco de boxeo.

—Hola —saludo haciendo que notara mi presencia sonriendome de oreja a oreja mientras que yo observaba descaradamente el sudor como bajaba por su tabla de chocolate— Soy Alma —me presento provocando su risa ganandose mi confunsion.

—Lo se —replica con una hermosa sonrisa.

—¿Deberia asustarme o preocuparme? —interrogo provocando su maravillosa risa nuevamente.

—No, todos conocemos a la sobrina de la reina —menciona aclarando mi mente ocasionando que asintiera para luego acercarme al saco que el recientemente habia golpeado— ¿Sabes darle al saco sin romperlo? —interpela haciendome negar pero estaba bien porque volvio a reir.

—¿Tienes una razon para estar aca? —cuestiono sintiendo su tristeza apesar que sonriera podia sentir la pena que estrujaba su corazon seguro es de esos que en vez de llorar rien.

—La verdad ¿Puedo contarle un secreto princesa? —curiosea dejando el saco de boxeo para irse a sentar a uno de los bancos que tio Jimmy habia puesto aca mientras que yo me quedo en el mismo lugar asintiendo— Vi a mi primer amor besarse con otro y la descubri haciendolo con ese mismo —confiesa sorprendiendome sin lugar a dudas.

>> Debe doler mucho <<

—Lo siento, debe ser duro.

—Algo asi, nunca fuimos nada pero me enamore de ella cuando la vi por primera vez y se supone que cuando conoces a esa persona es para siempre pero al parecer no es mi caso —revela logrando que las lagrimas quisieran salir haciendo que simplemente me quedara ahi escuchando— Ella es una buena persona apesar de todo solo quiere la atencion que nunca a recibido y yo quiero darsela pero en su mundo yo ni siquiera existo ¿Sabe lo que duele que la persona que te guste ni siquiera tu nombre sepa? Tal vez no porque usted es fuerte y nunca se ha dejado de ningun hombre o a caido por algun hombre —comenta pero no pude mas a la vez sentia como las lagrimas resbalaban por mis mejillas.

—Eso es lo que doy a notar asi nadie entra aqui —señalo mi corazon logrando que me volteara a ver— Porque si lo hacen se que no lograre sacarmelo, si tuve mi primer amor pero fue un amor de la infacia que fuimos muy felices pero tuvimos que dejar de vernos porque sus padres pensaban que era peligra debido a que soy tri-hibrida y nunca lo volvi a ver —alego limpiando las lagrimas que salian sin ninguna intencion de detenerse.

—Tiene razon princesa solo en la parte de que si nadie entra es mejor pero no puedo hacer nada ella ya esta ahi y no la puedo sacar, intento distraerme con otras cosas pero siempre esta en mi mente ¿Que se supone que haga? —pregunta esperando una buena respuesta de mi.

—Come helado y ve peliculas pero no romanticas, no se si esto funciona con todos pero conmigo si, siempre que como para ponerme a ver peliculas se me pone la mente en blanco porque si haces dos cosas al mismo tiempo tu cerebro se concentrara en esas cosas, intentalo y yo aqui motivandote a ser gordo, no es que te veas mal no he dicho eso, estas fantastico mejor dicho estas mejor que yo —comento nerviosa debido a sus penetrantes ojos observandome.

—Eres muy graciosa princesa y gracias por el consejo tambien por los cumplidos, vamos le invitare un helado y tambien podemos ir al pueblo si lo desea —sugiere a lo que asiento repetidas veces.

—Suena genial pero primero deberia saber tu nombre a menos que quieras uno de mis absurdos apodos —replico. Me arrepiento de haber dicho lo que dije posteriormente rie pero esta vez es genuina a lo que solo sonrio nerviosa porque por lo menos lo hice reir de verdad.

—Me gustarian saber esos apodos pero por lo pronto mi nombre es Max Hamilton gusto en conocerla princesa —contesta con una sonrisa levantandose de el banco.

El avanza hasta estar frente a mi para luego extenderme la mano a lo que yo la tomo observando su maravillosa sonrisa que por primera vez de los minutos que los conozco es sincera.

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Max Hamilton