Alma

Capitulo 59

Debe ser pecado tenerte tantas ganas....

Despues de dormir algunas horas, me desperte ya lista para comenzar un nuevo dia, queria ir a ver a Ody pero seguro que estaba ocupado con la empresa o con las compras de Alma y Laura, tan bueno que es, nunca se le olvidan ellas.

 Me levanto de la cama dirigiendome a la salida, cruzo por el pequeño pasillo con direccion a la cocina y al llegar me encuentro a un hombre musculoso fundido en un traje negro, esos hombros tan anchos y ese culito, una maravilla, se encontraba cocinando algo.

No pude aguantarme y impacte mi mano en su trasero, ni siquiera se inmuto el muy puto, lo abrace por la espalda intentando ver que cocinaba pero como ya sabran yo soy un minion delante de mi esposo.

—¿No estabas en una reunion? —me alzo un poco para dejar un beso en su cuello pero no pude, les digo que soy un minion, una hormigita delante de este poste.

—Ya termino hace dos horas amor —responde tomando un plato de las gabetas delante de el, ni idea porque colocan los platos tan altos pero sera porque son locos, insensibles, yo bien minion que apenas los alcanzo.

—¿Y las compras? —por lo general sus reuniones tardan horas, la primera empresa que veo que tarda tanto para decidir algo y la minima opcion cuenta, realmente agotador pense que elegir la que es mejor es bueno y Ody lo hace mientras que sea razonable para todos, seguro que por eso tarda tanto. 

—Hechas hace media hora, queria llegar para cuando te despertaras y lo hice ¿Que prefieres? ¿Pizza? ¿Lasagna? o ¿Pollo frito con salsa jabanera y patatas al horno?—se voltea con cuidado mientras que yo no lo dejo de abrazar y me muestra el pollo frito con patatas al horno, si que se ve delicioso incluso mi estomago gruño por el y Ody sonrio—. Bueno sera este, toma —me extiende el plato y lo tomo con intenciones de devorarlo— ¿Jugo, agua o refresco?

—Pense que habia cervesa.

—¿Vas a beber mas? —pregunta sorprendido, yo llevo mi plato a el comedor y comienzo dandole un mordisco a una de las piezas de pollo.

—Creo que seria mejor vino, despues de todo es Paris, ven sientate conmigo y toma un trago de vino, no te hara daño —yo bien mala influencia aqui, les digo que si mi suegra me viera, no dijera nada porque ya el es adulto pero casi nunca Ody toma asi que tal vez alguien me llamaria mala influencia pero no hay nada mejor que un vino a cualquier hora—. Ademas es nuestro ultimo dia aqui.

Ya mañana nos volveriamos a el ajetreo de la manada, las empresas y Alma junto a Fabian peleando a cada ratito ¿Cuando dejaran de hacerlo? Espero que pronto considerando que no le queda mucho de vida al padre de Fabian, Ody asiente y con un chasquido un vino aparece en sus manos, toma un plato de lasagña y se sienta a mi lado dejando un beso en mis labios.

—Esta bien pero yo no tomare mucho —les digo que el nunca toma casi, no lo he visto tomar desde que regrese ni tampoco cuando estaba con CJ bueno solo la vez que el dijo que lo violaron o lo hechizaron, ya mas nunca lo he visto tomar.

—Claro amor no te preocupes ¿Y Camila?

—Pues no lo se amor, no la he visto desde ayer pero seguro que esta bien, disfrutando de las calles de Paris y de las compras, nunca se habia tomado un descanso, siempre estaba ahi sirviendonos y por eso la traje pero ya le dije que la queria aqui mañana antes de las 12, el vuelo es a las 2.

—Deberias dejarla aqui un poco mas, se ve que nunca ha tenido tiempo para un descanso, por lo menos una semana que disfrute, despues de todo te lleva sirviendo 15 años enteritos —le sugiero, pobre Camila paso de ser la hija de un brujo que uso la magia negra a una nana que casi nunca tiene descanso.

—Tienes razon amor, la llamare despues para decirle que se quede y le dare una de mis tarjetas para que compre lo que desee, se relaje cuanto quiera y haga lo que quiera —acepta gustoso mi recomendacion, por lo menos se divertira un poco mi amiga, lejos de todo por una semana o mas, el tiempo que ella quiera esta bien.

—Gracias mi vida, te amo mucho —dejo un sonoro beso en su mejilla generando que sonriera.

—Otro aqui —señala sus labios repetidas veces para que lo bese dejando una sonrisa en mi rostro, uno nuestros labios en un lento beso que poco a poco va subiendo de tono que si no fuera porque es la cocina ya me lo hubiera tirado, una tos falsa nos interrumpe, al separarnos me doy cuenta que es Camila.

—Volvi ¿Necesitan algo? —interroga gentilmente con una pequeña sonrisa sin mostrar sus dientes, Ody coloca una de sus manos en mi pierna y aprieta ligeramente observando a Camila.

—Si Camila, quisiera que te tomaras una semana de descanso o el tiempo que desees, mi esposa me hizo ver que llevas 15 años trabajando para mi y nunca haz descansado asi que quiero que te quedes en Paris por un buen tiempo hasta que te sientas relajada y descanses —habla mi delicioso esposo que esta como quiere, como se le marcan las venas en los brazos hasta escalosfrios me dan pero de una buena forma claro esta, de la forma que quiero que me de lento contra el pavimento.

—Ody, no es necesario en serio, a mi me gusta trabajar y no veo la hora de llegar a casa para ver a Laura y Alma.

—Vamos Cami, no te hagas de rogar, mira que mi esposo hermoso te dara una de sus tarjetas para que te des una buena relajada y lo disfrutes el tiempo que sea necesario ¿Esta bien? Puedes tomarlo y yo me encargare de Alma y Laura, necesito conocer esas muchachitas bien ¿Si?

—Si insistes lo hare pero solo me tomare unos dias no una semana.

—El tiempo que gustes.

—Bueno, los dejo.

Y luego se va sin mas, continuamos comiendo y yo no dejo de mirarlo asi como si fuera el postre y yo no hubiera comido nada en decadas, joder como esta de rico, jesucrito, quien fuera paloma para posar en esa rama.