Firemind || BNHA

XLVIII.

  "Cuando todos tus sueños fallan y los que aclaramos son los peores de todos y la sangre se ha secado".
— Imagine Dragons

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En cosa de 10 minutos dejó fuera de competencia a más de cuarenta participantes, sabía que solo necesitaba dos, pero lo demás solo lo hacía por diversión, aún así, ya había alguien más que logró algo similar y hasta fue mucho mejor que ella, le daba curiosidad saber qué clase de persona era capaz de acabar con 120 candidatos en cosa de segundos. Debía de tratarse del chico de Shiketsu, pero no lo aceptaría hasta verle.

– Los candidatos que hayan pasado la prueba deben ir a la sala de espera. — Escuchó la voz del orientador.

– Bien, tu fuiste el número 41. — Mencionó al marcar los objetivos del chico que atacó por andar distraído.

– Pero tú ya habías pasado, es injusto.

– Nada en esta vida es justo, debías de ir más concentrado. — Se encogió de hombros, ahora si iría al lugar dónde se suponía estaba la sala de espera.

El sector de la ciudad que había decidido ocupar para buscar más personas y pasar a la otra prueba estaba completamente destrozado, en parte por culpa de sus particularidades y otra por las de los demás que intentaron defenderse, aunque ni siquiera en intento quedó. La ojiceleste fue más rápida.

Entró encontrándose con el gran chico de Shiketsu conversando con otros aspirantes, aunque en realidad era como si solo se dedicara a gritar, miró a todas partes intentando encontrar a alguien de su clase pero al parecer aún no llegaba nadie y la sala estaba bastante llena. Buscó un asiento vacío y se sentó a esperar, confiaba en que su clase llegaría completa, quizás demorarían pero lo lograrían.

– Ao. — La voz del mitad albino la hizo elevar la mirada, se sentó a su lado aprovechando que nadie estaba en ese lugar. – ¿Somos los únicos aquí?

– Eso creo, eres el segundo de U.A en llegar a la sala de espera, me pregunto como le estará yendo al resto. — Miró la mesa en la que habían distintos tipos de comida. – Recuerdo haber sentido un terremoto venir desde el lado dónde ellos se quedaron, en serio espero que estén bien.

Ao volteó la mirada al darse cuenta que el de dos particularidades había empezado a mirar en esa dirección, se topó con la mirada amenazadora que le estaba dedicando a Todoroki el mismo chico extraño que vieron al momento de llegar al examen, Inasa.

No parecía agradarle, podía suponerlo porque cuando la mirada de Inasa fue a dar con la suya se suavizó al instante, ¿que había hecho Shoto para ganarse ese desprecio?

– Han aprobado 56 personas, no se asusten pero dense prisa. — Se escuchó decir por los parlantes.

Ao se acomodó entre las piernas del muchacho, quién no se quejó al verla tan cómoda ahí, su mano fue a dar con el cabello de la ojiceleste para acariciarlo y tal como se lo imaginaba, era demasiado suave.

Vio como cerró sus ojos, provocando las ansias de querer besarla, pero en un lugar como éste no podían. Además, ni siquiera sabía si Ao querría algo así.

– Los demás no vienen. — Comentó la chica. – Puede que se les haya hecho difícil el que conocieran sus particularidades.