El Príncipe recibe visitas
El hermano del Príncipe, llamado Izuku, ha vuelto de la Academia tras graduarse de ésta. Es a él a quien el Príncipe ha pedido ayuda y aunque su decisión de confiar en un completo desconocido pueda parecer precipitada, tras meditarlo con calma he llegado a la conclusión de que el Príncipe ha tenido razón al involucrarlo en esta situación. Como acaba de volver tras una ausencia larga, el riesgo de que él sea el traidor es nulo; y no está atado a los juramentos de lealtad que nos une a mi maestro y a mí.
Que haya sospechado de mí en un principio –no ha tenido reparos en sugerirlo frente al Príncipe, aunque él ha desechado la idea de inmediato–, no me enfurece porque es claro que entiende la gravedad de la situación; además, eso demuestra que ejercerá un juicio neutral sobre los posibles implicados porque me temo que mi opinión sobre los sirvientes se ha visto afectada por el tiempo que hemos convivido en esta casa.
Así que, bajo la excusa de visitar al Príncipe, Izuku ha empezado a pasar incontables horas aquí, familiarizándose con los sirvientes y las rutinas de cada uno. Lo he visto llegar por el patio trasero, donde puede detenerse a charlar con ellos, y en una ocasión memorable se ha llevado a Mizushima a beber en la tarde de su día libre.
El Príncipe está encantado con tenerlo aquí, se pasa horas enteras interrogándolo sobre su vida en la Academia, y charlando sobre las maravillas que existen afuera; nunca hablan del envenenamiento, lo que evita que alguno de los sirvientes escuche por error, solo tocamos el tema cuando lo despido en la puerta, estando solos intercambiamos noticias en susurros rápidos para no atraer la atención del resto.
Hoy, Izuku me ha sorprendido al decir.
"¿Te diste cuenta de que hoy no comió?"
Me había dado cuenta y así se lo dije. Entonces le conté que había épocas en las que el Príncipe perdía el apetito, casi siempre sucedía antes de tener una recaída.
"Como no come", le dije "no tiene energía, y eventualmente termina en la cama"
Así había sido el ciclo de toda la vida. Lo había visto incontables veces a lo largo de todos esos años. Izuku me pregunto entonces si eso era un síntoma de su enfermedad, y yo le dije que era una señal de que se aproximaba otra reincidencia por lo que había que llamar al médico.
"No lo llames todavía", me dijo con expresión pensativa, "antes quiero confirmar una cosa". Ante mi insistencia me dijo algo muy curioso: "¿Cómo distingues los efectos del veneno de su enfermedad?"
Izuku no esperó respuesta y se marchó, pero la pregunta no deja de dar vueltas en mi cabeza. Y la única respuesta que tengo es que no lo sé.
[...]
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Hanami: El Diario De Un Guardia
FanfictionLas reflexiones de Hitoshi Shinsou cuando a su monotona vida llega alguien inesperado. Historia Simultanea a Hanami