A falta de amor: La última llave.

C-49 La verdad.

Alejandro manejaba como un loco al penal donde se encontraba Román, necesitaba hablar con él. Llegó y estuvo esperando un raro hasta que los metieron en una sala a hablar.

Román: Que milagro el verte por aquí.

Alejandro: Necesito hablar contigo de muchas cosas.

Román: ¿Qué quieres?

Alejandro: Silvana escapó, justo cuando iba a delatarla.

Román: ¿Cómo que escapó? Maldita sea, realmente la odio.

Alejandro: Ya somos dos.

Román: ¿Qué harás?

Alejandro: Delatarla, aún así y huir.

Román: Escribe una carta, déjasela a Amelia.

Alejandro: Bien, me ayudas a escribirla.

Román: Bien.

Alejandro: Traje un cuaderno y un bolígrafo aquí en mi mochila.

Empezaron a escribir la carta que Alejandro dejaría en la puerta de casa de Amelia. Alejandro tenía muchísimo dinero para sobrevivir, Silvana no se había llevado nada y el tenía todo, después de dejar la carta, sacaría todo el dinero de las tarjetas para que ella no pudiera congelar las cuentas. Alejandro terminó de escribir la carta y la dejó en la puerta de casa de Amelia, como planeó, después huyó. Joel encontró la carta en el piso cuando iba a sacar a Laika a correr y se la llevó a su hermana.

Joel: Amelia, creo que querrás leer esto.

Amelia: Dice que es de... ¿Alejandro?

Nancy: Ábrela, ¡léela!

Amelia: Está bien, dice...

Amelia, necesito que sepas toda la verdad acerca de Silvana. Ella te odiaba desde lo que pasó en el restaurante, después se enteró de que eras mi ex novia y enloqueció. Realmente ella tuvo la culpa del accidente de tu hermano, ella hizo que lo provocarán, mandó a Román a cortar los frenos del auto. Ella fue quien te tomó las fotos, ella le bajó el autoestima a Esthela hasta el suelo, ella envío a Román a la cárcel. Ella es la máxima culpable de todo, Amelia. Tengo las pruebas, pero no puedo dejartelas, estoy huyendo de aquí, quería que lo supieras todo. Ella se fue y no sé dónde pueda estar, pero está loca, así que cuídate.

Amelia se desmayó. No podía creer todo, el rompecabezas se armó completamente, todo lo que había pasado era por Silvana... Para ella fue impresionante. Despertó y estaba en su habitación rodeada de todos, estaban igual de sorprendidos que ella, le demostraron su apoyo a los Pirse. Joel se quedó completamente intranquilo, estaba enojado, quería buscar a Silvana y matarla con sus propias manos. Amelia estaba muy asustada y Nancy la hacía sentir segura, al igual que Daniel. Las vacaciones habían finalizado por completo y todo había pasado, lo habían dejado atrás pero, el sentimiento ahí seguía, no tenían pruebas para decirle a la policía sobre los crímenes de Silvana, así que lo dejaron por la paz, era un nuevo comienzo para todos y sobre todo, una nueva vida, empezarían la universidad y no querían que nada ni nadie los distrajera. Los primeros días comenzaron bien y todos se fueron acomplando al nuevo curso escolar.

Había pasado un semestre y no había rastros de Silvana, ni de Alejandro...

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Continuará...