Cristina. {Sebastini}

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Dos años antes.

Reniego un poco con el vestido de gala y me pongo mis zapatos. Cuando ya estoy lista, me doy la vuelta para ver a mi asistente de vestuario. 

-Estás hermosa, Cristina, pero, ¿podés sonreír un poco? No vas a aparecer seria en la premiación -dijo quejándose. 
-No voy a estar siempre sonriente -dije. 
-Okey, okey, ¿qué paso? -preguntó, ésta vez, un tanto preocupada.
-Nada importante, sólo que tuvimos una mini discusión con Pepe hace un rato.
-Uy, ¿y eso por qué? 
-La verdad, no sé si fue una discusión, lo arreglamos, pero sigo mal -contesté.
-Pero, ¿por qué? -preguntó nuevamente.
-Salió el rumor de que Pepe estuvo con una modelo en su viaje a España, por unos asuntos que hubo en la empresa de su familia y también le surgió algo laboral. Según él, son sólo amigos, pero no sé que confiar -respondí. 
-Mhm, no soy quién para opinar, pero recordá que la presa siempre inventa cosas para llamar la atención -dijo-. Pero, queda en vos creer en él o no. 
-Tenés razón -dije-. Pero, bueno, ya no quiero pensar en eso. Tenemos una premiación ahora y quiero hacer foco a eso. 

Mi asistente sonrió y agarró un par de cosas para llevar a los premios, en caso de emergencia. Salimos del hotel y partimos directo al Arena donde se harían los premios. 
Llegamos y, lugar, estaba lleno de famosos de todas partes del mundo y fans. Sonreí cuando vi que empezaron a gritar mi nombre. Me acerqué a los fans y periodistas para firmar algunos autógrafos, sacarme fotos y dar algunas notas. 

-Hola, Cristina, ¿cómo estás? -pregunto uno de los periodistas presentes.
-Hola, bien, ¿vos? -respondí.
-Bien, gracias, ¿estás emocionada por ésta noche tan especial? 
-Sí, más allá de las nominaciones en las que estoy, me emociona demasiado estar en el mismo lugar con artistas que admiro desde chiquita y también compartir escenario con varios de ellos -respondí sonriente.
-Me alegra escuchar eso -dijo-. Espero que ésta pregunta no te moleste, pero, ¿sabes algo de Sebastián Yatra? Según sabemos, él va a estar presente ésta noche -preguntó. Al escuchar su nombre, me puse tensa y un poco incómoda.
-La verdad, no tengo la menor idea. No hablamos hace mucho tiempo -respondí con una media sonrisa en el rostro.
-Bueno, me alegra muchísimo verte aquí. Te deseo muchos éxitos para ésta noche y gracias por responder siempre con la mejor onda -dijo sonriéndome el periodista.
-Gracias a vos -dije devolviéndole la sonrisa.  

Me aleje de ese lado y fui directo para la alfombra roja. Sacamos un par de fotos y, luego, fui directo al Arena, junto con mi invitada quien era mi manáger. 
Cuando entré al Arena, quedé sorprendida con lo inmenso que era el evento y el gran nivel que tenía. Grité un poco emocionada y jalé un poco del brazo de Rebecca. 

-Ay, boluda, me vas a lastimar -dijo riendo.
-Perdón, es que estoy emocionada -dije-. Es la primera vez que vengo a un evento de éste nivel, es enorme -dije mirando todo el lugar, nuevamente. 

Nos acomodaron en nuestros lugares, estábamos en primera fila así que podíamos ver bien todo. A los treinta minutos, el show empezó y, los que abrieron el show, fue Reik. Estaba que me moría de la alegría.
Los premios continuaron y llegó mi turno de salir al escenario. Habíamos preparado tres canciones: Fresa, Si tú te vas y Oye. Las dos primeras, las cantaba junto a Lalo y, mi gran amiga, Cami, y, la última, sola.
La presentadora dijo algunas palabras antes de que salga y, cuando termino de hablar, la gente gritó. Los visuals ya estaban presentes en la gran pantalla y, cuando termino la intro de la canción, salí al escenario, donde el gran reflector impacto sobre mis ojos. Termino la presentación, y fui tras bastidores, donde me esperaba mi equipo para festejar unos minutos por la presentación.

Terminaron los premios y fui al After de los premios con Cami. En el evento, hablamos y bailamos un poco. Estábamos demasiado felices. 

-Amiga, ¿me acompañas al baño? -preguntó Cami en mi oreja. La miré y afirmé con la cabeza. 

Fuimos al primer piso de boliche y entró Cami primero al baño. Había mucha gente adentro así que decidí esperar afuera hasta que salga. Saqué mi celular de la cartera para revisar si tenía algún mensaje de mi familia o de Pepe. 

-Hola -sentí como hablaron cerca de mi oreja y me asusté un poco. Me di la vuelta y quedé pálida. 
-Sebastián -dije después de unos largos segundos.
-¿Cómo estás? -preguntó mientras bebía de su vaso. 
-¿Qué haces acá? Digo... Que sorpresa verte acá, hablándome -dije cruzándome de brazos. 
-La verdad, dude mucho en sí venir o no a saludarte, estabas con Cami así que me dio un poco de miedo por lo que podía llegar a hacerme si me veía con vos -respondió. Rodé los ojos y él río un poco ante mi gesto.
-¿Y tu esposa? Si te ve acá conmigo, te mata -dije.
-No vino, se quedo en Miami con mis papás -respondió-. ¿Y tu novio? 
-Se quedó en Buenos Aires con Francisco y mis papás -respondí.
-Ah -dijo un poco seco. El ambiente se volvió silencioso, pero era un silencio demasiado incómodo-. Te extrañé -dijo de repente. Quedé helada ante su inesperada confesión.
-Yo también te extrañé -respondí-. Pero ya es pasado, ambos crecimos y maduramos, ambos cometimos muchos errores y es entendible, éramos demasiado chicos como para tener una relación seria -dije-. Ahora estamos con personas que nos hacen bien y felices, y... -intentó darme un beso, pero lo paré a tiempo-. No -dije.
-Te necesito muchísimo, te sigo amando, Cristina -dijo. Suspiré y lo miré directo a los ojos.
-No, Sebastián. Estás casado y yo tengo novio, tu esposa sí te ama y no podes hacerle esto, la vas a lastimar demasiado y no se merece que le hagas esto. No voy a dejar que le hagas lo mismo que me hiciste a mí -dije y entré al baño para buscar a Cami e irnos del lugar.