Y aunque yo esté en otra parte, soy más feliz porque yo pude encontrarte. Y aunque no tenga la certeza de volverte a ver, es tuya esta canción.
Recuérdame...
Estamos llegando a Chile, uno de mis países favoritos para ir de gira. Amo el público de ahí, amo toda la energía y pasión que le ponen a cada momento de mi show, me da muchísimas vibras positivas. Sin dudas, mis fans chilenos son increíbles. Mientras la azafata me avisa que falta poco para aterrizar a tierras chilenas, saque mi celular para sacarme una selfie y publicarla en Instagram. Mis fans chilenos se van a volver locos.
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@cristinavaldez: Chile!!!!!! Ya estoy llegando😍😍 nos vemos este viernes 7 de septiembre en el Movistar Arena, del cual estoy feliz de decir que lo AGOTARON, son increíbles!!! Los amo con todo mi corazón y ya falta poquito para vernos, me hacen extremadamente feliz💗💗💗💗🇨🇱🇨🇱🇨🇱🇨🇱 #StillStandingTour
A los segundos, ya tenía más de 100 mil likes y 10 mil comentarios. La gran mayoría de mis fans chilenos. Cuando llegue al hotel, voy a tomarme el tiempo de darles like y responder sus comentarios, es lo mínimo que puedo hacer por todo lo que hacen por mí. Sin ellos, no sé dónde estaría en estos momentos. Apague mi celular y lo guarde en mi cartera. Subí la cortina de mi ventana para poder apreciar la hermosa vista. Chile, además de tener gente hermosa, tiene paisajes bellísimo y, obviamente, su comida tradicional es riquísima. Aterrizamos y agarre mi cartera. Me dirigí hacía la salida del avión y baje por unas escaleras que tenía este. Afuera, nos esperaba una camioneta y dos o tres periodistas. En este tiempo, estaba muy cansada de ellos, y más ahora que acabo de terminar una relación de más de tres años con un hijo de un empresario demasiado importante en el mundo de la moda. Camine rápido hacia la camioneta para poder evitar a la prensa y dirigirme rápidamente al hotel para tomarme una buena ducha y descansar un poco ya que era una semana bastante pesada. A medida que nos vamos acercando al hotel, escucho gritos y cantos de mis fans. Sonrió sin pensarlo y grabo una instastory del trayecto al hotel mientras se escuchan sus gritos. Al llegar, todos se acercan al auto y empiezan a golpear las ventanas mientras gritan y dicen que me aman. Me muerdo el labio de la ternura y decido salir del auto, mientras que ellos hacen un espacio para que yo pueda salir y sacarme fotos con ellos.
-¡Hola! ¿Cómo están? Los extrañe demasiado. -los empecé a abrazar de a uno. -¡Bien! Estamos muy felices de volver a tenerte en nuestro país, te extrañamos demasiado. -contesta una que puedo reconocerla. -¿Vos sos shinevaldez? -la señalo y ella parece estar por llorar de la emoción. -¡Sí! Dios, pensé que nunca me ibas a reconocer. -Ay, no, mi amor, a algunos los reconozco, solo que no suelo entrar mucho a las redes por todo el hate que me tiran. Igualmente, los leo y veo todo lo que me hacen, vídeos, fotos, cartas y, en serio, valoro todo el esfuerzo que hacen y espero algún día recompensarselos. -digo un poco apenada, es que me cuesta demasiado llegar a entender como es que recibo tanto amor, siento que no lo merezco y más viniendo de unas personas tan maravillosas como lo son mis fans. -Ya, Cristina, te mereces esto y muchísimo más por todo el esfuerzo que haces planeando tu gira, escribiendo y grabando canciones, trabajas al cien por todo esto. -respondió un chico. -Aw, en serio, muchas gracias, los amo demasiado. -los abrazo nuevamente.- Bueno, ahora tengo que entrar al hotel para poder descansar, tengo una semana demasiado larga, pero, nos volvemos a ver este viernes en mi show, ¿van a ir? -pregunto emocionada. -¡Sí! Obvio que vamos a ir, no nos vamos a perder el show de nuestra princesa. -respondieron todos. -Me alegra demasiado escuchar eso, los amo mucho y nos vemos. -abrazo a algunos, otra vez, y entro al hotel.
Saludo a algunos que trabajan en el hotel y voy a recepción para preguntar por mi habitación. Me dan las llaves y me dirijo hacia ella. Tomo el ascensor y recordé que tenía que llamar a mis amigas que llegué a Chile. Saque mi celular y lo prendí, empezaron a llegar los mensajes de mis amigas preguntando si llegué al país.
CRISTINA:Holaaaaaaa CRISTINA:Llegué hace un ratito CAMI: Genial bebé CAMI:Salimos de rumba hoy??? SOL: Síiii, yo me prendo CRISTINA:Bueno, pero solo un rato, tengo que descansar CAMI: No te preocupes amiga, será solo un ratito CAMI:Ahora les mando la dirección del lugar CRISTINA: Dale, nos vemos corazones
Bloquee el celular y saque ropa de mi valija, para luego, meterme a la ducha y tomarme una relajante ducha. Terminé e hice todo lo que tenía que hacer, y me dirigí al estacionamiento. Llevaba una gorra puesta para que mi seguridad y papá no me puedan reconocer, no les gustaba que saliera de fiesta ya que me exponía a algunos peligros según ellos. Acá no tenía mi auto, así que tuve que elegir al azar una de las llaves que se encontraban colgadas en la pared. Apreté el botón reiteradas veces hasta ver el auto. Corrí hacia este y me subí para luego dirigirme al bar del que nos hablo Cami. El trayecto iba bien hasta que el auto empezó a andar lento y, de golpe, paro y comenzó a salir humo de la parte de adelante. Golpee el volante enojada y salí de este. Me voy a meter en serios problemas, pensé. Vi gente pasar a una puerta secreta y decidí perseguirlos. Aunque por fuera parezca tranquila, por dentro estoy rezando porque no sea algo peligroso. Abrí la puerta y me encontré con unas escaleras, decidí bajarlas (y seguía rezando, obviamente), al llegar, vi que era una especie de karaoke-bar. Bueno, me voy a quedar acá hasta que alguien venga a buscarme o sepa como llegar al hotel. Vi que había una mesa vacía y fui hasta esta. Saque mi celular y mande un mensaje a mis amigas.
CRISTINA: Creo que no voy a poder ir jajajaja CAMI: Oh no, qué paso?? CRISTINA:Me baré SOL: DIOS CRISTINA, estas bien? CRISTINA:Sí, no se preocupen
En ese momento, escuché una dulce voz, era de un hombre. Bloquee el celular y mire hacia adelante, y me tope con la mirada de un chico. Este, me estaba mirando y no pude evitar sonrojarme. Es demasiado hermoso. Estaba tocando una de mis canciones favoritas de mi banda favorita; Acuérdate de mí de Morat. Al finalizar esta, dice su nombre y el público lo aplaude: se llama Sebastian y, por su acento, pude notar que es colombiano.
