Amanda y yo nos dirigimos hacia el lugar en el que según ella se encontraba Liam.
Conduje aproximadamente 3 km. Y ya casi llegando a un entronque me dijo Amanda que me metiera al estacionamiento que estaba a mi izquierda....
Después Amanda y yo caminamos hasta introducirnos en un fraccionamiento que parecía de hecho nuevo.
-¿Por aquí vive?- pregunté.
-Algo así- contestó ella.
Amanda y yo llegamos a una casa no muy grande y tocó la puerta. Quizá aquí vive Liam ahora. Realmente nunca he sabido casi nada de su vida, nunca me interesó y además el no tendía a platicarme cosas. Siempre que hablaba sobre lo exitosa y maravillosa que era su vida yo me ponía mis audífonos o simplemente hacía un viaje exprés mental a la luna y ya no escuchaba sus halagos a sí mismo y los de mamá.
La puerta se abrió y apareció un señor alto de cabello negro y unas cuantas canas .
-¿En que les puedo ayudar?
-Venimos a buscar a Liam Bieber. Queremos hablar con él… es amigo nuestro.
Iba decir que era mi hermano pero supuse que si eso decía no me querría ni venir a ver.
-Esperen un momento.
Y se retiró el señor.
-Bien Justin, lo demás todo tuyo. Me tengo que ir.
-¿Por qué?- pregunté. Y no es que deseara que se quedara pero supuse que lo haría.
-Es tu problema, no el mío. Ya cumplí con lo que me tocaba- suspiró –Bueno, hasta luego Justin. Y ojalá ya no estemos molestos y que tu y tu hermano se arreglen- vaciló pero después se acercó y me dio un pequeño y corto beso en la mejilla, sonrió a medias y luego se fue caminando.
-Pero ¿y tu auto? – hice una pausa –Espera tantito. Yo te llevo.
Ella negó con una sonrisa.
-Puedo tomar un taxi. Pero gracias. ¡Bye!
Me crucé de brazos y dos minutos después regresó el señor.
-Pase por favor.
Asentí. Era una casa espaciosa, en realidad ni siquiera era una casa, era una oficina. “Así que aquí trabajas Liam…” pensé.
El señor este abrió una puerta y me dejó pasar. Ahí estaba Liam frente a un escritorio con varios papeles y una laptop.
Me miró. Sentí su mirada fría y molesta, llena de rencor.
-Justin… que sorpresa.
No dije nada. No sabía ni que.
-¿Qué quieres?- suspiró –Rápido que tengo cosas que hacer.
-¿Aquí trabajas?- pregunté.
Liam asintió.
-Liam… no quiero que sigamos peleados. ¿Podemos volver a ser la familia que éramos?
Liam soltó una carcajada.
-¿Familia? Justin, no estabas tu incluído en la idea- sonrió –Pero buscaré a mamá, ella no tiene que pagar por los platos rotos.
-Liam… Por favor, se que… las cosas estaban mal… pero ya déjalo atrás- le pedí.
-Es tan fácil decirlo para quien no le paso –hizo una pausa –Dime Justin, si esto te lo hubiese hecho a ti… ¿Si quiera reaccionarías como yo? Te conozco y se que puedes ser peor. – sonrió de nuevo incrédulo –No me subestimes pero, deberías agradecer que simplemente estoy molesto, más no pido venganza.
Vacilé. Al había dicho que se vengaría ¿no? O al menos que las cosas no se quedaban así.
-Escucha, prometo buscar a mamá y verla. Pero sobre tu y yo… evítame la pena de verte e ignorarte Justin. – se re acomodo en su silla –Ahora… te puedes retirar.
Tragué saliva molesto. Con coraje, y sí, también con decepción. Me encogí de hombros y caminé hacia la salida.
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The Big Bang
Teen Fictionsolo me burlé de ella y la usé para pasar el año. Pero ahora, dos años después el destino nos unió, y ella cambió sin duda, es sexy e irresistiblemente hermosa, me encanta. Ah claro, y es actualmente la novia de mi hermano.