¿Quién lo Hubiera Creído? ||Sabaku no Gaara||

Capítulo Final.

Capítulo final: La despedida.

Narradora.
Meses después.

El olor a metal, el sonido chirriante que se hacía al chocar las armas, la electricidad que se hacía en cada choque era lo que se presenciaba en aquella pelea del bosque.

Tres hombres uniformados de ANBU peleaban con ferocidad, pero lo que los hacía distinto de otros ANBUS era que pertenecían a la organización inhumana de unos de los concejales de Konoha, más conocida como ANBU Raíz.

Peleaban contra la pelirroja de poderes de hielo, esta se encontraba exhaustiva porque la habían atacado cuando estaba en medio entrenamiento, estaba sucia y el sudor escurria por todo su cuerpo, tenía alguno que otro rasguño, no era nada comparado con lo que le había hecho a los ANBUS.

Su desaliñado cabello estaba horrible, aquel largo cabello como el fuego, que brillaba con la luz del sol estaba más que opaco, tenía rastros de sangre, pero lo que lo hacía lucir diferente era verlo corto con cortes mal hecho, algunas de sus hebras estaban más largos que otras, otras partes de su cabello estaba esparcido por el suelo que los hacía parecer como un charco de sangre, más no lo era.

En un descuidó uno de los ANBUS le había lanzado una fūma shuriken que pudo esquivar a duras penas lanzándose al piso, pero el en trascurso su cabello fue cortado por dicha shuriken.

Uno de los ANBUS se encontraba sangrando medio muerto en el suelo, era el cuarto, los otros estaban igual de cansados como ella, pero con heridas más profundas. Ellos jamás se imaginaron que el tesoro que tanto quería su amo Danzo fuera tan fuerte.

La habían subestimado, eso les fue muy caro con un compañero medio muerto.

— ¡Ustedes son unos malditos desgraciados! — gruño con furia la pelirroja.

Los ANBUS no dijeron nada, solo se prepararon para volver atacar, tenían que cumplir sea como sea el objetivo de secuestrar a dicha pelirroja, esta al notar sus posiciones hizo un selló mientras concentraba chakra.

— Jutsu: clones de sombra. — susurró agotada.

10 clones se posaron al lado de ella, listas para atacar y defender a su creadora. La pelirroja tenía un plan en mente, para eso debía distraer a dichos ANBUS, necesitaba llegar al río que había cerca del campo de entrenamiento.

«Solo hay una oportunidad, no la debo desperdiciar» pensó mientras se preparaba para correr.

Los 10 clones de _________ corrieron a pelear con los tres ANBUS restantes mientras que la original corría hacía el río, camino sobre el agua y al llegar se posicionó en el centro.

Empezó hacer una frecuencia de sellos velozmente, el agua a su alrededor empezó a moverse con violencia mientras exclamaba las siguientes palabras.

— ¡Suitōn: dragón de agua! — al instante un enorme dragón de agua se formó detrás de ella.

Los clones de _________ impidieron que los ANBUS hicieran frecuencia de sellos para defenderse ante el gigantesco dragón, aunque eran pocos los clones que quedaban por la fuerte pelean que tenían con ellos a pesar de que el tiempo de pelea había sido corto.

El dragón se dirigió hacía ellos con frenesí y dándoles de lleno, al instante los clones se disiparon y los ANBUS fueron azotados por el jutsu, la pelirroja se posicionó en el suelo lejos del agua para seguir haciendo sellos.

— ¡Raitōn: asesinó eléctrico! — gritó con fuerza.

El chakra se hizo visible en las manos de _________ formando varios rayos que lanzó hacía el agua que yacía debajo de los ANBUS que intentaba recuperarse.