Entre Dinastías

CAPÍTULO 43

Estaba sentada comiendo, con Aswad a mi lado y Fiorella enfrente de mi.

-Y bien príncipe Aswad, ¿te ejercitas? -le pregunta Fiorella

-Si

-Eres el príncipe más guapo que he visto en mi vida

Aswad sonríe incómodo.

-¿Qué dices si me invitas a tu reino?

-Me temo que regresando tendré muchos pendientes por resolver

-No importa, sé esperar

-Deja de estar de arrastrada -le digo -¿De verdad crees que alguien como Aswad, con su cargo, siendo futuro rey de Egipto se va a fijar en alguien tan insignificante y poco interesante como tú?

Fiorella se levanta furiosa de la mesa y se va.

-Gracias -dice apenado

-No la soporto

-No te envidio para nada

-¿Cómo te fue con Alizee?

-De maravilla, es tan perfecta

-Son el uno para el otro

-Vaya que lo pensé muchas veces

-¿Y?

-Nada, no creo que pase

-¿Por?

-Bueno sus padres son los que están buscando alguna alianza, no ella

-Pero ella podría hablarles de ti

-¿Por qué haría eso?

-Ay por favor, Alba no mentía cuando les dijo que hasta un ciego vería la atracción entre ustedes

Aswad sonríe abiertamente.

-Tengo que confesarte que mi boda iba a ser el lugar perfecto para que su historia de romance comenzara

-Ahora me arrepiento de que no te cases

Y ambos soltamos una risa.

-Deberías escribirle... Hasta podrías invitarla a visitar Egipto, poner algún pretexto

-No se me ocurre nada

-Ya se te ocurrirá

Después de comer regresamos al estudio para poder revisar la correspondencia y los registros de importación y exportación del reino, por suerte todo se mantuvo y no se presentaron perdidas o disminuciones de productos.

Las cartas que recibí eran del embajador de Italia ofreciendo su ayuda para lo que necesitara, la otra era una invitación para una ceremonia por la coronación del príncipe Juan Carlos ahora futuro Rey de Ecuador.

Sentía mucha tristeza por él, ya que tenía tantas iluciones de formar un gran linaje de susesores al lado de la princesa Zeynep, futura reina de Turquía, que lo engañó con el príncipe Alejandro futuro rey de Perú. Un verdadero drama.

Otra carta era de los Reyes de España, dirigiendose directamente a mi para recordar que la princesa Alba no podía permanecer por mucho en el reino de Italia.

La siguiente carta era de Melissa, la hermana de Mikhail, disculpándose por el comportamiento de su hermano. Y para hacerme saber lo feliz que estaba de que pudiera escapar de las garras sedientas de poder de Mikhail.

-Voy a dormirme Chiara, pasa linda noche -me dice Aswad mientras me da un beso en la cabeza

-Que descanses