Capítulo 28

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Xiao Xing Cheng tocó a Lan Zhan una vez mientras cerraba los ojos. Aproveché para poder acercarme un poco más, pero antes de hacerlo, sus ojos volvieron a abrirse.

-Per... ¡Percibo energia resentida en él!

Su mano dejó de tocarlo, y su mirada dura volvió a concentrarse en mí.

-Fue usted el responsable de esto.

Esa no fue una pregunta...

No sabiendo que responder, solo pude agachar la mirada.

-En verdad ha cruzado todos los límites, ¡Es una vergüenza para el mundo de la cultivación espiritual!

-...

-Es una perdida muy grande.

Levanté inmediatamente la mirada al escuchar esas palabras. Al levantarse, su mano fue directamente hacia Lan Zhan, y de ésta, una energía desconocida surgió.

Vi a Lan Zhan mover sus manos poco a poco, pero algo iba mal. Su rostro me decía que estaba sufriendo, asimile que sería así al ser liberado de la ilusión, tenía que ser así.

-¿Está resistiendose?

-Estoy arrebátandole lo que le impide liberarse, energía resentida.

-¡¿Qué?!, ¡No puede hacerlo!

-No está a discusión.

-¡Él morirá si lo hace!

-... Por eso dije que sería una perdida muy grande para este mundo.

-... ¡Aléjese de él!

Reuniendo todas mis fuerzas, fui y le desenfunde su espada, haciendo un espacio entre él y Lan Zhan.

Agitado por lo inesperado de mis acciones, Xing Cheng, haciendo uso de su nucleo de energía, intentó volver a poseer su espada.

Luché contra ese poder, uno bastante impresionante y, aunque logró quitarmela, no me hice a un lado, ni por nada del mundo dejaría que Lan Zhan muriera, no es de esta forma.

-Busca que el maestro Lan sea como usted, es el sentimiento más egoista que una persona pueda tener por otra.

-Éste... éste fue el camino de Han Guang Jun, y no espera que alguien como usted o como yo, lo entienda.

-Se ha equivocado enormemente.

-Usted no lo conoce.

-...

Dolía admitirlo, de verdad, pero bien sabía que yo no lo conocía mejor que él. Todavía hay mucho que no sé de Lan Zhan, y me siento como un estupido al no intentar siquiera querer conocerlo todavia más.

¿A dónde fue mi curiosidad?, ¿Siquiera eso importa ahora?

-Su brazo.

Desperté de mis pensamientos negativos para hacerle frente otra vez. Debo estar alerta con esta persona, si me descuido una vez más...

-No le importa.

Y tampoco a mí, ¿Qué era un hombro dislocado en comparación con mi muerte?

-Escuche, no deseo que Han Guang Jun pasé por lo mismo que yo, en lo absoluto. Solo... quiero dejarlo decidir su propio camino.

-No puedo permitirlo, la energia resentida es peligrosa, como usted bien ya sabe.

-...

-Lo único que podría salvarlo sería regresarlo a Gusu y esperar que sus maestros lo confisquen.

No hay un finalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora