No hay un final

Capítulo 31

No hay tiempo para jugueteos, quizás no es lo que tú deseas tampoco, Lan Zhan, pero aquí poco importa lo que yo quiera, sino lo qué tú necesites de mí.

Lo tomé todo, desde la punta hasta donde entrase. Cuando sentí el final, una mano se apoyó en mi cabeza. Complacido con los resultados, mire hacia arriba y vi a Lan Zhan con los ojos cerrados y la boca entreabierta.

No me detuve a pensar más, y fui chupando todo lo que podía. Con unas pasadas más, saliendo a veces y volviendo a donde lo tenía dentro de mi garganta, me detuve cuando sentí ciertos cambios en el tamaño.

Deje de chuparlo en ese momento. Debe estar a punto de llegar.

Ansioso por ver que podía dar más, le urgí con las manos a que se acostase boca arriba. Cuando lo tuve donde quería, me subi encima.

-Wei Ying...

-Sí, sí, no creas que me detendré aquí, no ésta noche...

Ya todo sería más fácil, y Lan Zhan no se sentiría demasiado atrapado cuando pueda entrar en mi interior.

Mirándolo a los ojos, viendo sus ansias junto con su desesperación, me levanté un poco. Puse mis manos sobre su pecho para apoyarme y, cuando sentí la punta en mi trasero, deje ir una mano para guiar su miembro mejor. Confiado, logré meterlo de a poco, aunque, de la nada, las manos de Lan Zhan se movieron hacía mi cintura.

-...

-Trato de no hacerte daño...

Sin embargo, eso a Lan Zhan parecía no importarle así que, dejando ir mis manos, él me bajó hasta que todo él estuvo en mi interior.

Un poco incomodo, me recosté sobre su pecho, el cual solo subía y bajaba con rapidez. Nos quedamos así unos segundos hasta que me decidí a hacer esto de una vez.

Apoyando mis pies firmes en la cama, mis manos sobre su pecho, comencé a moverme sobre él.

-¡...!

Me sorprendió ver como su expresión cambiaba de pacífica a excitada en unos segundos. Me sentí satisfecho porque ese era el motivo principal al escoger esta posición, ver ese rostro cambiar tanto.

Eso era lo único de lo que podía gozar si era honesto, de ver transformada no solo su vida, sino esos sentimientos que siempre ha ocultado de todos.

Lo veo morder su labio inferior, eso es bueno...

Suelta algunos gemidos, pero de vez en cuando, y éstos son muy reprimidos.

Vamos, Lan Zhan...

Aventurándome más, empecé a subir y a bajar cada vez más rápido, sin querer darle tiempo para intentar ocultarme nada.

Sé que dije que teniamos que resistir, pero...

Me acerqué a su oido nuevamente, sin detener mis movimientos.

-Quiero que me muestres todo, yo aguantaré eso y más.

Tal vez era la posición la que dificultaba el proceso, pero al intentar siquiera pensar en cambiarla, Lan Zhan se movió primero.

Sus manos me tomaron de la cintura y me levantó con él hasta que mi espalda quedo recostada en él colchón de la cama.

Ahí, y de esa manera, él logró entrar de golpe en mí, incluso lo sentía más adentro.

-... Haha, sí...

Ya vi esas expresiones que quería, ahora puedes dejarte ir todo lo que quieras.

Llevé mis manos hacia su cuello y allí los dejé, mientras su boca se juntaba con la mía. Mientras más metía su lengua en mi boca, más gemidos escuchaba ahogarse ahí, y sus golpes en mí no paraban.