-Me haces enfadar terriblemente, Lan Zhan.
-Lo siento.
El viaje a Lanling es pesado, por no decir tan largo que nos llevará entre tres y cuatro días llegar allá.
Durante el primer día sufrí una recaida, y ahora Wei Ying estaba llevándome en su espalda.
-Me alegra recuperar mi otro brazo, de lo contrario esto no hubiera sido posible.
-...
-Sé que no me culpas, pero ahora realmente necesitariamos a Chen qinq, así que te culpo a ti por haberme hecho enfadar en primer lugar.
-...
-¿Te dormiste?
-No... gracias.
-... No eres pesado, así que está bien.
-No me refiero a eso.
-Sé a que te refieres, Lan Zhan, preferiría que solo me borraran la memoria para ahora no tener idea hacia donde vamos.
-...
-¿No hay un encantamiento para eso?
-... No.
-Lo dudaste.
-...
-Cielos te escuchen, Lan Zhan, ya estás empezando a mentir.
-... Realmente no lo recuerdo y tampoco es necesario recordar.
-Hmm...
-Si olvidaras, ¿Qué querrías recordar?
-A ti, por supuesto.
-...
-¿Estás sonriendo ahora, Lan Zhan?, es una pena que no pudiera verlo.
-Caminaré desde ahora.
Quise bajarme, pero eso hizo que el agarré que tenía de mis piernas fuera más fuerte.
-No, está bien, tenemos toda ésta vida para seguir viendo tu sonrisa.
-... Y la tuya.
-La mía no es tan impresionante, la viste casi siempre cuando todavía vivía.
-Para mi es importante, esa fue una de las razones por la cuál quiero que vivas.
-... Ah.
La conversación cesó, pero Wei Ying no se detuvo en ningún momento, sus pasos son más firmes y decididos, y yo tengo que ser igual.
No duró demasiado hasta que estuve de nuevo en el suelo, sintiéndome mejor luego de darle un descanso a mi cuerpo.
-Realmente no lo entiendo.
-... Hablas sobre el rechazo de la energía resentida, ¿Eh?
-Jamás te vi tener estos síntomas.
-... Los tuve.
-¿Qué?
-Para ti son recaidas, yo tenía suerte de poder despertar en una semana.
-Una... semana.
-Sí, pero nunca las tuve seguidas, de no ser por el amuleto que... ya no está.
-...
-Creo que todavía no aceptas esta nueva energía, tu cuerpo la recibió, pero tu mente aún la ve como un veneno.
-No puedo ver ese veneno como algo bueno cuando durante toda mi vida la traté como tal.
-Lo comprendo, no te estoy regañando.
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No hay un final
FantasyJusticia e imprudencia. El camino que Wei Wu Xian tomó costó muy caro para todos los que alguna vez lo conocieron. Su última batalla lo dejó herido tanto fisica como mentalmente. Decidiendo ir a morir, dejando todo atrás, se encuentra con una sospre...